Omega Prime

Capitulo 13

— ¡Eso no es justo Tomioka! ¡Tanjiro también es nuestro omega, lo ideal sería que todos ayudaramos en su celo! — reclamó Mitsuri con un puchero en los labios ante las exigencias de su compañero.

— No está a discusión, si fuera Keiichi del que hablaramos estarías igual que yo en estos momentos — contestó el azabache con dureza, importandole poco que la pelirosa se molestará.

Faltaban dos días para el celo de Tanjiro y Giyu tenía miedo de que su hijo no naciera, así que para evitar esto había propuesto que solo Gyomei, Muichiro y el mismo pasarán su celo junto al pelirrojo, con la esperanza de que así no habría cambios indeseados en la línea temporal, pero sus exigencias estaban causando problemas con algunos de sus compañeros.

Como Mitsuri, por ejemplo, quien en estos momentos le estaba gruñendo, ya que sentía que el azabache quería separarla de su omega.

— ¿Por qué están discutiendo? — preguntó Tanjiro, quien recién se iba levantando ante el relajo que ambos alfas tenían montado, mientras se tallaba uno de sus ojos para terminar de espantarse el sueño.

— No lo sé, probablemente estén discutiendo por ver quién tiene la polla más grande — contestó Sanemi con desinterés, sin prestar tanta atención a los otros dos pilares y haciendo al menor fruncir el ceño por la respuesta tan pedorra que le había dado.

Antes de que pudiera responder al albino, escuchó como la entrada a la mansión se abría para dar paso a Shinobu, quien parecía estar agotada después de haber pasado toda la noche en misiones, vio con exactitud el momento en el que los ojos de la pelimorada se iluminaron con emoción, casi como si no hubiera rastros de sueño en ellos.

La jaloneo del brazo con brusquedad al notar como daba pequeños pasos hacía ambos alfas dispuesta a meterse en la pelea.

— ¿Qué sucede? — preguntó Gyomei en un tono serio, entrando a la mansión, luego de haber estado meditando en el jardin, llamando por fin la atención de Giyu y Mitsuri.

Tanjiro rodó los ojos, ¿O sea que sí el preguntaba no le iban a poner atención, pero si era el alfa grandulón de dos metros el que preguntaba todos le harían caso?

— ¡Tomioka no quiere que todos pasemos el celo de Tanjiro a su lado!, ¡Lo quiere acaparar para el solo! — acusó la mujer, señalandolo con el dedo de forma infantil.

— ¡No intentó acapararlo para mi solo, Himejima y Tokito también estarían! — exclamó el azabache, para después soltar un suspiro de cansancio, a veces pensaba que estaba rodeado de puros idiotas.

— ¡¿Qué?! ¡No! Si estás proponiendo esto por miedo a perder a Hikaru lo mejor será que hagamos todo exactamente igual a como hicimos en el pasado— respondió Tanjiro rápidamente, notando las intenciones del mayor.

— ¡Pero yo ni siquiera estuve en tu primer celo! — exclamó Tengen en desacuerdo, el también quería ayudar al pelirrojo en su celo.

— Cierto — recordó Tanjiro, para posteriormente tomar al alfa del brazo y llevarlo hacía la entrada de la casa — ¡Tienes que irte de misión como en el pasado y si es posible mata al mismo demonio! —  exigió el omega.

— ¡Eso no es justo! Habíamos acordado que ahora haríamos bien las cosas ¿No te das cuenta que con esto que estás haciendo mi lobo quedará resentido? — cuestionó poniendo una mano en el marco de la puerta para impedir que la cerrara.

— No me interesa — contestó, al mismo tiempo que le lanzaba sus armas y justo cuando el mayor quito la mano del marco para atraparlas, le cerró la puerta en la cara ignorando sus protestas.

No sentía nada de culpa, es cierto que habían hablado sobre no pelear pero el en ningún momento había aceptado, solo estaba escuchando.

— ¿Ya decidiste quién va a marcarte? — preguntó Kyojuro, llamando la atención de todos sus compañeros, quienes lo voltearon a ver de forma inmediata con interés.