Capítulo 36

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Después de estar unos días, en la casa de la montaña, con la nieve, los dos al final, se reconciliaron. Por otro lado, al enterarse Gege, de habían estado juntos, no le cae muy bien, ya que no fue a Esmirna con él, para la feria del libro. Al llegar a la agencia, el pide que vuelva a la agencia, pero ella le dice, que tiene qué pensarlo. No había pasado, ni un minuto, para que la señora Huma se enterase de que no había ido a Esmirna, y la humilla, para que no  vuelva a la agencia. Aquella humillación, le hace cambiar de opinión, y le dice que se quedará en la editorial. Aquello a él, no le cae muy bien, y se pone muy celoso intentando por todos los medios, que no lo haga. Por otro lado, la campaña para recolectar cosas para los animales, está en marcha, y la gente del vecindario, ayudaron. A la agencia, está Pollent que había llevado comida, y también Sanem. Sin embargo, no entiende, que hace ella allí. Poco después, llega Gege. Qué al ver las pizzas que ella había pedido, se invita él mismo, para poder chincharlo a él. Por otro lado, empieza la recogida de animales callejeros, para el refugio y en este momento, Ayham y Mezquive, están hablando de Geygey.

-- No sé, Mezquive. Las cosas no van muy bien, con Geygey. Estoy segura, de que me quiere. No tengo duda de eso. Pero cuando tocamos el tema. del matrimonio, solo se queda inmóvil. En silencio. Y en ése momento, no sé qué hacer con él.
-- Nihad...Nihad-- dijo Mezquive, que casi hace atragantarse a Ayham, con el príncipe te.
-- No le cuentes, a Nihad, por favor.
-- Pero porque no quieres contárselo? Es cómo si fuera, tú padre. No te preocupes. No te va a dar pena, Ayham.
-- No lo hagas. No lo hagas. Por favor.
-- Qué pasa, Mezquive? Tenéis algún problema?-- preguntó.
-- Bueno, tranquilo. No es nada grave. Pero es un asunto serio. Me gustaría saber, tú opinión.
-- Sí. Es cierto-- dijo Ayham.
-- Ya sabes que Geygey, se le declaró a Ayham.
-- Muy cierto. Me alegro.
-- Gracias.
-- Sí, pero eso no es todo. Hay un problema.
-- Un problema? Porqué? Cambió de opinión? Quieres que vaya a hablar con él? Quieres que le haga entrar en razón?
-- No, no, no.
-- No, no, no es necesario.
--  El chico, creció sin sus padres. Intenta ganarse la vida, lejos de su pueblo. Y no conoce las costumbres, que tenemos aquí. Hay que ayudarlo, y a orientarlo, para que haga las cosas, cómo son.--  Tú ya me entiendes Nihad.
-- No digas más. Ayham es como nuestra hija, y la cuidaremos. Está fuera, de discusión.
-- Me refiero, a Geygey. No a Ayham. La ayudaremos. Para que venga a pedir su mano.
-- Oid. Y si se lo decimos mejor, a Leyla, y a Sanem, para que ellas se lo expliquen a Geygey?
-- No, no. Las chicas, no deben hacer eso. Debe de ser, a un hombre que les escuche. Un hombre, maduro y sabio. Alguien, así. -- dijo Nihad.
-- Mm...
-- Es verdad.
-- No puede ser. La gente, debe de estar loca. Éste vecindario, es un caos. -- Y tú, ya deberías de cambiar de coche. No de neumáticos.-- Y tú, qué? No sabes, jugar? Te lo voy ha enseñar. Tú mueves, aquí. Aquí. Aquí. Y se acabó, la partida. -- decía Musafer. -- Señora Benyde. Si sigue así. No conseguirá marido nunca. -- Y de pronto, cambió de cara, cuando vio el rostro de Nihad.
-- Musafer -- dijo.

-- Buenos días, señor Gege-- saludó, uno de los empleados de la agencia. 
-- Has visto, a Sanem?
-- Se fue, al albergue, con el señor Can.
-- Ay...
-- Disculpa. Es qué había mucho tráfico. Espero no llegar tarde-- interrumpió, Pollent.
-- No te preocupes. Parece que Sanem y Can, se fueron. Sin avisarnos.
-- Se fueron, sin nosotros?
-- Mm...
-- No te preocupes. Podemos ir, nosotros. Llegamos tarde. Es normal, que se fueran. No crees?
--Supongo, que sí.  -- Sabes, donde esta, el albergue?
-- La verdad, no lo sé, señor.
-- Entonces, llamaré a Sanem.
-- Está bien.

"VETERINARIO, Y REFUGIO DE ANIMALES"
-- Hola...!!
-- Hola, que tal? -- saludó él.
-- Hola!!
-- Ayúdanos. Traemos muchas, cosas.
"AYUDA PARA LOS ANIMALES, DE LA CALLE"
--Ah...Gege, está llamando-- dijo ella.
-- No deja, de perseguirte. Ése tipo, no entiende, las indirectas. Si...
-- Hola, Gege-- dijo ella.
-- Estáis allí?
-- Si. Can y yo, tuvimos que venir antes. Ya estamos, aquí.
-- Sabes, cuál es la dirección?
-- No...no lo sé. No puedo decirte, cuál es la ubicación. 
-- Dile, que yo se la envio. La enviaré. -- dijo él.
-- Can, te enviará la ubicación. Está bien. Nos vemos.
-- Lo enviaré de paseo, donde no nos encuentren-- dijo él.
-- Saco esto, o qué? -- dijo ella.

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