3a Parte

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Después de que Gege, la llevase a su casa, tras darle alta el hospital, a Sanem, se le cae del coche, el cuaderno de notas. Al enterarse todos, del accidente, se presentan todos en la casa de ella, haciendo que sus padres se asusten. Esa mañana, Nihad y Mezquive, siguen peleando, por los productos orgánicos, y les dice a sus hijas, que lo prueben, que es muy sano. En la misma noche, Ayham, y Geygey, tienen una pelea, a la que ella, le enseña un cuchillo. En el calor de la hoguera, él recuerda las últimas palabras, que ella dijo. También Musafer, y su madre, y le dice que le gusta, Gollit, hacen las paces y esta le dice que vuelva a casa. Pero él le dice que antes vaya a la tienda, para que se hagan socios. No tardan, en llevar amigos, para los descuentos, en las compras. De pronto, ella escucha, el teléfono. Es un mensaje, de Gege, diciéndole que se le había caído el cuaderno, y que sin querer, lo había leído. Ese echo, hará que posiblemente, Sanem cumpla su sueño, de ser escritora.

-- Uff...presidenta, ya me voy. -- le dijo, Musafer.
-- Adónde, vas?-- le preguntó, Mezquive.
-- Bueno. Es que...cogi unas muestras, de la tienda, e iré a la agencia, y las reparto. Así que iré al mundo de la publicidad, para dar el salto en el barrio.
-- Es mejor, que no vayas ahora. Mis hijas ya están allí. No causes, problemas.
-- Oh...yo no estoy nervioso. Somo adultos. No tengo ningún problema, con Can, ni con, Sanem, tampoco. Bueno. Ella es de nuestro barrio. Voy a ver, a Geygey, y también, voy a ver, a Gollicita. Porque ella, siempre a apoyado, a este negocio. Y además, tiene buenas ideas. Tiene holluelos. Tiene una dulce, carita, y además, es bajita. Me encanta, esa niña-- risas.
-- Pues esperame. Voy contigo. Te voy, a acompañar. Por lo que pueda pasar. Eso nunca, se sabe.
-- No voy a causar, problemas. No confías, en mí. Eres como una secretaria.-- Dios, muchas gracias. Estoy muy agradecido, por darme, tantas alegrías.
Pasa corriendo, un coche.
-- Ay, Dios. Casi me atropellan, por darte las gracias. Aún así, te agradezco, todo lo que haces, por mí.
-- Pero, esperame. Esperame-- le dijo, Mezquive.

-- Escuchad chicas, vamos ha grabar.
-- salid todos, vamos ha grabar.
-- Grabando!!

-- Qué rayos, hago aquí, Aderen? -- le preguntó Embre.x
-- Tú sabes, mejor que nadie, que esto es muy importante, y tenemos, que enseñarselo y ya esta.

--Tres, dos, uno.
-- Escena cinco. Toma cuatro.
Empieza, la grabación.
-- Ahora tienes, el banco, en el móvil. Con la aplicación, todo es más, fácil. -- dijo Osman, en la grabación.
-- Corten. Tomad todos, un descanso. Que venga alguien, de producción, ya.

-- Sonríe, un poco...vamos! La grabación, es importante.
Leyla, en ese momento, daba chocolate caliente. Y Embre, la ve con Osman.
-- Ah, muchas gracias.
-- De nada. -- le dijo. -- Aquí tienes, cielo. Tendrás frío-- le dijo, dándole una taza de té caliente.
-- No te hubieras molestado. Lo hubieran traído, los chicos-- le dijo, Osman.
-- No es, ninguna molestia.

-- Vamos a saludarles. Ven.-- le dijo, Aderen. -- Osman? Te ves, muy guapo, querido.
-- Gracias, Aderen.
-- Hola. Como estáis? Queréis, un poco de té? Puedo pedir, más.
-- No-- saltó, bruscamente, Embre--No sabía, que estabas aquí.
-- E...es la hora, del almuerzo.
-- Yo insistí. Y no, se negó-- le dijo, Osman.
-- Osman. Puedes venir? Verás, a surgido un pequeño problema, en producción. -- le interrumpió, la productora.
-- Muy bien. -- Cariño? Quieres venir conmigo, al camerino?
-- No...gracias...estoy bien.
-- Tomaremos, el te.
-- Bueno...cómo quieras-- le dijo Leyla, al tiempo que miraba a Embre.

