Rubia Sol (TERCER LIBRO)

Capítulo 39

First Love / Late Spring - Mitski

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Ledge I'm on
Baby

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¿Por qué nadie le dijo a Rosé que la terapia en vez de hacer que dejara de llorar había hecho que las lágrimas se triplicaran?

—Maldita sea, basta. —Hipeó la rubia, tratando de controlar el exceso de agua salada.

Chaeryeong, la terapeuta que había empezado a ver tres veces las últimas dos semanas le extendió una caja de pañuelos.

—Respira hondo, no tienes que forzarte a dejar de llorar ahora.

—Pero no quiero seguir haciendolo. —Sollozó.

La Dra. Lee se compadeció en silencio, manteniendose callada por varios minutos hasta que Roseanne tuviera la capacidad de hablar de nuevo.

No había sido sencillo, ni la ruptura con Talia, ni sus ojos azules mirandola desde la lejanía en silencio y mucho menos los otros oscuros que la observaban desde el otro extremo. Era como un pequeño ratón encerrado en una jaula, con un gato blanco y otro negro caminando alrededor de ella, observando sus movimientos.

A duras penas había tenido algunas conversaciones con Talia, la mayoría referentes al trabajo y es que no podían tener comunicación nula por más que quisieran cuando la directora literalmente tenía que dirigir todos sus movimientos. En algunas ocasiones se sonrieron de forma apretada y consultaron por encima si se encontraban bien entre si, pero desacostumbrarte de una persona con la cual haz convivido cada día de tu vida los últimos dos años era dificil.

Por otro lado, Rosé había entrado en una pequeña crisis de impotencia porque ese viernes era el último día de grabación y por ende quizás la última vez que vería a Jisoo por mucho tiempo. La rubia solicitó una cita express con la Dra. Lee antes de tener que ir al set, todo para intentar buscar un poco de calma en las cosas y no terminar de desmoronarse.

—Tienes que hablar con Jisoo y tener una conversación desde el amor y el cariño que sientes por ella.

—La culpa me corroe, no puedo.

—¿No puedes o no quieres?

—No puedo. —Insistió la rubia con los ojos enervados.— No puedo ser tan egoísta, va a pensar que estoy acercandome a ella solo porque he terminado con Talia. Ya la tuve de segunda opción una vez, que se sienta de esa forma de nuevo puedo prevenirlo sí está en mis manos.

—¿Te has dado cuenta de algo?

—¿Qué?

—Asumes constantemente la forma en la que se sienten las personas, y no hablas directamente con ellas para saber realmente lo que piensan.

La rubia hizo una mueca ante ello.

—Tiendes a correr de las conversaciones incómodas, pero es suficiente. —Agregó la Dra. Lee.

Quizás es porque tenía miedo a tener la razón, o era porque la realidad era completamente diferente a la que se formulaba en su cabeza. Rosé le tenía miedo a lo desconocido, y más cuando las cosas no parecían andar a su favor. A veces era más fácil convencerse de una realidad que le convenga a enfrentar las cosas desagradables.

—¿Te has preguntado sí Jisoo podría tener los mismos intereses que tú?

Rosé bajó la mirada, en esa parte no podía engañarse del todo.