Cap 16

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Ayham y Musafer, idean un plan para provocar los celos de Geygey, cosa que dice que aún está preparado para una relación. Mientras, en el parque de atracciones, de disputa entre quién ganará, si el equipo de Aylim, o el de Aderen y en ése momento, llegan Embre, con Leyla y ella entonces se enfrenta a él.

Y de qué, te van ha servir? Crees que lo vas a olvidar, así, como así? --preguntó Embre. Embre.
-- No puedo. Como cree que voy ha olvidar, las mentiras que le dado? Pero si incluso ayer mismo, con el tema del anillo, le mentí, a la cara.
-- Quizás deberías dejarlo -- dijo Embre.
-- Por qué, le molesta tanto, nuestra relación? -- preguntó ella.
-- No quiero, que Can sufra. Y tú, tampoco.
-- No se preocupe. Nuestra relación, no durará. No, sufrirá.
-- Y, eso? Yo pensaba, que iba en serio.
-- No. Se siente, mejor? Cuando llegue el momento, le dejaré sin romperle el corazón. Pero, déjeme en paz.-- Buenas noches.
Pero que no sabían, ninguno de los dos, es que él, lo había oído todo y sabía que hacer. Seguiría con ella, o no, tras escuchar la conversación entre su hermano y ella. Se retiró del lugar, y montandose en el coche, se fue muy defraudado.