-- Aderen, quizás tendremos, que cambiar la habitación. Al director, no le gusta.
-- Ah...no me lo digas. Pues será mejor, que yo hable, con él. -- Bueno? Quieres saludar, al director? --Porque esta es la ocasión, no le convence. Eh..?-- le preguntó, al director.

-- Han probado, la leche de coco? Y el aceite, de argan? Prueba-- le dijo, a Gollit-- Vamos, a aplicarlos, sobre la piel. Van ha quedar, como la de un bebé. Suavecita. Tersa.-- risas-- y ahora, les va a gustar. Bien. Ahora vamos a ver, el jabón orgánico. Sirve, para todo. Así que, hacen que luzca, sano y brillante-- mas risas-- no me canso, de hablar de sus beneficios. Este jabón, te quita, la caspa. Te lo deja sano, y bastante brillante. Es muy buena. Hasta te ayuda, a fortalecer todo...el sistema circulatorio.-- les Musafer.
-- Musa. Qué haces, aquí?-- le interrumpió Geygey, gritando, recogiendo los folletos. -- Qué haces? Estás loco? Esto, no es un mercado.
-- Gengis. Calmate.
-- Parad-- les dijo, Gollit.
-- Esto no es muy mercado. Es una oficina, decente.
-- Oye. Cállate.
-- Le he acompañado, para que no se perdiera los nervios. De verdad--dijo Mezquive.
-- Dije no me hablaras., de las ventaja de la salsa de tomate.
-- Déjame. Déjame. Déjame.
--Geygey. Estás loco? -- le dijo, Gollit.
-- Qué está pasando, aquí?-- interrumpió ella.
-- Esto es, miel de pino.
--Esto parece, un pequeño bazar.
-- Si fuera bazar, con la policía, es mejor, era pelear con Gengis. Bigotote-- le dijo, Musafer.
-- Qué pasa aquí? Qué es eso? Todos están, amontonados, y sin trabajar -- interrumpió, la señora Huma.
-- Les estaba diciendo que no se amontonaran, señora Espuma . Para, no...quisieron, hacerme caso-- le dijo Geygey, nervioso.
-- Querida señora. No he escuchado, bien su nombre. Pero, los productos orgánicos, y...ahora solamente, lo estamos promocionando, y darle a conocer. Y del mismo corazón, del barrio, y...queremos abrirnos, un poco de camino. En este mostrador, tenemos productos, de nuestra exposición. Todo a su disposición. Querida señora. Por ejemplo; una exposición, querida señora-- le dijo, Musafer.
-- Tú tienes, algo que ver, con esto?-- le preguntó, la señora Huma, a Mezquive.
-- Sí...Musafer, y yo, abrimos una tienda, para vender productos orgánicos. Esto, es de nosotros.
-- Excelente. Porque...tiene que haber, más mujeres, emprendedoras y con algo, de estilo. Porque, eh...en un barrio, de mala muerte, eh...no tienen, futuro.
-- No se crea usted, que mí madre, ha encontrado, una gran sensación, en el mercado, de los productos orgánicos. Si..? Mientras otros, veían, telencas, otros tenían, símbolos de debilidad. -- le ella.
-- Sí, exacto.
-- Efectivamente. Tenemos un estudio, de mercado, y vamos, a aprovechar, esta brecha. Es un sector, que aún tenemos, sin explorar. Tenemos, todo tipo, de productos orgánicos. Desde trigo. Miel de pino. Y hasta, el tomate. p El negocio, va viento en popa. Mi querida, señora.-- Así que.a, aceitunas, sin lonjas. Comprad. -- le dijo, Musafer.
-- Aceite de enebro...con romero, y aloe vera-- dijo, la señora Huma.
.sí...-- dijo Geygey.
-- Nuestro aloe vera, es de lo mejor de lo que hay-- le dijo, Musafer.
-- En Estados Unidos, había estos productos. Pero, en Turquía, no los encontraba-- le dijo, la señora Huma.
-- Un poquito? -- le dijo, Geygey.
-- Sí, claro! Pues voy, ha comprarlos.
-- Pues mira-- intervino Mezquive-- te recomiendo, esto. Es aceite, de árbol de te. Es natural. Estoy viendo, que el pelo...lo tienes un poco estropeado, de usar tintes artificiales. Verás que bien, te queda, con los productos.
-- Es difícil, tener el pelo sano. Lo químico, lo daña. Y los orgánicos, los sana.
-- A...y. Y también tenemos, acondianador. A base, de ortiga muerta. Y es, fantástico, para las puntas abiertas. La ortiga muerta, te va...
-- De verdad?
-- Mm...
-- También, me lo quedo. Lo probaré.

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