𝗤𝘂𝗲 𝗽𝗿𝗶𝘃𝗶𝗹𝗲𝗴𝗶𝗼 [𝗖𝗲𝘀𝗮𝗿 𝗽𝗮𝗿𝗿𝗮 & 𝗧𝗻]

Capitulo 68

Puse mi mano en mi cabeza mientras cerraba un poco mis ojos, los estaba sintiendo calientes ya que el dolor en mi cabeza había aumentado.

César: Todo bien amor?- Pregunto viéndome fijamente, no dije nada y solo asentí con la cabeza, era más soportable el dolor de vientre que el de mi cabeza.- Te duele la cabeza verdad?- Pregunto sobando mi mano que tenía sobre mi cabeza y yo solo asentí.- Quieres ir al doctor?
Tn: Creo que si, no quiero correr riesgos- Dije quitando la mano de mis ojos y viendo a César.
César: Iré rápido por las cosas, quédate aquí- Dijo para después levantarse de su lugar y subir las escaleras rápido, yo decidí sentarme y esperar a César,  sabía que había posibilidad de que me dejaran internada y me daban un poco de nervios, y aunque ya toca que mi hija nazca, no dejan de darme nervios y un poco de miedo.

Sentí que César duro una eternidad arriba agarrando las cosas, cuando por fin logré verlo bajar las escaleras, cargaba en cada uno de sus hombros 2 bolsas, una donde traía las cosas de la bebé y otra donde cargaba mis cosas que necesitaría después de tener a la bebé y algunos papeles que llegaría ocupar.

César: Vamos amor- Dijo acercándose a mi, me ayudo a levantarme del sillón y yo con cuidado tome de su mano aceptando la ayuda, caminamos juntos hacia la puerta principal y me dio el pase sin soltar mi mano.
Tn: Puedo caminar sola amor, tranquilo- Dije soltando su mano y caminando al carro mientras César cerraba la casa.

Después de que César cerrara la casa, yo me subí al carro del lado de copiloto mientras César ponía las bolsas en la parte trasera, después César se subió de piloto, prendió el carro y tomamos camino hacia la clínica donde tenia planeado tener a mi bebé.

Tn: Llamare a Lillian- Dije para después tomar el teléfono de César y llame al número de Lillian.

Lillian: Bueno?- Dijo del otro lado del teléfono.
Tn: Hermana, vamos en camino a la clínica, ya tengo un poco de contracciones y he traído mucho dolor de cabeza- Dije para apretar mis labios y aventar mi cabeza hacia atrás, me había dado una contracción.
Lillian: Vamos para allá hermana- Dijo inmediatamente.
Tn: No hermana tranquila, te llamaba para ver si podías quedarte con los gemelos mientras César esta conmigo en la clínica.
Lillian: Claro que si hermana, se los dejare a Carlos para ir contigo- Dijo rápidamente
Tn: Si hermana, muchas gracias- Dije y reí un poco por la insistencia de mi querida hermana, Lillian no dijo nada más y corto la llamada.

El camino a la clínica se me estaba haciendo un poco pesado ya que cada vez me daban las contracciones más fuertes, no quería que César se diera cuenta ya que se pondría nervioso y no quería eso.

Al llegar a la clínica César antes de apagar el carro volteo a verme y puso una de sus manos en mi pierna.

César: Me esperas aquí?, para ayudarte a bajar.
Tn: Tranquilo amor, puedo bajarme sola- Dije dedicándole una sonrisa
César: Segura?- Pregunto alzando una ceja y yo asentí con la cabeza.

César apago el carro y ambos nos quitamos el cinturón, al mismo tiempo salimos del carro y al bajarme me recargue un poco en la puerta ya que una contracción había vuelto, cada vez eran más fuertes y se me dificultaba más el poder caminar pero tampoco quería verme muy dramática, queria poner un poco de mi parte.

César: Todo bien?- Pregunto apareciendo por un lado de mi mientras sobaba mi espalda, yo solo asentí con la cabeza.

