¿Por qué estan aquí?

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Isabella había pasado todo el día sin hablar, gracias a que era sábado no tuvo que faltar a la escuela, ver a esas dos personas que pensó que ya tenía superadas, la hizo replantearse si en verdad lo había hecho.

Es decir, se quedó paralizada sin poder hablar o moverse, y cuando porfin pudo hacer algo, solo huyó, se sentía como una persona detestable, inservible y cobarde.

Desde que conoció a Zed, la pelirroja había dejado de pensar tanto en sus padres, y en los motivos por los cuales la habrían dejado a su suerte, pensó que por eso ya tenía ese tema superado.

Pero, ahora se dió cuenta de que en realidad nunca lo había hecho, ya era de noche, y la ojiverde seguía sentada en el sillón de los Necrodopulus, abrazando sus piernas mientras veía la televisión con una mirada vacía.

Zevon: Isa... sé que no quieres verlos pero, creo que deberías ir a hablar con ellos, quizá solo querían ¿Arreglar? Las cosas. - Habló hacía la pelirroja, como si fuera una niña.

Zed: Papá no puedes llevarla con ellos. - Salió Zed a defender a su hermana, que seguía a su lado, tomándola en un abrazo por los hombros.

Zevon: Zed, sabes que yo la quiero como a una hija, pero en realidad no podemos tenerla aquí si sus padres no lo aceptan, aunque quisiera, no soy su padre legal. - Habló intentando que Isabella no lo escuchara, aunque claramente lo hizo, sintiendo como si le rompieran un poquito el corazón.

Isabella: Esta bien.... debo irme. - Habló por primera vez en todo el dia, con voz sueve pero entrecortada.

Zed: Te acompañaré. - Se apresuró a hablar cuando vio levantarse a la antes nombrada.

Isabella: Será mejor que no, que ninguno de ustedes vaya a mi casa por un tiempo - También se dirigió a Wyatt en la oración. - Mis padres no son muy abiertos a lo sobrenatural, será mejor ahorrar problemas así. - Les dió una sonrisa triste.

En realidad no quería irse, pero el señor Necrodopulus tiene razón, él no era su padre legal, y si sus padres biológicos descubrieran que estaba aquí, serían capaces de meter una denuncia contra su familia, prefería ahorrarles problemas a todos.

La pelirroja y su novio se despidieron de la familia de zombies, al salir de zombietow, la alfa decidió que sería mejor que se quedara hasta ahí.

Wyatt: No tienes que hacerlo si no quieres, puedes venir conmigo.

Isabella: Esta bien, estaré bien - No sabía si esas palabras eran para convencerse a sí misma o a su novio, pero de alguna manera necesitaba darse ánimos.

Wyatt: Es de noche, debería acompañarte un poco, aún solo llevas mi remera. - Intento convencer a su pareja para dejarse acompañar, mientras le tomaba la mano, estando frente a frente.

Isabella: Wyatt, estaré bien. - Le dió una linda sonrisa, ver a Wyatt era lo único que la hacía sentirse bien, incluso si fuera solo por unos momentos.

Ambos se despidieron, y se fueron por sus lados.

Con Wyatt

El lobo estaba llegando a su guarida junto a su manada, estaba rogando internamente para que su novia se encontrara bien.

Al llegar a su casa, los cachorros fueron corriendo hasta él esperando ver a Isabella, quien siempre suele estar junto a su novio, pero hoy no fue así, a toda la manada le resultó extraño no ver al lobo junto a la sosim.

Willa: Ey ¿Y tú novia? - Preguntó la morena al verlo llegar con cara de pan triste.

El lobo se tiró sobre el sillón de su casa, dejando escapar un suspiro de fastidio.

Wyatt: ¿Tan raro es que no esté con ella? - Se empezaba a dar cuenta de como todos pensaban que él siempre estaba con la pelirroja, aunque no le molestaba.

Willa: ¿En una palabra? Si.

Con Isabella

La pelirroja estaba en el pórtico de su casa, literalmente con la mano en la perilla, replanteando una y otra vez porque debía entrar.

Luego de mucho pensar, pudo abrir la puerta de la entrada, dejando oler un delicioso aroma a comida casera, cosa imposible en esa casa.

Se dirigió hasta el comedor, donde estaba la mesa ya reparada, y hasta con comida encima, parecían ser empanadas, no las había comido hace mucho.

Se acercó hasta la silla, justo cuando tocó el respaldo de esta para moverla, escuchó como sus padres la llamaban.

Raúl: Hola Isabel, Te gustan las de pollo ¿Cierto? - Preguntó viéndola, mientras tomaba asiento.

Isabella solo pudo pensar que ahí estaba esa falla que la hizo volver a la realidad.

Isabella: En realidad... soy alérgica al pollo. - Contestó con un hilo de voz.

Raúl: Oh, bueno, igual siéntate tenemos que hablar contigo. - Le restó importancia, sin importarle si su hija comía o no.

Susana: De todas formas es mejor así, se nota que has estado comiendo de más - Eso desanimo completamente a la pelirroja, si ya estaba con los ánimos por los suelos, ahora el autoestima está aún más abajo que eso.

De todas formas la ojiverde le hizo caso y se sentó, poniendo los brazos sobre la mesa.

Susana: Isabel, así no se sienta una señorita. - Habló fría logrando que Isabella ponga los brazos debajo de la mesa y se siente derecha.

Raúl: Estamos al tanto de tu solicitud para la universidad de Mouten Collage - Empezó sin rodeos - Pero también de tus inconvenientes para entrar, por eso decidimos que al terminar tu año secundario, irás a California, hay una universidad especializada en medicina que es perfecta para ti, ya te inscribimos, ellos no se fijaran demasiado en tu comportamiento anterior, pero vinimos aquí para poder entrenarte, y que puedas encajar en la universidad.

Habló con orgullo, como si fuera un genio por pensar en ese plan, pero Isabella creía que ellos eran unos ingenuos si creían que ella se iría de aquí, ella no podía irse, sobre su lindo, sexy y joven cadáver.

No podía describir toda la repugnancia que le daba esa idea, sobre todo como lo expresaron, ¿Entrenarme? ¿Qué soy? ¿Un perro? Por favor, porque yo necesitaría un entrenamiento, ¡¿Y porque les interesa de todas formas?!

Además, ¿Medicina? Odio la medicina, seria un asco como médica, prefiero hacer los medicamentos que ellos utilizan para salvar personas, ¡Porqué creyeron que esto me gustaría! Oh, claro, ni siquiera pensaron en si yo quería esto o no.


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Mi Primer amor (Wyatt Lykensen)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora