Capítulo 28

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My Favourite Game - The Cardigans

I only know what I've been working for,
Another you so I could love you more.
I really thought that I could take you there,
But my experiment is not getting us anywhere.

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Pasadas un par de semanas, el método de ensayos internos entre Rosé y Jisoo habían obtenido sus frutos. Jisoo pudo completar con éxito las primeras escenas de la película, y en realidad era un alivio que no fueran demasiado largas.

Sus monólogos eran mayormente con Nina, el personaje de Rosé, por lo que la intervención de esta fue de gran ayuda. Rosé detenía los ensayos cuando necesitaba dar una sugerencia y Jisoo aceptaba las críticas constructivas con buen humor.

La rutina era la siguiente:

En la mañana y tarde acostumbraban a grabar las escenas que habían ensayado el día anterior, desayunaban y almorzaban juntas en el set y después de tomarse un break iban directamente al departamento de la rubia. Más allá de las charlas competentes a la película y el trabajo en el que estaban involucradas, Jisoo y Rosé encontraron un tipo de refugio diferente en la amistad.

La curiosidad de Jisoo estaba en su mayor auge, de alguna forma quería comprender las nuevas tendencias de personalidad de la rubia. Al principio fue un poco complicado para si misma asimilarlo, y más que todo escuchar de parte de Rosé lo complicado que había sido para ella pasar las cosas a raíz de la ruptura.

Rosé le contó sobre Lisa y las cosas que habían pasado después de que se mudara para Tailandia. Con un poco de temor admitió que las hermanas adoptivas habían mantenido encuentros sexuales nuevamente incluso después de varios meses. Esta información no fue del agrado de una pelirroja, era como si de alguna forma hubiera reafirmado su posición de que Rosé seguía enganchada de Lisa para entonces y sucumbiría ante los deseos si tenía la oportunidad.

Esto último fue desmentido por la rubia cuando Jisoo lo había insinuado, lo hizo de forma tranquila y sin intenciones de crear un mayor problema por eso. Le explicó que sí sentía un deseo sexual por Lisa en ese entonces, pero que el amor romántico había pasado a un plano casi inexistente después de todo lo que había sucedido con Jennie.

Es decir, no podía decirle que de la noche a la mañana había dejado de amar a Lisa, pero era cierto que la llama se fue apagando con el tiempo debido y para cuando acordaron acostarse sin compromisos, Rosé la miraba solo de una forma carnal y en su mente no albergaba la posibilidad de que estarían juntas algún día.

Jisoo trató de comprenderlo a regañadientes, no era algo que disfrutaba saber. La imagen de su cuñada entre los brazos de su ex era algo de lo cual no quería ni imaginarse, suficiente había visto ese único video donde se besaban con pasión para sumarle el hecho de que efectivamente hubieron más ocasiones. Se preguntó si su hermana tenía conocimiento de eso, esperaba que sí, porque de su boca no saldría nada al respecto.

Ojalá fuera el único momento en donde hablarían sobre eso.

De igual forma, las conversaciones no solo fueron sobre temas incómodos. Entre comidas y descansos de ensayos, Jisoo estaba feliz de ir desenredando los hilos que constataban a la Rosé actual. Contrario a sus celos con Lisa, Jisoo escuchó pacientemente la forma en la que la rubia había descubierto un tipo diferente de placer sexual.

Sus ojos parpadearon con rapidez en varias ocasiones al escuchar algunos detalles, y sus mejillas se sonrojaron inevitablemente al imaginarlo, pero no podía tener la semilla de los celos con algo que había sucedido cuando ella no estaba.

Rubia Sol (TERCER LIBRO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora