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Los sentimientos nunca se equivocaban, la preocupación de Jiraide había sentido desde la mañana no se había equivocado. Lo supo en cuanto escuchó a Kurenai hablar.
—Anko... ¿Qué diablos planea llevándolos ahí? — dijo Jiraide con una mano en la frente.
—Nada bueno, en realidad, también estoy preocupada por mis niños... Especialmente por Hinata, ella es demasiado tímida, no se tiene mucha confianza...
—Pasa lo mismo con mi niña, ella es lista y tiene un gran potencial, pero a veces no tiene confianza en si misma, gracias al cielo Naruto la apoya un poco con eso, quiero decir, Sasuke también, pero... Bueno... Él tiene una forma distinta de preocuparse por sus amigos.
Kurenai soltó una risilla mientras tomaba el trago de sake.
—Naruto parece una cabeza hueca, sin ofender, pero es bastante perceptivo.
—Siempre ha sido así desde niño. — Senju sonrió suavemente jugueteando con su vaso lleno de jugo —Naruto te sorprende cuando menos lo esperas. A veces podía parecer que odiaba el estudio, pero había días donde lo pude ver estudiando sin quejarse.
—Sasuke parece motivarlo, ¿Verdad?
Jiraide bebió un poco del jugo en su vaso.
—Lo hace, ellos no se criaron juntos toda la vida, así que especialmente Sasuke, no parece ver a Naruto como un hermano, es más que eso, algo como una relación... Rivales y a la vez amigos que se apoyan entre sí.
—Es un buen niño, bueno, ambos lo son a su manera. —Kurenai observo la expresión cálida en el rostro de Jiraide. Siempre que hablaba de los niños bajo su cuidado parecía así, feliz, dichosa. Yuhi se pregunto si algún día podría tener la dicha de sentirse de la misma manera.
—Lo son...
—A propósito ¿Qué hay entre Obito, Kakashi y tú? Hace un rato se veían muy acaramelados.
Kurenai se había enterado hace poco de que Obito seguía con vida ¿Su reacción? No fue tan mala como se esperaba.
—Nada especial... —balbuceo Senju con las mejillas rojas, mirando la jarra llena de sake, queria probarlo, pero no podía.
La rubia llevó una mano a su cuello algo avergonzada con una risilla torpe.
—Eso me suena a algo profundo... — Yuhi soltó una leve risilla, sirviendo mas sake en ambos vasos.
—Hablo en serio, no es nada raro, en todo caso ¿Qué hay entre tu y Asuma?
La pelinegra soltó una leve risa.
—Bueno... Hemos estado pensando... Tal vez, después de tanto tiempo saliendo, deberíamos casarnos.
—¡Felicidades! — exclamo la ojiazul animada, entrelazando sus dos manos en un casi aplauso.
—Aún no hay fecha, pero esperamos que sea pronto, a menos que haya problemas en la aldea, no hay nada que nos detenga.
—Me alegra escuchar eso. — Jiraide pareció auténticamente feliz, ella estaba feliz. Sus amigos quienes habían estado enamorados durante años finalmente podrían estar juntos.
—Como sea, creo que es hora de irnos, tus niños ya deben estar en casa.
—Tienes razón. — dijo Senju estirándose.
Kurenai se echó a reír, tuvo que poner ambas manos sobre el tatami para no irse hacia atrás, ella rio con ganas. Había visto las marcas rojas en la cadera de Jiraide.
—¡Dijiste que nada inusual! Apuesto a que esos dos te foll-
—¡Cállate! — chilló la rubia saltando a cubrirle la boca, su cara estaba mas roja que la de un tomate —Te juro que no es eso.
—Eres una traviesa... —canturreo la pelinegra.
—Idiota, estoy embarazada, no puedo hacer esa clase de cosas fácilmente.
—¿Eh? —Yuhi abrió la boca sorprendida —¿Seré tía de nuevo?
Jiraide asintió, seguía sobre Kurenai, así que la pelinegra se echó a reír y abrazo a la rubia envolviéndola con brazos y piernas.
—¡Me alegra! — dijo emocionada, pero entonces, sujeto por las mejillas a Jiraide para hacerla quedar justo frente a su rostro —¿Es de Obito o Kakashi?
—Obito.
—No pierdes el tiempo ¿Huh?
—Oh, cállate, fue un accidente. — dijo la ojiazul entre risas.
Ambas comenzaron a reír hasta que la puerta se abrió.
—¿Kurenai? — pregunto Asuma.
Las dos mujeres voltearon a la puerta.
Era Asuma y Kakashi con sus respectivos equipos.
—¿Lo ve, sensei? Le dije que alguien se la iba a ganar —dijo Ino.
Naruto y Chouji comenzaron a reír, Shikamaru supo disimular
—Ven acá, Senju Jiraide — bufo Kakashi sujetando a la mujer por debajo de los brazos para alzarla fácilmente y quitarla de encima de Kurenai —¿Cuánto tomaste?
—No mucho, sigo sobria. —Jiraide rió suavemente, se puso de pie —Hola, mis niños ¿Como les fue? —preguntó la rubia abriendo los brazos a los niños.
Naruto empujo a Sasuke, Sakura empujó a Naruto pero fue este quien ganó, corrió a abrazar a su madre adoptiva.
—¡Fue mucha presión psicóloga! —chilló ocultando su cara en el pecho de Jiraide.
Sakura fue la segunda en abrazar a Jiraide, ella fue más silenciosa que aquel par de ami-enemigos.
—Ya es la quinta vez que te lo he dicho, se dice psicológica, idiota. —bufo Sasuke abrazando también a Jiraide.
—Miren a ese par, son los niños de mami —se burló Shikamaru.
—Pero si cuando tu mamá te abraza actúas igual que ellos... —expuso Chouji.
—¡Cállate, Chouji!
La tarde transcurrió más amena, fue un día cálido y agradable.
Igual que la calma aparente antes de la tormenta.
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N/A!
Ahora que Kunno parece estar recapacitando y pensando las cosas antes de actuar despues de tantas funadas, parece más agradable, así que vamos a cambiar nuestros '#' y ahora será:
#miedo #terror #pesopluma
UPDATED N/A!
Olvidé que Jiraide estaba embarazada, así que he tenido que modificar el capítulo.
