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Kakashi entró a la casa de Jiraide sin llamar a la puerta como era usual, no vio a nadie abajo y decidió subir.
Alcanzo a percibir un sonido, por un momento lo malinterpreto, sin embargo se dio cuenta de que no era eso.
Era Jiraide.
Y estaba llorando.
Kakashi subió las escaleras a toda velocidad, abrió la puerta de la habitación, la vio arrodillada y con la frente en el suelo. Su cuerpo temblaba como si se tratara de una hoja de papel.
—Jiraide... —se movió rápidamente, se acuclillo a su lado —¿Que sucede? ¿Estas herida? ¿Te duele algo?
Ella no respondió, pero Hatake suspiró suavemente, la sujetó por los hombros y la atrajo hacia sí mismo, le costó un poco acomodarla pues ella parecia querer quedarse en el suelo, pero pudo levantarla fácilmente en brazos.
Kakashi se sentó en la cama, acunando delicadamente a Jiraide en su regazo.
La abrazó y recargo su mentón de la cabeza de la mujer.
Él había leído un libro sobre emociones humanas cuando comenzaba a ayudar a Jiraide a cuidar de Naruto. Esta vez si que fue útil.
Según el libro, el contacto humano servía para regular emociones, así que acarició suavemente la espalda de Jiraide. La hizo recargarse de su pecho.
—Esta bien... Todo esta bien...
Le tomó un tiempo calmarse, pero Jiraide dejó de llorar, solo quedaban los rastros de sus lágrimas.
—¿Los niños...? —preguntó con voz temblorosa.
—Sasuke, Naruto y Sakura decidieron entrenar en cuanto les di la hoja para el examen.
—Entiendo... —ella murmuró.
—Jiraide... ¿Que sucede?
—Kakashi ¿Puedo confiar en ti?
—Si, por supuesto.
—Estoy... Yo... —ella intentó armarse de valor.
Kakashi suspiró suavemente ante el silencio de la ojiazul.
—Ese tipo ¿Te hizo algo?
—¿Huh?
—El hombre con el que estás, ¿Te hizo algo?
Ella suspiró.
—¿Como lo sabias?
—Las marcas rojas en tu nuca siempre te delataban.
Ella se rió suavemente.
—Ni siquiera yo estaba enterada de eso...
—Claro que no... Parece un idiota posesivo... ¿Sabe lo que acaba de hacer?
—Se veía muy consciente.
—Ah, me encantaría que Obito estuviera aquí, él me apoyaría y ese bastardo estaría veinte metros bajo tierra.
Jiraide se rió, pero también lloriqueó escondiendo su rostro en el pecho de Kakashi.
—Lo dudo...
Kakashi acarició el cabello de Jiraide con delicadeza.
—¿Que fue lo que él hizo? —inquirió el peliplata.
—Él quiere tomarse un tiempo para que podamos estar completamente juntos.
—¿Hablas de casarse y vivir en la misma casa?
—Si... Pero me pidió dos años...
—¿Tu quieres apresurar las cosas? Pero... Tu no eres esa clase de persona.
—Yo no, pero hay alguien que lo necesita más que yo.
Kakashi se quedó callado esperando a que Jiraide dijera a que se refería. Rogó mentalmente porqué no fuera lo que estaba pensando.
—¿Estas...?
—Si, exactamente.
Kakashi estrechó a Jiraide con más fuerza entre sus brazos, recargó su mejilla del cabello de la mujer.
—¿Puedo probar a convencerlo de hacer más corto el plazo a mi manera? —susurró Hatake.
—No.
—Pero solo serían algunos golpes...
Jiraide rió suavemente.
—De ninguna manera.
Él se quedó callado por unos segundos y volvio a hablar.
—¿Vas a esperarlo?
—No lo sé, yo... No se cuanto tiempo pueda ocultarlo...
Kakashi no se contuvo, puso su mano sobre el vientre de Jiraide con una sonrisa divertida.
—Este pequeño mocoso... Me aseguraré de que no este solo.
—¿'Kashi? —cuestionó Jiraide alzando la mirada.
Él no bajo la mirada, seguía con una pequeña sonrisa en su rostro y mirando directo al vientre de Jiraide como si algo se pudiera ver.
—Démosle tiempo para reflexionar a este imbecil hasta el dia en que nazca el mocoso, si no tiene el valor suficiente como para hacerse cargo, yo tomaré la responsabilidad.
—Pero, 'Kashi, esto es-
—Soy tu amigo, me importas realmente y por consiguiente, esa cosa que tiene tu sangre también va a importarme.
Ella suspiró intentando no llorar.
—Gracias...
Un golpe sobresalto a ambos, había sido la ventana, parecía haberse cerrado de golpe.
—¿El aire...? —susurró Kakashi confundido.
Jiraide conocía la respuesta, pero no se atrevio a pensar en eso de nuevo, no hoy.
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N/A!
Obito es una persona impulsiva. Obito va a hacer una estupidez tremenda solo para mantener a Jiraide para si mismo.
(Ayuda, le agarré coraje al protagonista masculino de este fic y creo que quiero golpearlo por algo que yo lo hice hacer.)
