Las flechas de Cupido

23. Want it fast, want it hard

-¿Vas a explicarme por qué Edward vino? - preguntó Harriet del otro lado del teléfono - y no intentes negar nada, un usuario en Twitter compartió una foto de él claramente caminando por las calles de la ciudad. ¿Piensan reconciliarse?

-Por dios no, yo no tenía ni idea que vendría, tan solo imagínate mi cara cuando lo ví. En realidad hubiera preferido no verlo - admiti reconociendo la realidad.

-¿Nuevamente está dando problemas? Podrías denunciarlo sin ningún problema por invasión de la privacidad.

- Quedó algo inconcluso de cuando dejé Estados Unidos, una tontería pero que se tenía que hablar personalmente. Tranquila.

No iba a decirle a mi amiga que la verdadera razón por la que él estaba aquí es porque una lunática, con razón, quería arruinar lo que quedaba de mi vida personal exponiendo en las redes sociales fotos comprometedoras mías junto a mi ex. En parte porque sería admitir que fue mi culpa, y además no había nada que me avergonzara más que tener que explicar por qué nos sacamos fotos teniendo sexo.

- Está bien, pero sabes que cualquier cosa tienes una buena abogada, podrías quitarle todo lo que le queda.

-Harriet - advertí - puedo manejar la situación, no debes preocuparte mas.

O quizás no podía controlarla, porque ahora tengo que pensar la mejor forma de lograr que lo peor no pase y seguir manteniendome, de alguna manera, oculta de la sociedad.

- Por cierto, estoy con Jules -agregó tomándome por sorpresa - bueno, no precisamente con Jules pero él vino a ver a Tim.

-¿Ah sí? - pregunté cómo un tonta de tan solo pensar en la figura de Jules - envíale saludos de mi parte.

Me sentía mal de tan solo pensar en que había renegado completamente mi cita con él, no quería que pensara que no me interesaba. Así que ni bien corte con Harriet, un poco avergonzada le envié un mensaje de texto proponiéndole hacer algo esta misma noche, quizás pensar en algo que no sea ni Blue ni Edward podría ayudarme. Pocos minutos después recibí una respuesta entusiasta y afirmativa de Jules invitandome a su casa a cenar.

- ¿Entonces tienes planes esta noche? - la voz seductora de Amadis me interrumpió, lo encontré apoyado contra la pared mirándome sonriente.

-¿Que quieres? Al menos déjame conservar el derecho a divertirme.

- Oh tranquila, aunque no lo creas no vengo a molestarte.  Al contrario, creo que tomaste una buena decisión al salir con Jules.

-¿Por qué lo dices?

Me mantuvo la mirada - Todo pasa por algo, Pearl, ¿Crees en el destino? Porque yo si.

No comprendí sus palabras, a los pocos segundos se desvaneció y me dejó con mil pensamientos en la cabeza. Pero ahora tenía que prepararme para salir con Jules.