59. Golden

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Donald fue el primero en recibirme, estaba feliz, irradiaba alegría y lo notó de inmediato. La noche anterior casi no pude dormir, estaba muy emocionada por ir al set para comenzar a grabar, así que en vez de obtener mis siete horas de sueño me puse a repasar el libreto y anotar algunas sugerencias para el personaje.

-¿Pearl?

Me sobresalté, estaba durmiendome hasta que llegamos al set, me sorprendió ver a una cantidad considerable de personas atentas a la llegada del auto.

- Pense que no habría tantas personas - sonreí, muy en el fondo me encantaba.

-¿Que esperabas, cariño? La mejor actriz del momento volvió al país, nadie iba a fingir como si no existieras.

- Me parece que haces bien tu trabajo no solo como representante sino también como motivador. Es hora de que tengas un aumento.

-¿Ah sí? - preguntó con diversión - ¿Y a quien le pido ese aumento?

Me encogí de hombros.

- Háblalo con mi representante.

Ambos bajamos del auto, me acerqué sin dudarlo a las personas que se habían tomado el tiempo de venir. Firmé algunos autógrafos, tomé muchas fotografías, incluso a falta de papel un sujeto me pidió que le firme la manzana que estaba a punto de comerse, eso fue loco.
Minutos después Donald me tomó del brazo con disimulo y me tuve que despedir de todos.

-¿Estás lista para conocer a tu equipo de trabajo durante el próximo medio año? - preguntó mientras caminabamos por el largo pasillo.

- ¿Lista? Mejor dicho, emocionada.

- Pearl, esta gente es muy profesional y tú hace mucho tiempo que no vienes a un set de grabación.

-¿Tienes miedo que no actúe lo suficientemente profesional?

- No claro que no, sé que si lo eres, pero al mismo tiempo estás muy emocionada y debes demostrar que tú no ganaste el papel, el papel te ganó a ti.

Tenía razón.

- Entiendo, controlare mi alegría.

- Anímate - me codeó - después de la reunión podríamos ir a tomar un trago, como en los viejos tiempos, ¿Qué crees?

- Suena bien, muy bien.

Entramos a dónde estaban todos, muchos me recibieron felices, el director coreó: "Llegó Odette de Crecy". Realmente hacía mucho tiempo que no me sentía tan querida, yo solo podía sonreír y saludar a todos.
Y... Oh, ahí estaba, Josh Delston, mi crush, mi actor favorito, si tan solo todos pudieran ver esos labios, esos ojos, ese pelo.

- Pearl - habló con tono melodioso - es genial que trabajemos juntos, es un honor. Haremos un gran equipo.

¿Un honor? El honor era mío, estaba actuando con uno de los actores premiados más importantes de la academia.

- Josh - intenté sonar lo menos emocionada posible - es un gran placer actuar contigo, soy una gran admiradora tuya.

- Oh vamos - abrió los brazos - ven.

Nos abrazamos, me aferré a su pecho como si no hubiera un mañana. ¡Bien, sabía cómo olía Josh Delston!

- Wow - dijo y me aparte incómoda, suponía que lo había tomado con mucha fuerza - eres fuerte, chica.

- Lo siento, es la emoción del primer día. Estoy muy contenta por interpretar a Odette.

- Eres perfecta para Odette, nadie más que tú podría interpretarla, Ma belle. ¿Seguimos? Tenemos todo un set que conocer por delante.

- Claro, hay demasiadas cosas que me gustarían ver.

Esta nueva vida comenzaba a partir de ahora, y no podía estar más feliz. Amadis, quizás estés escuchando esto, pero siempre estaré agradecida contigo por lograr que consiga este papel, cambiaste mi vida.



Las flechas de CupidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora