High Hopes Slytherin's Version

4.13 La primera vez...

Al día siguiente, era sábado, Regulus se levantó a las 14, comió y se fue a Hogsmeade solo. Quería respirar un rato, fuera de los susurros y los rumores. Ahora era el cuerudo de Hogwarts.

Estaba en la barra hablando con Madame Rosmerta, que le contaba su época en Hogwarts, hacía unos ocho años, o así que se había graduado. De hecho, había estado en el club de natación con Andrómeda.

-Rosmerta, ¿cuánto es? -Pidió una chica, que acababa de comerse unos churros con chocolate.

-Cinco galeones, querida. -Respondió Rosmerta.

-Oh mierda, me he dejado la cartera... No puede ser, soy tontísima! -Decía la chica, revisando su bolso. -Espera... No me lo puedo creer, no tengo dinero. ¿Te importa si voy a Hogwarts a buscarlo?

-No pasa nada, yo se lo pago Rosmerta. -Dijo Regulus dándole unas monedas a Rosmerta.

-Oh Merlín, gracias Regulus. -Agradeció la chica.

Y entonces Regulus se giró a ver quién era, porque sinceramente, no se había fijado, y porque lo llamaba por su nombre. Era Cassandra Zabini.

-No te preocupes Zabini. -Asintió Regulus.

-Oye, me he enterado de lo de ayer... Lo siento mucho, Vicky es una asquerosa. -Lamentó Cassandra.

-¿No es tu amiga? -Preguntó Regulus.

-¿Yo de esa? -Río Cassandra. -Pero sí es superdesagradable. No me cae nada bien.

Regulus río irónicamente. -A mí tampoco, ahora.

-Perdón por interrumpir, ¿Qué ha pasado? -Preguntó Rosmerta.

-Nada, mi novia me engañó en una fiesta. -Respondió Regulus, encogiéndose de hombros.

-¡No me digas! ¿La rubia? Qué pena Black... -Negó Rosmerta. -Os invito a una copa a los dos. -Asintió.

-Pero somos m-

-Encantados Rosmerta! -Interrumpió Cassandra a Regulus.

Rosmerta se fue a por la bebida.

-¿Eres tonto? -Río Cassandra. -¿Ibas a decirle que somos menores?

-Bueno yo-

-Merlín, Regulus. -Río la pelinegra. -Se te tiene que enseñar muchas cosas.

Cassandra y él ya habían hablado otras veces, estaba en la misma habitación que Dorcas. Era pelinegra, de pelo ondulado y piel morena, labios siempre pintados de rojo.

Se tomaron primero unas copas, luego Regulus invitó a una segunda ronda, y una tercera... Cuarta y quinta. Y luego una sexta y una séptima.

Hasta que al final se fueron a dar unas vueltas por el pueblo, reían como locos, a Regulus le daba todo vueltas, eran las 21 cuando volvieron a Hogwarts, y se hicieron las 22 cuando llegaron a la sala común.

Los recuerdos están borrosos, pero recuerda besarse y subir a la habitación de Cassandra...

El sol del domingo se asomaba por las ventanas, cuando Regulus finalmente abrió los ojos. La cabeza le dolía como si hubiera sido machacada por un martillo. Trató de recordar lo que había sucedido la noche anterior, y las imágenes comenzaron a tomar forma en su mente...

Regulus sintió un nudo en el estómago al recordar los detalles de la noche con Cassandra Zabini. No podía creer que su primera vez hubiera sido bebido y con alguien que apenas conocía, por más guapa que fuese Regulus hubiese preferido otra situación. Se sentía avergonzado.

Levantó la sabana, los dos estaban desnudos, se levantó de la cama con cuidado, tratando de no despertar a Cassandra, quien parecía que aún dormía. Se vistió rápidamente y abandonó la habitación, con la sensación de que estaba huyendo de una situación incómoda.

Merlín... ¿Su primera vez había sido con Cassandra Zabini, borracho?

Debían ser las ocho o por ahí, Regulus bajaba las escaleras y se encontró de cara con Lucinda.

-Regulus- ¿Qué haces en la torre de las chicas? -Preguntó Lucinda, estaba con el pelo mojado, debía haberse duchado hacía poco, talvez había ido a jugar a Quidditch con William antes del entreno de Ravenclaw.

-Pues... He venido a hablar con Dorcas. -Explicó Regulus.

-¿Por eso me acabo de cruzar a Dorcas yendo para la torre de los chicos? -Preguntó Lucinda, riendo.

-Exacto, he venido a hablar con ella, pero como no está, voy a buscarla. -Respondió nervioso, sabía que estaba mintiendo mal.

-¿Y lo de llevar la bragueta desabrochada? ¿Por qué? -Río Lucinda, señalando el pantalón del chico.

-Pues...

-¿Vas borracho? -Preguntó Lucinda divertida.

-Acabo de tener mi primera vez, borracho. -Admitió Regulus. -Es vergonzoso.

-Joder, ¿y estás bien? -Preguntó la castaña.

-Si supongo. -Dijo Regulus. -No estoy muy consciente ahora mismo.

-Merlín, Regulus, se te tiene que tener vigilado. -Río Lucinda. -Cualquier cosa me dices.

-Claro. -Asintió Regulus.

-Ah, y lo siento por lo de antes de ayer, en la fiesta, Wood me lo ha contado todo... Lo grité como una loca delante de todos, lo siento... -Se disculpó.

-No te preocupes, gracias por decírmelo. -Sonrió Regulus.

-Esa chica no te merece, búscate a alguien más elegante y decente, quiero ir a tu boda y llorar recordando tus tiempos en Hogwarts. -Sonrió Lucinda desordenándole el pelo, a pesar de que era más bajita que él.

-Lo intentaré. -Asintió Regulus.

Regulus salió de la Sala común, se acordaba de todo, recuerdos borrosos, pero no había lagunas...

No quería explicar demasiados detalles, pero tenía imágenes muy lucidas, que prefiere no describir.

Pero estaba claro que no era ni la primera ni la segunda vez de Cassandra.