Después de que Can, saliera frustrado de la casa de Sanem, este sale de la casa creyendo que nunca lo había querido, y aunque ella intentó hablarle, pero ni siquiera la escuchó. Tras quedar con Aderen a tomar una copa de vino, cansado vuelve a su casa, ante la sorpresa de encontrarla sentada en el jardín.
-- Qué me estás haciendo, Sanem? -- preguntó él.
-- Qué te estoy haciendo?
-- Ojalá lo supiera, y pudiera explicarlo.
-- Nos estamos mojando-- dijo ella, riendo.
-- Jajajaja-- rió él-- no me importa. Podría quedarse mirándote aquí...hasta mañana.-- hubo, un primer beso, entre la iluminación del jardín, y el sistema de regadío.
-- Te lo juro. Me estoy volviendo loca, con tantas emociones. Creo...que estoy perdiendo totalmente, la razón.
-- Jajajaja-- rieron los dos, al unísono.
-- Puede que si nos besamos otra vez, nos sintamos mejor. Probamos?
-- Buena idea -- y un, segundo beso.
-- Vamos. Corre, entra.-- dijo tirando de ella.-- tienes hambre? -- le preguntó.
-- Sí. Tengo mucha hambre.
-- Voy ha cocinar algo.
-- Te prepararé, unas albóndigas tartaras.
-- No. Cocinare yo. Ahora, me toca a mí, de acuerdo?
-- Qué pasa? No quieres que ponga tú vida en peligro?
-- Me gustaría arriesgarme, por ti, sin pensarlo. Pero...quiero disfrutar de esta noche juntos y ya me arriesgare en otro momento. Am...debes tener frío. Voy ha buscar algo seco, para ti.--Dónde está Sanem? Dónde está, Sanem?-- pregunto Leyla.
-- A mí, no me mires. Yo no tengo idea, donde está-- respondió Ayham.
--Es tarde, y deberíamos estar aquí los tres. Donde, se habrá metido?
-- A mí no me mires. Como quieres, que yo lo sepa? -- dijo Osman.
-- Me parece que nos podemos imaginar los tres...en éste momento...y con quién está. Acaso, me equivoco?
-- Con quien?
-- Conozco la historia. Estoy metida, en el ajo!!
-- Qué es, lo que sabes?
-- Todo. El nombre, de tres letras. Lo de Sanem, con aquel hombre.
-- Creo que no puedo estar aquí. No puedo verlo. Lo he prometido. He prometido, no abrir, la boca -- dijo Ayham.
-- Adónde vas?-- preguntó Osman.
-- Osman...ya solo quedamos, tú y yo, aquí. Cuánto sabes, que ocurrió, exactamente. Como fue, que te enteraste. Y como reaccionaste, cuando te enteraste? Te escucho.
-- Leyla. Cómo puedo saber yo, lo que has escuchado?
-- Osman. Te voy ha decir, lo que vamos a hacer. Tú me cuentas, todo lo que sabes, y yo te cuento, todo lo que se. De acuerdo?
-- Jeje. Tú primero.
-- Tú.
-- Tú primero.
-- Hola..., Osman...interrumpió Gollit.--aquí estoy. Que tal?
-- Hola. Bienvenida.
--Vaya, gracias.
-- Gollit. Qué haces tú aquí, guapa?
--Hola Leyla querida. Aylim me ha seleccionado, para hacer un papel y necesito pareja practicar. Así que, Osman ha aceptado para los ensayos. Y que? Nos vamos, Osman?
--Espera.un momento. Debo pensar que no hay nadie en toda la oficina, y se lo has preguntado, a Osman?
--Nadie ha querido ayudarme. Osman, ha sido el único.--Bueno. Si quieres, podemos irnos ya.
--Eh...Leyla. Si quieres podemos llevarte a casa de camino.
--No Osman. Ya sabes que vivo cerca de aquí. Puedo ir an
dando, sabes? No te preocupes.
--Bueno. Entonces vámonos. Adiós, Leyla.
--Adiós Leyla.
--Venga, Osman. Vámonos,vámonos.Ah. Hola, de nuevo--dijo él--después de que ella carrapeara.
--Hola. He metido mi vestido, en la secadora. Estará listo, enseguida.
--Estupendo. Se te ha descubierto...un poco el hombro. Pero, pero, me gusta así. Deberías dejartelo así. Bueno...espero que la secadora...tarde bastante en terminar...y te quedes mucho más rato...conmigo. He preparado, pasta y ensalada. Espero, que te guste.
--Me encanta.
--Estupendo, estupendo.
--La has hecho, con nata?
--Pruebala. A ver, como está?--dijo el sin saber que Embre, acaba de llegar. Te gusta?
--Sí. Está, muy bueno--dijo ella, mientras que Embre, los observaba escondido--Yo también, lo hago así. Debo admitir, que están mejor, que mis albóndigas tartaras. Te han quedado, muy bien. Si quieres, puedo...termimar la ensalada.
--Bueno.
Embre, sale de la casa sigilosamente y empieza a golpear el volante del coche cabreado.
Te advierto que ese cuchillo, esta muy afilado y es bastante peligroso. Puedes cortarte. Debes tener mucho cuidado, al usarlo.
--Muy bien.
--Déjalo. Espera, espera. Puedo hacerlo, yo. Vamos a coger esto, y lo dejamos aquí. He olvidado preguntarte, que quieres beber. Puedo ofrecerte, una copa de vino, m? Pero podrías decirme rey malvado y eso, no puede ser. Por cierto. Porqué me llamaste rey malvado, aquella noche?--Sanem, cambio el semblante.--Te ocurre, algo?--preguntó, al ver que no decía nada.
--Si...empiezo a explicartelo, al final, tendré que contartelo todo.
--Ahora mismo, tengo bastante tiempo. Anda. Cuéntamelo todo? Me gustaría saberlo, todo sobre ti.
--Si te lo cuento todo, sobre mí, dejarás de quererme.
--Vamos. No me importa, lo que hayas hecho, en el pasado--le dijo abrazandola--porqué has dicho eso, eh? Escucha. Es imposible, que eso ocurra, eh? Quiero que estés segura, desde el principio. Porqué has dicho, que dejaré de quererte? Cuéntame. Que te pasa? Porqué pones, esa cara tan triste, eh?
--Puede que no estemos hechos, el uno para otro.
--Que te he dicho? No pienses, sólo siente. Escucha, a tu corazón. Vivamos este momento, sin pensar, en el futuro.
--Tienes razón. Pero...necesito,contartelo todo. Déjame, hacerlo.
--Vamos a hacer algo. Se que preocupas preocupas demasiado, por las cosas más simples. No puedes sentirlo, pero no lo haremos esta noche. Resolvermoslos, más tarde. De acuerdo? Hablaremos, más tarde. La verdad, es que...Sanem, no quiero que esta noche, suceda nada malo. No dejemos...que se pierda la magia. Se que lo que quieres contarme, te disgusta. Pero, vamos a dejémoslo. Vamos a olvidarlo.
--Pero...
--No...nada de peros, vale? Lo hablaremos, después. Siempre estoy dispuesto, a escucharte. Cuentamelo, cuando estés preparada. No tenemos prisa, vale? Esta noche, hay que vivir el momento. De acuerdo?
--De acuerdo.
--Venga, ven--dijo, besándose la mano y abrazandola.
--Me parece...que voy a tomar, un poco de vino.
--Despacio. Despacio, Sanem tranquila. Ya está. Despacio.
--Oohh.
--Ya está. Que luego querrás bailar conmigo, hablaras y no quiero ser responsable de las locuras, que hablas.
--No voy a beber más. Sólo, una copa.
--Vale. Muy bien.
--Voy a...voy a ver, si mi vestido está seco.
--Así está bien. M? Dejatelo puesto.
Ella se abalanzó, para abrazarlo y después fue a por el vestido.
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Soñando Contigo
RandomRevive la historia de amor entre Can y Sanem, en "Soñando Contigo "