Tantas cosas habían pasado en los pocos años que llevaba de vida, de cosas que nunca pensó que podría hacer...de ser un niño mortal común en Midgard, con una madre bellísima que en realidad era una guerrera de una raza antigua y extinta por los dioses que solamente conocía en historias contadas por ella. Su madre se llamaba Faye, era una mujer bella y amable que en su pasado era una guerrera ruda, su padre se llamaba Kratos y siendo un niño era suerte saber eso siquiera pues estaba apartado de él.Todo para descubrir a sus cortos once años que todo era muy diferente a lo qué creía...su padre era el antiguo dios de la guerra en una tierra qué había extinguido con sus propias manos por venganza ¿muy loco, no? Su madre gigante y su padre dios...su madre había muerto cuando supo que había toda una profecía dónde se contaba el viaje que realizaron como su última voluntad, mataron dioses y con la muerte de Baldur se marcaba el final. El Ragnarök, el fin de todo.
Tres años después de su viaje, de mentiras y angustias por culpa de Odín lograron vencerlo, hoy Atreus, ya había aceptado y reconocido qué debía ser mejor. Por su madre y la promesa que hizo con su padre, el Ragnarök se había terminado y Odín estaba muerto, los reinos iban a sanar...años de entrenamiento riguroso por su padre habían dado sus frutos pero ahora tenía un objetivo que ponía en pausa su viaje con él pero iba a volver eso era seguro.
-cuida a todos-dijo sonriendo para aguantar el llanto y apartarse, su corazón estaba roto aguantando las ganas de mirar hacia atrás y correr con él. Su padre, el gran general y dios de la guerra...tenía la mano sobre su corazón pareciendo que se iba a caer en pedazos al verlo irse.
Llegó con Angrboda que miraba en silencio la despedida que era un "hasta luego" más que nada-por favor cuídalo, mientras yo vuelvo. Prometí salvar su vida y ahora, voy a traer a nuestra gente y voy a traerlos de regreso.
-lo cuidaré bien-sonrió la joven, una preciada amiga...aunque Atreus tenía sospechas que ella sabía lo que sentía por ella, le dio una pequeña bolsa en sus manos-aquí hay cosas qué podrían serte útil en tu viaje. Una manera rápida de volver y moverte fuera de los nueve reinos. Por favor, cuídate-ambos se dieron un cálido abrazo-nos vemos después.-lo mismo digo-se separaron ante los atentos ojos del dios detrás de ellos, padre e hijo se miraron...Kratos asintió dando la seguridad qué necesitaba para dar el paso decisivo. Atreus le siguió también sonriendo...subió por la ladera iniciando su viaje qué quién sabe cuánto podría durar.
Pero antes de irse por completo se quedó esperando a que su padre saliese de la cueva...cuando sucedió iba acompañado de Freya y Mimir, sonriendo un poco esperaba que la profecía qué él mismo había visto para el mayor fuese de su agrado y con esa emoción tomó sus primeros pasos lejos de la protección de su padre.
Pasó por su casa dónde los recuerdos empezaban a invadirlo, la nieve empezaba a derretirse señal que el Fimbulvetr había terminado, Midgard volvería a su estado original esperaba un mejor hogar para su padre; se lo merecía por completo. Entró a casa dejando su mente viajar por el pasado, grabando en su mente cada recuerdo pues ni sabía cuánto tiempo estaría fuera...fuera de la modesta cabaña se despidió de sus lobas, había dejado dentro su diario que tenía desde niño, dónde tenía todas sus aventuras escritas.Atreus se dirigió al sur de Midgard con intenciones de salir del reino, nunca lo había hecho pero lo iba a averiguar quizá podría viajar cómo Týr pero ¿a dónde debía ir primero? En un mundo tan grande y desconocido ¿dónde iba a empezar a buscar? ¿Cuánto tiempo iba a tardar en ver una persona de nuevo? No, si empezaba a pensar de más tendría temor y ya era tarde para eso.
Caminó durante días hacia el sur hasta que encontró el mar...no tenía drakkar y el bote de Freyr lo tenía su padre, ya estaba muy lejos de su hogar y no sabría qué encontrar más allá del mar-veamos que me diste, Angrboda-el joven revisó el morral sentándose en la arena fría dónde el clima ya había mejorado bastante, dentro del pequeño saco de tela Atreus sacó unas canicas y una nota-recuerda tus pasos y te guiarán a dónde debes ir-leyó-todo lo qué estudié...bien, la canica-era una roja con grabados muy curiosos que conocía bien-¿le hiciste una canica a mi padre? Qué amable eres.
ESTÁS LEYENDO
Cortos God of War.
PrzygodoweEstas historias cortas están basadas en mi fanfic "el ocaso de los dioses" las aventuras no acaban con el Ragnarök terminado. Vamos a considerar qué es algo mucho más relajado, a Kratos ahora solo le va a preocupar el tiempo con los suyos en unas se...