Capítulo 13

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Capítulo 13 | "Pesadillas que son recuerdos"

Edmund Blackwolf

Gruño por lo bajo cuando entramos a la propiedad de nuestra familia, la mansión original de la familia Blackwolf.

Seguimos a mamá con la cabeza baja mientras ingresamos a la mansión, siguiéndola por los largos pasillos hasta ingresar al despacho, donde mis padres nos esperan, los tres con su espalda baja apoyada sobre el escritorio de brazos cruzados con los rostros totalmente serios, apenas hay algún cambio en sus expresiones cuando sus ojos se posan sobre mamá, quien les regala una pequeña caricia a cada uno en sus brazos antes de tomar asiento sobre un sofá más alejado, sirviéndose una copa de champagne.

La puerta tras nosotros se cierra, dejándonos frente a frente con nuestros padres. La mirada de papá Kace nos recorre analítica, como si la pose de nuestro cuerpo pudiera expresarle todo lo que necesita saber, papá Connor nos evalúa con el rostro contraído en molestia y papá Oliver mantiene una mirada de fastidio.

La hemos cagado. A lo grande.

— Estoy esperando una explicación.

La voz demandante de papá Kace me hace querer tragar saliva con fuerza, aun cuando siempre me han enseñado a no mostrar debilidad ante nadie.

— No es lo que ustedes piensan — se precipita Elian.

— No creo que su madre sea capaz de mentirnos — ambos giramos hacia mamá con mirada de reproche ante las palabras de papá Oliver, pero ella sólo nos sonríe inocente.

— Entre sus padres y yo no hay secretos, no sólo porque ayuda a mantener un buen flujo en el matrimonio, sino porque aquí en la mafia no se puede mantener secretos, no con la familia.

— No hay secretos entre nosotros, eso evita errores, evita que nos maten a todos — gruñe papá Connor.

— La idea original fue sólo encargarnos de Riccardo — comienzo explicando — Comenzar a infiltrar gente en las organizaciones italianas para conseguir información, pero conocimos a Corinna.

— Corinna Barone — asiente Kace en comprensión.

— Creemos que ella podría llevarnos hacia los documentos que hacen falta del cargamento extraviado.

Connor suelta un bufido burlón.

— ¿Así que ese es su plan? — se burla — ¿Manipular a una chica para que les entregue en bandeja de plata a su propia familia? ¿Y cómo conseguirán eso? ¿Follándola?

— Es un plan estúpido — secunda Oliver.

— Recuérdenme cómo fue que hicieron que mamá quedara secuestrada — contraataca Elian — Eso sí fue un plan estúpido.

Los tres rostros de mis padres se oscurecen en ira mientras mamá nos chilla que nos comportemos, pero ha sido así hace años.

Amo a mis padres, los respeto, nos llevamos bien la mayor parte del tiempo. Pero cuando salen este tipo de discusiones, Elian y yo no podemos evitar contraatacar a cada uno de sus lanzamientos, es como una pequeña guerra. Ellos tres contra nosotros dos, después de todo, este carácter de mierda que tenemos, lo sacamos de ellos.

Al menos que sea una guerra contra Ekaterina, porque ahí es cuando los cinco nos volvemos un equipo contra la pequeña rubia que siempre termina ganando.

— Si ya saben los errores que cometimos con su madre, ¿por qué quieren cometer el mismo error? — prosigue papá Oliver.

— La primera vez es un error, la segunda vez es intencional.

Flor ImperialDonde viven las historias. Descúbrelo ahora