Rubia Sol (TERCER LIBRO)

Capítulo 14

Trouble - Metronomy

I don't want to go out
You don't wanna stay in
I guess we're gonna argue again

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Al día siguiente Roseanne pudo ingresar al edificio de la mano de Talia y dos guardaespaldas que su manager había enviado para socorrerla. Normalmente no andaba con seguridad porque a pesar de que era una actriz reconocida, no era acosada normalmente por paparazzis. Ahora con la situación actual, definitivamente tenía que plantearselo.

La incógnita de cómo toda esa situación había escalado en Corea estaba en su mente, en Estados Unidos lo comprendía... Pero, que todo hubiese explotado en este país era extraño. Lo que si sabía era que alguien de la prensa se había encargado de divulgar el video de Lisa y ella en el auto nuevamente. Como un recordatorio para todos y distorsionando la verdad mucho más.

Al llegar al sitio lo primero que hizo fue buscar a Lisa, más allá de su encuentro bochornoso con su ex, lo que le importaba principalmente era la seguridad de Lisa. Ella sabía lo mucho que significaba para la tailandesa ser sincera con Jennie respecto a todo, y que la bomba hubiese explotado de esa forma en sus narices era preocupante.

Por suerte la había conseguido en el baño, sana y salva pero embriagada hasta el cansancio. Rosé comprendía por qué quería adormecer sus emociones y si estuviera en su lugar probablemente tambien haría lo mismo. Así que, la obligó a tomar un baño y le aseguraró que todo estaba bien y que esa noche cuando estuvieran donde los Kim tendría la oportunidad de explicarse y redimirse.

Le dolía mirar a Lisa tan rota, pero algo dentro de ella le decía que Jennie comprendería la situación y probablemente estaría dolida por un tiempo, pero Lisa tuvo una metamorfosis en base a la persona que quería ser para la morena. Tenía que escucharla al menos, y si la perdía de nuevo la perdida sería para Jennie directamente, valga la redundancia.

Aunque entendía ambos puntos de todas formas.

Ocho horas después de llegar al departamento y tan solo faltante media hora para montarse en el auto de Lisa y ver cara a cara a la otra Kim que no deseaba ver, Rosé se había enfrascado en una burbuja impenetrable de introspección.

La rubia realmente no disfrutaba hablar de las cosas que todavía no sanaban del todo.

Y, en realidad había hablado de muchos temas por un tiempo prolongado con Talia, la directora le había dado la confianza suficiente para meterse en conversaciones profundas como su resentimiento a su padre por practicamente haberse divorciado de ella cuando lo hizo de su madre, o la muerte de Taeyeon que a todos les había afectado de una forma diferente.

Pero hablar de Jisoo...

El tema de Lisa era un poco más sencillo, Talia comprendió de inmediato la actitud de Roseanne en torno a comprometerse y el miedo a la infidelidad después de que le contara todo el trasfondo de la tailandesa. Ciertamente había un sentido y siempre se había preguntado el por qué.

Por supuesto Roseanne lo habló desde el lado de los hechos y no tanto del resentimiento porque no lo sentía de ninguna forma por Lisa, pero si que afectó la manera en que se planteaban sus relaciones. En fin, ese no era el tema, era más que todo esa otra persona que también se había guindado de la situación de Lisa y era otra masilla de nervios incomodos que Rosé prefería no tener en su cabeza.

Talia sabía que algo profundo rondaba en la cabeza de la rubia después de verla todo el día sentada en el buró de la habitación, con un café que se enfrió hace más de una hora y que no bajaba de la mitad en consumido. Rosé se miraba extraña, es decir, no acostumbraba a ser una persona callada y retraida, mucho menos pensativa.