9

2.6K 224 12
                                    

Gime por el fuerte dolor de cabeza ¿que paso? La invasión de hace unas horas pasó por su mente.

Se había escondido, estaba tan asustada.

Suspira y sale del conductor ni siquiera se acuerda como llego a este lugar, gime al sentir todo su cuerpo entumecido, como si millones de adrenalina habían estado en su cuerpo.

Como puede camina y se sorprende al ver el gran desastre, suspira y como pudo llega a su habitación o lo que queda de ella. La suerte que tiene todo en su maleta y solo sacaba algo cuando lo necesitaba, así que no perdieron nada personal.

Mira el baño y entra, sonríe al ver que funciona, sin pensarlo mucho entra dejando que el agua artificial toque su cuerpo.

Uriel busca a Betty por todos lados, hasta que se acuerda de la habitación de ella, al llenar nota que no hay nadie pero escucha un ruido de agua. Con cuidado toma su arma y camina hacia el baño y lo abre con rápido queda en shock al verla desnuda.

Un cuerpo sumamente blanco —Hermoso — pensó Uriel.

—AHH —queda en shock —sal —gritó tratando de tapar su exuberante cuerpo.

—Yo… yo… —salió del baño, su cara está sonrojada por completo —es hermosa —sonríe como bobo y sale afuera a esperar que ella termine.

Betty sale con la cara roja ya vestida, no puede mirar al hombre a la cara, se acerca a él —¿Desea algo Sr. Uriel?

—Perdón, te deje en mi habitaciones, terminaste herida luego te deje en mi oficina, nos atacaron y cuando entré a la oficina pensé que… que…

Betty se sorprende porque este hombre está preocupado por ella, eso es raro solo pocas personas se han preocupado por su bienestar.

—Me desperté y me escondí Sr. Uriel, también gracias por pensar en mí — dijo con una pequeña sonrisa.

Uriel la mira y solo confirma ─Descansa ─rápido se fue sin saber qué más decir, su corazón se siente en paz al verla bien.

Betty mira la gran espalda del hombre, vota todo el aire.

Al día siguiente.

Al estar Cerca del planeta Omerpus mandaron una nave de repuesto, todos los civiles fueron pasando hacia la otra, Betty miraba para todos los labios tratando de buscar esos gemelos pero nunca los vio.

Al final no pudo despedirse de ellos.

A las pocas horas llegó al planeta, se sorprende al ver lo bonito que es, con su maleta en mano sale y queda más maravillada por la vista, una voz hace que salga de sus pensamientos.

─Betty.

Betty sonríe al ver a su amiga ─Carmen ¿que alegría verte? ─se sorprende al ver la pequeña barriga de su amiga ─no me dijiste que tú.

─Sorpresa ─dijo Carmen. Las dos se abrazan, Carmen la guía hacia el auto donde la esperan sus dos hombres, los presenta y esto le sonríe a la pobre chica que está muy roja, Carmen solo se ríe al ver a su amiga así.

Cuando están llegando al apartamento de Carmen este le dijo ─No piensas decirle a Luna que estás aquí.

Betty baja la cabeza ─Si, quiero hablar con ella.

─Si quieres podemos ir el domingo, el lunes tienes que ir al palacio personalmente a firmar los papeles, fue todo a través de los emperadores que se hizo, ellos te quieren conocer.

 ─¿Por qué? ¿por qué personas importantes quieren conocer a alguien como yo?

─Ellos son buenas personas Betty, les gusta hacer amigos diferentes, además este par de emperadores son como dos niños pequeños.

─Está bien, tengo que agradecerles a ellos por ayudarme, y tú también Carmen muchas gracias por esta oportunidad que me estás dando.

─Lo mereces Betty, mereces esto y mucho más, ya verás que en un futuro serás alguien importante.

Betty ignora lo que dijo su amiga y cambia de plática, además mañana verá a su amiga luna.

Mucama (+18 saga Agencia Intergaláctica )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora