Capítulo 14

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Kiran Anderson.

16 de septiembre de 2023

Estoy llegando a la residencia en donde se queda Estefanía, frunzo el ceño cuando la veo en la acera y hablando con un tipo, ella no se ve nada feliz con el, y el ni se diga, ya que se nota que le esta hablando fuerte Mi chofer aparca justo al lado de ellos, el tipo se queda viendo la camioneta con el ceño fruncido, mientras mi muñeca se tensa más, no me gusta como este tipo la hace sentir, abro mi puerta dejando que ellos me vean.

-Hola muñequita, ¿estas lista?

Ella se me queda viendo y trata de darme una sonrisa, pero antes de que pueda hacerlo, el tipo habla.

-¿El es con el que hablabas a noche? Enserio Estefanía, ¿un lisiado, no podias conseguir algo mejor?

Esas palabras me hicieron retroceder con lo que estaba sintiendo hacía mi muñeca, era cierto que ella puede conseguir algo mejor, ¿Qué puedo ofrecerle yo estando en una silla de ruedas? No podría ir a caminar con ella a la playa, no podría cargarla, estrujarla en mis brazos mientras la hago girar, no podría cuidar de ella por mi mismo, no podría hacerle el amor. No soy digno de la maravillosa mujer que es ella.

-¿Y a ti que te importa? El es mucho mejor que tú, John. Tú podras caminar pero eres un asco de persona, yo más que nadie lo se, no olvides que fue lo que me hiciste.

El rostro del tal John reflejo tristeza por un momento, sin decir nada más se fue. Estefanía me da una sonrisa de disculpa.

-Lo siento por eso, señor Anderson.

Aun con ese sentimiento feo oprimiéndome el corazón, solo asenti brevemente y deje que se subiera, coloco su pequeño bolson en el piso, el camino a casa fue en un silencio incomodo, mi mirada iba perdida en la ventana.

¿Enserio fui tan idiota para pensar que tendría una oportunida con ella?

¿Qué ella me amaria como soy?

Un padre soltero de 37 años y en silla de ruedas sería lo ultimo que una chica de apenas de 21 años quisiera.

-Pense que vendría con Stefan.

Su suave voz me saco de mis pensamientos, su cabeza esta agachada y no me ve, mueve sus dedos con nerviosismo.

-Se le olvido arreglar su cuarto y no quería que pensaras que es un niño revoltoso, pero te dara la excusa de que te estaba preparando un dibujo sopresa por tu llegada.

Voltea a verme con una sonrísa divertida, lo cual hace que se eleve la comisura de mi labio, con ella no puedo evitar sonreir, hasta por muy pequeña que sea la sonrisa, ella siempre ve mis labios y suspira, no se si se dara cuenta de eso, pero no evita hacerlo cada que le sonrío.

-Pues haremos como que no se nada, me hare la sorprendida.

Niego divertido, todo el malestar que sentía se esfumo.

-Ustedes estando juntos es un gran sacrificio para mi tener que aguantarlos.

-Ni que fuermos tan revoltosos, no exagere.

-No lo hago.

Sin poder evitarlo, mi leve sonrisa desaparece.

-¿Quién era ese tipo que estaba contigo?

Su sonrisa se borra y su cuerpo se tensa, por un momento pense que no me diría, y no tendría porque molestarme, despues de todo es su vida privada.

-Es mi ex novio.

Ahora siento celos del tipo, pero a la vez odio, con su actitud de hoy supe que era un imbecil total, el pudo tenerla, adorarla y amarla, mientras que yo no crea pasar de la zona jefe-empleada.

Ámame a tú Manera Donde viven las historias. Descúbrelo ahora