Mucama (+18 saga Agencia Intergaláctica )

25

Se siente tan cómoda que no quiere abrir los ojos, se acurruca más, aunque se da cuenta que la almohada está un poco dura, pero aún así es muy cómoda y huele muy bien… como a perfume de hombre, de golpe abre los ojos, se sienta en la cama dándose cuenta que no está en su habitación, mira hacia los lados, voltea y mira a ambos hombres que la están mirando.

─Eh…¿dónde estoy?

─En nuestra habitación.

─Nuestras habitación ─dijo, repitiendo la misma palabras que el mayor ─pe…pero.

─No hay pero Betty eres nuestra ─dijeron a la misma vez los gemelos.

Betty abre los ojos en grande ─¿Que? 

─Betty ─dijo Uriel, la jala y la pone en sus brazos, besa su hermosa mejilla ─te queremos en nuestras vida ─dijo mirándola a los ojos ─desde que te vimos en la nava solamente pensé que te quiero a mi lado, contigo me siento cómodo, contigo puedo ser yo mismo sin sentirme incómodo, por ti puedo hablar mucho y ser más sociable, desde que te conocí en mejorado como mejor pesonas, nadie se atrevía hablar conmigo por qué soy miedo, pero tú… tuviste más de mi y eso te lo agradezco con el alma ─por fin pudo decir lo que sientes desde hace mucho ─me gustas mucho, estoy completamente a tu merced.

Uzziel toma la mano de ella, tratando de llamar su atención, al lograrlo besa esa pequeña mano con cariño ─… ─abre la boca sin saber cómo cómo comenzar alma de valor ─Te amo, amo todo de ti, desde la primera vez que te vi yo… yo quedé locamente fascinado, te admiraba aún te admiro diariamente, cada cosa de ti me gusta, tus gesto, tu sonrisa todo, gracias a ti yo… puedo ser más humano, siempre e sido yo y mi hermano ahora está tu ─expresó con una pequeña sonrisa ─por favor se nuestra, te cuidaremos, aunque no sabemos cómo ser suaves lo haremos por ti, por ti seguiremos cambiando.

El corazón de Betty late con fuerza, no podía creer que esto hombres maravillosos tienen sentimientos hacia ella , pequeñas gotas de agua bajan por su mejilla ─No tiene que cambiar nada, ustedes me gustan así como son, así que por favor no cambie ─dijo con voz ronca, por Dios está feliz, nunca pensó que tendría una oportunidad así en la vida.

─Dios, ustedes son magníficos, la verdad no entendía por qué desde un principio conecte con ustedes, por qué me sentia tan comoda, plena y tranquila, ahora se porque, se por que mi cuerpo se calienta al verlos, los quiero para mí y solo para mí ─expresó Betty mirándolo a ambos.

─Así que… perdón no soy muy romántica ─se ríe por sus nervios.

─No te preocupes tampoco nosotros sabemos ─dijeron los gemelos con un pequeño sonrojos en sus mejillas.

Betty se rió ─Dios chicos, por favor sean mi pareja ─pidió.

Los gemelos abren en grande los ojos.

Están nerviosos sin saber que hacer, nunca habían tenido este tipo de sentimiento y situación.

─Y…o.. yoo.

─E…Yoo.

Betty los mira con cariño y se da cuenta que los puso nerviosos, y eso le encanta.

─Entonces… ─dijo mirando a ambos chicos.

─SI…─gritan al mismo tiempo ambos hermanos.

─SI ─grita con emoción, los abraza con cariño a ambos, los llena de besos ─los quieres.

─Nosotros también te queremos.

Por fin, por fin los tres se sienten completos, ese vacío que sentía por fin se pudo llenar.