Final

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Habían pasado cinco años desde que todo pasó. Moa estaba bien, super sana y feliz, Riho, bueno, ahí anda.

Nuestras vidas siguieron su curso para bien, con Moa profundizamos nuestro amor y vínculo, Riho salió adelante con esfuerzo y apoyo constante.

Nunca les dije lo que me había pasado con Yui, decidí tenerlo como mi secreto, aunque hay una personita muy especial que sí sabía de la historia...

-Kikuchi Yui, pequeñita no vas a ningún lado- dijo Moa cerrando la puerta del mientras yo sacaba las cosas.

-Pelo mami, quieo il al lío- dijo nuestra hija de tres años, Yui.

-Irás de la mano de mami y mía, no puedes irte por ahí sola hijita- me acerqué a ellas con la mochila, la hielera y la canasta que habíamos preparado para el picnic de aquél día -¿Qué pasa si te pierdes o alguna persona mala te lleva?-

-Okis- infló las mejillas y se cruzó de brazos, era una pequeña adorable.

-Y todavía falta que llegue Riho- Moa consultó el reloj y me miró -Dame eso, vas muy cargada- tomó la canasta.

-Va a llegad tade- Yui seguía cruzada de brazos, había empezado a arrastrar sus zapatitos por el piso -La maduina es imputal-

-¿Impuntual?- sonreí, me puse a su altura y le acomodé algunos mechones que le salían de la coleta -Nunca mi amor, llegó a tiempo siempre-

-¡¡Ya estoy!!- gritó Riho, llegaba corriendo -Si les presto el auto hijas de puta es para que me lleven con ustedes, ¿Saben lo que me salió el taxi?-

-La niña imbécil- le tapé los oídos a mi hija -Nunca digas esas cosas princesa- la miré y besé su cabeza.

-Agradece que sé manejar Sayashi- Moa le tiró las llaves y sonrió.

-Por mi ahijada no más vengo a pie- agarró en brazos a Yui -¿Cómo estás enana?-

-No le digas así- le di un golpe en la nuca y nos fuimos a aquél gran árbol que ya tomábamos como nuestro.

La niña y Riho empezaron a hacer de las suyas, por lo que nos dejaron a Moa y a mí solas.

-No puedo creer que hayamos llegado hasta aquí- sonreí y apoyé mi cabeza en su hombro -Siendo felices y con una hija-

-¿Te arrepientes por no querer casarnos?- sonrió y me pasó el brazo por los hombros.

-Como dijimos antes, no necesitamos un anillo en el dedo o un certificado de casamiento para poder ser felices Moa- puse mi mano sobre su pecho, la cicatriz era palpable -Te amo y quiero vivir el día a día a tu lado, disfrutar de cada momento como si fuera el último, ver crecer a nuestra hija juntas, llegar a viejas y aún amarte con la misma fuerza que antes-

-Contigo aprendí a amar, aprendí que el amor es algo que se cultiva y crece Suzuka- me hizo mirarla, su rostro muy cerca del mío -Aprendí a ir despacio, amarte con calma y disfrutar de cada momento, que por que las cosas vayan mal nos tendremos una a la otra siempre- empezó a llorar y yo sentí tanta emoción -Desde que entraste a mi vida todo a sido hermoso, aún con las peleas y llantos, fuiste y serás lo más hermoso que me pasó en la vida, nuestra hija y tú son lo que más amo en este mundo-

-Ay Moa- me largué a llorar, dijo todo lo que yo también sentía, lo que mi corazón gritaba en esos momentos, lo que tantas veces pensé.

-Te amo Nakamoto Suzuka- besó mi cabeza y me pegó a ella.

-También te amo- la abracé por la cintura fuertemente y sonreí aún llorando, nuestra vida amorosa era especial, aún con nuestros roces y malos momentos, era lo más especial y hermoso de mi mundo.

-¡¡Mamá, mami!!- escuché el grito de Yui, venía corriendo hacia nosotras.

-Mi torbellino precioso- Moa abrió los brazos y la pequeña se aferró a ella como un koala.

-¿Podque llola mamá?- mi niña siempre muy observadora.

-Porque estoy feliz mi amor- sonreí y besé su frente -Porque amo a tu mami, a tu madrina y, porque sobretodo, te amo a ti- acaricié su espalda.

-¿Y a la tía Yui?- señaló al cielo con su dedito.

-Y a la tía Yui también- asentí, Riho se tiró a mi lado -Ay, vengan acá, abrazo familiar-

Por poco y se me tiran encima esas tres, con una sonrisa enorme pensé en que Yui también estaba ahí en esos momentos, abrazando nuestros corazones.












EEEEEEEEEEEL FINAAAAAAAAL MIS PERROS BELLOS, espero hayan disfrutado de esta hermosa historia al igual que yo disfruté escribirla, muchas gracias por su apoyo, los amo a todooooos  🤘🤘

En ti encontré el amor Donde viven las historias. Descúbrelo ahora