Isabella Mills una chica que ama la música y bailar, fan de Taylor swift, es como una hermana para Zoey y Zed, las personas la ven como "la rara del pueblo ", lo que más se destaca de ella es que no intenta encajar, mucho menos con las personas nuev...
Ya era el día siguiente, y casi no pude dormir pensando en todo lo que había pasado, sobre todo pensando en Wyatt.
Termine de desayunar, y me cambié. Me puse una pollera de jean algo corta, con una remera negra pegada al cuerpo, y un saco blanco y azul oscuro.
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Agarré mi mochila para dirigirme al comedor donde Zed estaba dándole sus últimos bocados a su desayuno, me despedí del resto de mi familia, y apuré al zombie adolescente para salir. Al abrir la puerta, nos quedamos parados, viendo sorprendidos la escena delante de nosotros.
Todos los lobos estaban en el pórtico de la casa. Esto es raro, Wyatt y Wynter a veces venían para ir todos juntos a la escuela, y Willa nos acompañaba de vez en cuando, pero ver a todos los lobos de la escuela aquí, es demasiado.
Zed: Okey..... esto es un poco extraño. - Me habló, yo solo le asentí.
Cuando pude recuperarme de la sorpresa, y que para colmo ninguno se moviera, fuí hasta Wyatt para plantarle un beso en la mejilla, no quería volver a actuar raro con él, por fin eramos novios y no quería arruinar eso, ya la pasé muy mal cuando me sentía patética al no saber como decirle que me gusta, no quería pensar mal, quizá no sea nada, y él se alejaría de mí por nada.
Wyatt me respondió al beso con una sonrisa, saludé al resto de los lobos, al igual que Zed, para luego irnos a la escuela. Literalmente, todos los lobos me seguían, esto es demasiado incómodo.
Zed: ¿Estarás bien? Sabés que está ciudad no suele llevarse bien con las cosas nuevas. - Dijo haciendo referencia a mi cabello, aunque al parecer sea mitad lobo, no me veo como uno.
Isabella: Por favor, Zed, nadie aquí me presta atención, a menos que sean los Aecy's con burlas, creo que será como cualquier otro día, aunque hoy haya más motivos de burla hacia mi persona. - Dicho esto, abrí la puerta de la escuela, con Zed y los lobos a mi lado.
Apenas entré, todo el mundo dejó de hacer lo que estaba haciendo para mirarme, esto es muy raro para una persona a la que suelen tratar como fantasma.
Me quedé estática, todo este día se siente como una mierda, no paraban de mirarme, no me gusta, estaba empezando alterarme, apretaba con fuerza las correas de mi mochila mientras escuchaba mi corazón latir a mil por hora, cuando escuché la voz de Wyatt hablándome por detrás, en un tono bajo, para que solo yo pueda escuchar.
Wyatt: Debe ser por la linda falda/pollera que traes. - Eso hizo que me tranquilizara mucho.
Creo que eso fue lo mejor del día hasta ahora, sé que debería darme confianza yo sola, pero escucharlo decir eso, en serio hizo que las mariposas de mi estómago enloquecieran, me llenó tanto de confianza, que solo moví un poco mi cabello y empecé a caminar como si fuera la dueña del lugar.
La mirada de Wyatt se enternecio, a la vez que miraba a la pelirroja / peliblanca con orgullo, y una sonrisa ladeada, en serio le quedaba bien esa pollera / falda, pero lo único que pudo pensar en ese momento fue "Esa es mi mujer" , la siguió, haciendo que los demás lobos los siguieran a ambos, y cuando Zed entendió que se quedó solo, empezó a correr detrás de estos.
.........
Estuve esperando todo el santo día para tener un momento para hablar con Addison, pero los lobos no paraban de seguirme y hablarme sobre cosas de lobos, que, honestamente, no quería aprender ahora.
Mientras sacaba algunas cosas de mi casillero, me harté, y empecé a decirles que me dejaran a solas un momento.
Isabella: Tengo que hablar con Addison, A SOLAS, - aclaré - Y es una conversación privada, así que, no quiero nada de oído de lobo, olfato, visión, o lo que sea que hagan, ¿Entendido?
Wynter: ¿Cómo sabrás si los usamos?
Isabella: Soy un alfa, ¿No? - Cerré mi casillero, y me di media vuelta mirándolos seriamente - Lo sabré - dicho eso empecé a irme, y por primera vez en el día, fue sin los lobos.
Obviamente no tenía ni puta idea de cómo saber eso, pero lo dije con tanta seguridad, que hasta yo me lo creí.
Entré al gimnasio y vi a Addison sentada en las gradas con una libreta en manos, seguro debe estar haciendo algo para los animadores.
Fui directo hacia ella y me recosté a su lado, poniendo mi cabeza en su regazo, luego de unos segundos, empezó a jugar con mi cabello, era relajante a decir verdad, aunque me estuviera tocando.
Addison: Es muy lindo, pensé que, por como lo describiste, te quedaría espantoso.
Isabella: No seas ridícula, a mi nada me queda espantoso. - Escuché como soltaba una mini risa nasal, para volver a hablar.
Addison: ¿Y bien? ¿Qué era eso tan importante que no podía hablarse por teléfono? - Preguntó con voz dulce. Si, ayer la había llamado para contarle todo esto, ¿Qué querían que hiciera? No podía contarle a Zed algo que él ya vivió.
Empecé a hablar sobre todos mis conflictos internos, sobre Wyatt, sobre como pensaba en que los lobos esperaban mucho de mi, en como todo esto se sentía tan incómodo, y como es que quiero mi pelo rojo de vuelta.
Básicamente, me desahogue sobre todo lo que me atormentaba en menos de 20 minutos.
Addison: Creó que es momento de contarte un secreto, creo que puede servirte - Me comentó cuando terminé de desahogarme.
Isabella: ¿Mhm? - Contesté
Addison: Los muchachos, siempre, hablan con los ojos. - Eso hizo que yo la mirara, aún desde su regazo, no había entendido, la verdad. - Cuando Wyatt te ve, sus ojos gritan ¡Amor! Y eso no puede fingirse, ni mucho menos compararse, es único, y es su sentimiento hacía ti. Puede que seas un alfa, y puede que ambos sientan algo debido a eso, pero si hay algo de lo que estoy segura, es que ustedes se aman, y no es algo que pase con los otros lobos. Si quieres mi consejo, diría que, le preguntes a Wyatt lo que siente por ti, si habla desde el corazón, vas a poder entender todo lo que te digo, créeme. - Habló con una sonrisa dulce. - O.... podemos salir de fiesta todos los fines de semana, hasta que te des cuenta que puedes estar bien sin un chico. - la última parte hizo que yo soltara una risa por lo bajo, me agradaba mucho haberle dado la oportunidad de ser amigas, me ayuda mucho cuando necesito hablar, incluso cuando puede que la haya tratado mal en el pasado.
Supongo que Zed tenía razón, me ablandé mucho con la llegada de los lobos.