César rápidamente agarro las mochilas de la parte trasera y con ayuda de el caminamos juntos hasta llegar a la entrada de la clínica.

César: Es en el tercer piso, crees aguantar el elevador- Pregunto antes de caminar hacia el elevador.- Si no puedes pido una silla de ruedas amor- Dijo sobando mi espalda, una contracción había vuelto nuevamente y esta si fue más fuerte ya que me había quitado un poco más el aire, asentí con la cabeza mientras apuñaba mis ojos.

Espere un tiempo y después de que la contracción desapareciera, comenzamos a caminar hacia el elevador.

César llamo al elevador y después de 3 minutos aproximadamente se abrieron las puertas del elevador, de el bajaron 2 enfermeros, hombre y mujer, ambos nos sonrieron y la chica hizo una mueca de dolor ya que yo estaba un poco inclinada por el dolor de las contracciones.

Enfermera: Creo que nos iremos de regreso con ustedes, por alguna emergencia con la nueva mamá- Dijo sonriendo y César y yo reímos bajo.

Entraron nuevamente los dos enfermeros y depues entramos nosotros, se cerraron enseguida las puertas del elevador y César marco el número 3, sentimos como el elevador comenzó a moverse y una contracción regreso nuevamente, recargue mis manos en una pared del elevador mientras abría un poco mis piernas, cada vez aguantaba menos las contracciones.

César solamente sobaba mi espalda y los enfermeros me veían fijamente.

Enfermera: Trate de controlar su respiración,  eso le ayudara mucho- Dijo acercándose a mi.

Antes de llegar al tercero piso el elevador paro y se abrieron las puertas, comenzó a entrar más gente y mis contracciones cada vez eran más fuertes pero trataba de controlarme un poco.

Aun en la misma posición que ya estaba comencé a respirar por la nariz y soltar por la boca, no estaba aguantando pero tenía que hacerlo, no quería tener a mi bebé en un elevador, movía mis caderas de un lado a otro mientras César seguía sobando mi espalda, el camino hacia el tercer piso se me estaba haciendo eterno.

Enfermero: Llegamos- Dijo por fin, alce mi cabeza y mire la puerta del elevador abierta mientras la enfermera ponía su mano en la puerta para que no se cerrara, César tomó una de mis manos y me ayudo a salir con un poco de dificultad ya que el ya cargaba con las dos mochilas.- Siéntense en la sala de espera, traeré una silla de ruedas, mientras yo la preparo usted entrega el papeleo- Dijo el enfermero viendo fijamente a César y el solamente asintió.

El enfermero se fue hasta que logró desaparecer de nuestra vista y César se sentó al lado mío.

César: Todo estará bien, tu tranquila, si?- Pregunto sobando mi mejilla con su pulgar, cerre bien ojos suavemente y asentí con la cabeza mientras las lágrimas amenazaban con salir, estaba bastante nerviosa y con un poco de miedo.- No me voy a separar de ti ni un segundo, ni de ti ni de nuestra pequeña- Dijo para después sobar mi vientre.
Enfermero: Listo, me acompaña?- Pregunto llegando con una silla de ruedas, César me ayudo a levantarme y enseguida a sentarme en la silla.
César: Puedo ir con ella?- Pregunto viéndo fijamente al enfermero.
Enfermero:-negó con la cabeza- ya que este preparada en quirofano lo haremos pasar- Dijo viendo a césar y el volteo a verme un poco serio.
César: Te amo, okey?, todo saldrá bien- Dijo para después besar mi frente y una lágrima salio de uno de mis ojos y César la limpio- En un momento nos vemos- Dijo sonriendo de lado, dio un beso en mi frente para después depositar uno en mis labios y sobo mi vientre.

El enfermero se dio la vuelta y junto a él me llevó en la silla de ruedas, lágrimas seguían saliendo de mis ojos.

César: Te amo amor- Dijo en alto César y yo solamente pude sonreír y agache un poco mi cabeza, lo necesitaba ahora mismo.