-- Estos son, de aquí-- dijo Gollit.
--Am... Gollit, has visto, al señor Can? -- preguntó ella.
-- Acaba, de irse.
-- Irse? Adónde?
-- Y porqué, te sorprendes? Esto ya ha terminado.
-- Claro...tienes razón. Bueno, pues...me voy a casa.
-- Sanem. Si ves a Osman, dale recuerdos de mi parte. De acuerdo?
-- Ooohh, bueno. Estás, obsesionada, eh?
-- Oh, Sanem.
" El número al que llamas, no está disponible, en éstos momentos. Por favor, intentalo---, mas tarde--dijo, la operadora, cuando intentó llamarlo.
-- Sanem. Has visto, a Can? --interrumpió Aderen.
-- Se ha ido.
-- Se ha ido, sin decirle nada a nadie? Lo llamo, ahora mismo. Bueno, pues tiene el móvil, apagado. Mañana tengo que reunirnos, para hacer un plan nuevo. Esa mujer, no nos va a traer, más que problemas. Realiza una reunión, para mañana mismo. Que nadie, llegue tarde. Así que, muchísimas gracias por todo, y buenas noches.
-- Gracias. --" No he podido verte. Me gustaría, escuchar tu voz, antes de dormir. -- le escribió, en un mensaje.
Mientras el conducía decepcionado, ella cogió un taxi para llevarla a casa.
-- Yo cogeré, otro taxi. Aquí, no cogemos todos. No te preocupes. Venga, adiós.
-- Sanem, Sanem. No hay algo, que quieres decirme? -- preguntó él, de repente.
-- Te he llamado, 1000 veces, pero...
-- Sobre qué?
-- Sanem. Ya estoy harto, de tus juegurcitos. Te oído, hablar con Embre. Que no tenemos, futuro juntos. Todo.
-- Can...
-- Sanem. Porqué no lo haces, ahora? Porqué, todo esto? En vez de hablarlo, con mí hermano, dímelo, a mí, a la cara?
-- Can. No importa...
-- En qué, estaba pensando? Y yo como un completo idiota, creía, que me amabas, eh? De verdad, me quieres dejar, Sanem? Quieres dejarme, eh? Eso es, lo que quieres?
-- Sí-- dijo ella,tragando saliva.
-- Sí, eh? Porqué? Porqué?
-- Te lo he contado, 1000 veces. De mis mentiras.
-- De qué mentiras, hablas?
-- Del primer día, de trabajo. Del día, en que me encontraste, en tú casa. Te dije...que se me había olvidado el anillo. En realidad, entre a tú casa, ha robar.
-- Ha robar, que? Ha robar, tú? Es, demasiado. Entraste a mí casa, ha robar, tú? Vamos. Pero, que dices? Si es una broma, no tiene gracia.
-- Cuando me pillaste, te mentí, aquella noche. Y ya no he dejado, de mentirte.
-- Pero, que me estás contando, eh? Mentiras, robos, mentiras, robos. Quién, es?
-- Te dije...que me deje el anillo...en la chaqueta, del señor Embre. Nunca he estado, comprometida. Todo lo que sabes, de mí, es mentira. La Sanem, que amabas, es una gran mentira. No, existe. Can .
-- Espera, espera. A ver si me entra en la cabeza. No lo entiendo. El robo, el anillo, Osman. Todo lo que has contado, no lo entiendo.
-- Can, escucha.
-- Espera. Yo pregunto, y tú contestas. A ver si así, me aclaro de una vez. No has estado prometido, con Osman. No? Nunca, lo has estado.
-- No-- dijo, con gesto.
-- Todos esos cuentos, del anillo. Abrazar, a Osman, dentro del campamento, era falso? Es decir...llevas semanas, engañandome. No quise acercarme, mucho a ti, porque estabas prometida y tú seguias engañandome, mientras me mirabas a lo ojos, no es así?
-- Can, es que...
-- Espera, Sanem. Para, para. Osman, también estaba involucrado? Tú hermana? Ayham? Todos os habéis burlado, de mí. Os habéis reído, de mí, eh? Qué, bonito. Dime, una cosa. Tus padres, también participaban, en ello, eh?
-- No.
-- No? Qué clase de persona eres, Sanem. Eh? No se como puedes mentir así. Siento, que no te conozco.
-- Me vi obligada, ha mentirte, Can.
-- Y eso, de tú separación. ZMe dijiste, que habías roto con Osman. Más, y más mentiras. Dime.
--Verás. Deja que te lo explique.
-- Espera, espera. Voy ha procesar, el momento. Espera, Sanem, espera. Vuelve, al principio. Te colaste, en mí casa, para robar como una vulgar ladrona. Es así? Eso es, muy serio.
-- No es, lo que crees.
-- No es? Entonces, que es? Ya no se, que pensar. Es que no me entra, en la cabeza, Sanem. Acabare, volviendome loco. Entiendes. Quién eres, Sanem? Cometiste un robo. Qué es, lo que hiciste? Te vi a ti, en mí casa.
-- Tenía que coger, una carpeta.
-- Qué, carpeta?
-- Y para que querías tú, una carpeta, que estaba en mí casa? Porqué, te colaste, en mí casa, en vez de pedirmela?
-- Porque, no debía hacerlo.
-- Y porqué, no debías hacerlo? Qué tenía, en la carpeta, y que hacía en mí casa? Era algo, sobre ti? Habla.
-- No. No tenía que ver conmigo. No sabía, lo que contenía. De esa carpeta, lo único que sabía, es que no debías verlo.
-- Estoy, flipando. Estoy, flipando. Quién te dijo, que fueras a mí casa, ha robar, la carpeta, mm? Quién fue, Sanem?
-- El señor Embre.
-- Mm? Embre, eh? Esto se pone, cada vez más interesante. Ósea que entraste en mí casa, como una ladrona, para robar una carpeta, que no debía ver,mm?
-- Sí, cierto. Tú me pillaste, y tuve que decirte que me deje una cosa en la americana de tú hermano, y encontraste el anillo. Pero, ya sabes...
-- La dichosa, carpeta? Qué me, ocultabais?
-- No lo sé. Te juro, que yo no sabía lo que había en esa carpeta. Yo sólo sabía, que no debías, verlo.
-- Así, que Embre, te mandó ha robar la carpeta, y que ni siquiera, sabías lo que contenía. Oye, no me mientas más. Deja de jugar conmigo. Haz el favor, Sanem. Ya basta.

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