Cap 26

410 11 1
                                    

Después del asunto del fantasma, Sanem, llega a su casa, con los regaños de su madre. En la oficina, ella le cuenta a Geygey, que pasó la noche con él, en la cabaña de la montaña. Diciéndole que era una relación entre amigos. Nada más. Por otro lado, Aylim, llama a Embre, para quedar, y tomar un café y contándole lo ocurrido. Esta le dice que sería una buena oportunidad, para decírselo a su madre, ya que ellos no lo saben. Embre, le dice que no haga nada, antes de que él se entere. Pero ella, no pierde la oportunidad, para seguirles, y encontrandolos felices. Aylim, escondida tomaba fotos con su móvil.

-- Haber quién es, mejor fotógrafo, Can Divit-- dijo Aylim.

-- En qué piensas? -- preguntó Embre, a Leyla.
-- Pues...estaba pensando, en la serie, sabes? Sabes si hay, episodios nuevos?
--Ah... Pues sí. Ya han salido.
-- Las has visto?
-- Aún no. Podemos verlos juntos.
-- Claro, mejor.
-- Nos podemos quedar, esta noche, y pedir una pizza buenísima.
-- Ha...y, ojalá pudiera. Porque me apetece muchísimo. Pero tengo que ir a casa. Mi madre está nerviosa, desde el robo.
-- Es verdad. Pero tenía, que intentarlo.
-- No creo que pueda, en toda la semana.
-- Pues ya, quedaremos la que viene. En mí casa.
-- Vale. Perfecto.
-- Te llevo, a casa?
-- Si quieres, déjame en el barrio, e iré andando a casa. No te quiero, molestar.
-- Ay...Leyla. No me molestes tanto.

-- Ahh! Jaja. Esta es buena. A qué me da bien bailar, Can?--preguntó ella, escuchando música en el coche.
-- Sí...Ya lo veo.
-- Jajajaja. Muak.
-- Oh...por fin, lo veo. Lo echaba, de menos.
-- Sí. Estoy a tú lado.
-- Así es el amor. Yo siempre, te echo de menos.
-- Ay, lo sé. Me encantaría, dibujar un corazón, tan grande, con nuestras iniciales por toda la ciudad. Qué lo sepa, todo el mundo. Y no sólo, las personas. También, los peces. Los pájaros. Los insectos. Los gatos. Quiero que lo sepan todos.
-- Claro, que sí. Cariño.
-- Ahora mismo,voy ha empezar.-- Sanem...quiere a Cannnn. Sanem, y Can, se aman. Vale? Me oyes? Estamos, enamorados. -- gritaba asomando la cabeza, por la ventana del coche.-- Uff, que bien, me he quedado-- le dijo a él.
-- La cosas, empiezan a ir bien. La agencia. Las campañas. El negocio. Está, muy bien.
-- Qué cosas.
-- Pescado?
-- Y tú, pececito?
-- Te pregunto, si te apetece tomar pescado?
-- Ah...vale. El hambre, es el enemigo, del romanticismo.
-- Hola, Nerin? Cómo estás? -- preguntó él, por teléfono. -- yo muy bien. Oye, una pregunta. Hoy tenéis, anchoas? Reservame una mesa, para dos. Y si puede ser la mesa de la esquina...mucho mejor. Eso, con vistas. Una velada romántica, para dos. De verdad. Cómo te gusta, tomarme el pelo. Jaja.
-- Jajajaja. Pués vamos, para allá. Vale? Hasta ahora. Vale. Adiós.

-- Hola Ayham-- respondió ella, al teléfono.
-- Hola...Sanem.
-- Cómo estás?
-- Bien. Y tú?
-- Absorbida, por el amor.
-- Pues...por aquí, las cosas están tensas.
-- Qué cuando Can, te llevó a casa, Aysum, os pilló.
-- Cómo?..Qué??
-- Qué ha ido ha contárselo, a tú madre. Y se ha puesto, como una loca.
-- En serio?
-- Qué pasa? -- interrumpió él.
-- Aún, hay más. Tú padre, también lo sabe todo.
-- Y a él, quién se lo ha contado?
-- Pues...no te lo vas a creer. Se lo ha contado Isam, y tú padre, se ha vuelto loco. Y se ha tirado a él, agarrandole del cuello ha pegarle. Mi hermano, ha tenido que intervenir.
-- Ayham. No me lo digas.
-- Así qué, imagínate como está el patio. Ahora mismo, está revolucionado.
-- Ayham...ahora mismo voy. Luego, hablamos.
-- Qué pasa? Está todo bien? -- preguntó él.
-- Ayham dice, que todo el mundo, está cotilleando, sobre nosotros. Y mis padres, se han peleado, con medio barrio.
-- Pero...qué les han contado?
-- Me vieron, cuando me llevaste a casa, y les han dicho, que estamos juntos.
-- Es...es verdad.
-- No!! Can, en mí barrio, las cosas, no son así. En mí barrio, la gente se prometen, y se casan. No están, juntos. Éso sólo pasa, en la tele.
-- Y...qué hacemos?
-- Qué, que, hacemos? Acercarme al barrio, y bajame dónde sea. Ya voy yo.
-- No comes?
-- Qué va. Si somos, la comidilla, del barrio. Tengo que encontrar, una solución.
-- Vale.
-- Uuff. Cómo estarán, mis pobres padres?

 Soñando Contigo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora