Cap 15

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Después del rodaje de los años 80, Aylim se prepara para alejar a Sanem de él, utilizando el anillo de compromiso que ella estuvo utilizando. Embre y ella, llegan a la casa de él que en ese momento están desayunando los crepst que el mismo había hecho. Aylim, deliberadamente, vacía su bolso y él reconoce el anillo que ella tenía antes puesto compromiso.

-- Can?
-- Un momento, Embre.-- Dime, este es tu anillo?-- le preguntó él.
-- Sí. Es mío.
-- Dime, que hace en su bolso? Sanem, te he hecho una pregunta, muy sencilla. Explícamelo.
-- Can. Se lo hemos comprado. Se lo dimos en el campamento, y a Embre le gustó mucho. Embre le preguntó dónde se lo había comprado y como Sanem, ya no está con Osman...?
-- Porqué, no me has contado nada de esto? -- le preguntó, él.
-- Tengo que irme, señor Can.
-- Sanem, espera un momento. Sanem porqué has vendido, el anillo?
-- Es qué....
-- Deja que se lo explique yo--dijo Aylim-- Embre se lo compró a Osman, para pedirme matrimonio. Me ha pedido, que me case con él. Estamos prometidos.
-- No me lo habíais dicho.
-- Queríamos que fuera una sorpresa. Le pedimos a Sanem, que no te dijera nada.
-- Estáis prometidos?
-- Sí. Así es.
-- Enhorabuena.
-- Muchas gracias. Espero que no te hayas enfadado. Queríamos que fuese una sorpresa. -- dijo Aylim. -- no lo sabe, nadie.
-- Tranquila, toma.
-- Pues Enhorabuena. -- Disculpen, tengo que irme.
-- Sanem, adonde vas?
-- Se me ha olvidado, que le he dicho a mí madre, que le ayudaría. Adiós.
-- Espera. No te vayas. Esperame, Sanem.
-- Can, espera-- irrumpió Aylim-- déjame hablar, con ella. La pobrecita, está muy dolida. Has sido, muy duro con ella. Deja que hablemos, de mujer, a mujer.
-- Date prisa, porque ya se ha ido-- dijo él.
-- Voy.

-- Can.
-- Te has prometido, nada. A qué viene, tanto secretismo?
-- No hemos concretado, nada. Sólo...lo hemos hablado y Aylim, ya se ha emocionado. Tienes razón. Tenía que habertelo dicho.

-- Sanem, espera por favor-- dijo Aylim.
-- Qué es lo que quiere? -- preguntó ella.
-- Quería pedirte disculpas, por lo sucedido.
-- Porqué? Porqué, me metes siempre, en sus juegurcitos?
-- Tranquilizate. No sé si lo sabías, pero ese era mi ánillo, de compromiso. Cuando te vi con el anillo, en el campamento, pensé que Embre y tú. Discutimos, y dijo que no había nada entre el y tú, pero yo no le creí. Le pedí, que me lo mostramelo y nada más.
-- Porqué no le dijiste, la verdad? Porqué dijo que se lo compraban a Osman, y que era suyo?
-- Embre me contó que nunca habías estado comprometida, y que te lo dio, para ayudarte. Sabía que todo era mentira. Así que me inventado esa historia, para que Can no lo sepa.
-- Claro.
-- Siento haberte metido, en esa mentira. Pero lo he hecho, para protegerte. Aún estás, enfadada?
-- Qué va. Sólo conmigo, misma. Estoy atrapada, en un mar de mentiras.
-- Como te metiste, en esa historia? Porqué le contaste a todo el mundo, que estabas prometida, sino era verdad. Embre sólo me dijo, que era tu secreto.
"Es que yo me he he equivocado, y el señor Can, se ha llevado su carpeta. Sí, ya se lo dije. Yo sirvo, para esto. Lo he estropeado
todo.-- recordó.
"Sanem, calmate. Ve a mí casa.
"A su casa?
Y el encontronazo, con él en la puerta de su casa.
"Qué haces aquí? Como, has entrado? Qué haces, en mí casa?
"Al entrar le eche en la café en la chaqueta, del señor Embre y tuve que llevárselo a la tintorería, pero me deje una cosa en el bolsillo y pensé que se lo habían traído a casa y así que, sin pensarlo, he venido ha buscarla.
"Dices que la americana de Embre, hay algo que te pertenece. No es eso?
"Sí, así es. Exactamente.
"Esto? Estás, prometida?
"Sí. Es eso.
-- No se lo puedo, contar.-- dijo ella.
-- Bueno. No pasa nada-- dijo Aylim.
-- Entonces, si que están, prometidos?
-- Embre, no lo ha declarado, todavía.
-- Pues Enhorabuena, y muchísimas gracias, por protegerme.
-- De verdad, Sanem. Me caes bien. Espero que seamos amigas. Por favor, no estés triste. Venga volvamos, a la casa.
-- No. Ahora, quiero estar sola. Ya sabes que puedes contar conmigo, para cualquier cosa.
-- Muchas gracias.
-- Adiós.
Parecía que todo estaba arreglado. Pero Aylim, de verdad era sincera?

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