❤ || [ 𝟐𝟒 ]

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Izanami Uchiha:

Había pasado dos años completos viajando de la aldea en aldea. Pero luego de tantos años fuera de mi hogar, alejada de mis seres queridos, había llegado a la aldea de la arena, lista para poner a prueba mis habilidades de ninja, y ver si podía adaptarme a un lugar donde necesitaban de Shinobis que asistieran el cuerpo médico.

Al estar en una aldea había recibido muchas noticias de Konoha, Shinki siempre era honesto y amable conmigo para contarme lo que sucedía... Boruto había abandonado la aldea después del último ataque de Kara, Kawaki también se había marcado como desaparecido junto al séptimo Hokkage, Shikamaru había subido de Octavo Hokkage de Konoha y daba recompensas por el paradero de los dos hijos del séptimo, Sasuke tampoco hacía aparición alguna en los asuntos de importancia que se le solicitaba, mi hermana estaba a salvo según había escuchado y mi equipo era participe de los grupos de protección de la aldea. Recordé todas esas noticias mientras almorzaba aquella tarde, y al final de esos recuerdos las palabras de hace un mes que Shinki me había dicho luego de darme las últimas noticias que sabía de mi familia, «Iza, Konoha se está haciendo cada vez una aldea más protegida por los secretos que tienen que mantener lejos de las demás aldeas, sabes que puedes contar conmigo para lo que sea, pero todo sería mucho más fácil si solo tomarás el teléfono y marcaras a tú madre o hermana»

Aun recordaba esa conversación con Shinki, su mirada preocupada y luego paciente, tratando de comprender mis negativas. Yo misma me había prometido, el mismo día que le solicite al Kazekage permiso para poder quedarme como una ciudadana en Sunagakure, que no volvería a la aldea de Konoha, nunca más, a no ser que fuera con la cabeza de Code entre mis manos. Porque si volvía, era poner en riesgo a mis seres queridos, y cometer ese error de nuevo sería imperdonable...

Aunque no solo las razones políticas me frenaban... Llevaba meses en Sunagakure y aún me sentía culpable por mis sentimientos de cariños por Code, desde joven... ¿No les ha sucedido que cuando rompen con una pareja no dejan las primeras noches de recibir bombardeos constantes de los lindos momentos que pasaron juntos?, pues algo así me pasaba con Code, cada ciertas noches... Cuando me daba largas duchas con agua fría y veía los tatuajes que había dejado en mi piel...

Aunque... No había estado completamente sola esas noches. Debía admitirlo... Aunque a futuro podría ser un riesgo, había estado muy unida a Shinki, de formas que solo cuando era una niña estuve con Kawaki ― aunque me había tomado tiempo darme cuenta de que nos habíamos hecho unidos en ese sentido... ―, exactamente caí en cuenta cuando una tarde luego de ayudar en el hospital de la aldea, Shinki me invito a su casa a mostrarme algo y beber un poco de jugo que habíamos aprendido a hacer juntos...

Entre a su casa, admirando como siempre las hermosas pinturas que estaban en las paredes de su casa, aún no sabía quien las pintó, pero se me hacían las más hermosas de todas... Seguí a su cuarto, y fue cuando vi como su tocadiscos estaba moviéndose, la melodía comenzó a sonar. 

When we're out in a crowd laughing loud

And nobody knows why, se escucho la canción. Shinki me miro y yo camine lentamente hacia la cama, para sentarme a su lado, When we're lost at a club, getting drunk

And you give me that smile.

― Going home in the back of a car

And your hand touches mine... ― cantó Shinki con una sonrisa, a la vez que la canción seguía.

― When we're done making love

And you look up and give me those eyes... ― canté mientras me sentaba a su lado y cerraba los ojos centrándome más en el mensaje de la canción, que en mirarlo, sabía que si lo hacía me sonrojaría por completo.

𝓒𝓾𝓻𝓼𝓮𝓭 𝓔𝔂𝓮𝓼 |ᴋᴀᴡᴀᴋɪ ʏ sʜɪɴᴋɪ|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora