Cortos God of War.

Capítulo 9

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Antes de comenzar, no sé qué estaba pensando antes de mezclas estas historias pero ps pasó Jajsjaja.
Disfruten este cap y a ver que les parece. ❤️
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Al amanecer Atreus finalmente sintió el tiempo mucho más normal…desde que supo de los ataques mongoles el tiempo iba con una velocidad increíble, ya tenía casi dos años lejos de casa, de su padre y todo lo que conocía. Pero tenía progreso, tenía las canicas con él y nadie había visto los mongoles muertos a manos de un joven que podía transformarse en oso.

Todo iba para algo más normal.

Había muchos caminos de tierra pero ninguna señal de vida alrededor, solamente patrullas de mongoles. Aguantaba mucho tiempo sin comida así que eso no era un gran problema…horas y horas de nada y nadie, fuertes abandonados, eso creía.

De frente en el camino de tierra Atreus se topó con una persona, un hombre con un sombrero curiosamente circular, su ropa era muy diferente igual quizá la podía comparar a la que vio en China, llevaba colgando muchos artefactos que desconocía por completo pero sin ninguna arma, iba en dirección a él—al fin, un local—sin querer intimidar mucho Atreus caminaba hacia ese hombre del camino.

De primera mano cuando quedó de frente de él quiso hablarle en mongol, Atreus frunció el ceño—"no me hables en mongol"—sentenció Atreus con cierto enojo.
—¡disculpe usted! Yo creí pensar que era un mongol—mencionó el hombre, era un enclenque comparado a qué él ya tenía bastante músculo desarrollado a esas alturas y además era mucho más alto—mi nombre es Kenji, si se siente perdido yo puedo ayudarlo—dijo muy amable, a ojos del buen Kenji nunca había visto a alguien como él. Un joven pero tan alto y con tanto músculo, de ojos tan azules que parecían joyas y un cabello tan rojo como el fuego definitivamente hacía lo correcto.

—¿qué eres tú? ¿Un tipo de comerciante?—preguntó Atreus con mucha calma, el llamado Kenji estaba igual de tranquilo hasta que vio el arco que el joven llevaba en su espalda, eso ya lo empezó a poner muy nervioso.
—¡sí! Mi nombre es Kenji ¿usted tiene nombre?
—Atreus…Atreus Laufeyson—sentenció sonriendo—si estás dispuesto a ayudarme será todo un gusto saber qué es la primera vez en tanto tiempo que no quieren matarme simplemente al verme.

—qué chistoso es—se empezó a reír un poco.
—no me hables de usted…se siente extraño, voy a cumplir dieciséis apenas—comentó Atreus en voz baja.
—¡cómo eres tan alto!—Atreus empezó a reír por su personalidad tan extraña, yendo hacia el norte por los caminos de tierra iba viendo todo su panorama—¿primera vez en Tsushima?
—¿Así se llama esta tierra?
—es una isla, formamos parte de la isla principal: Japón.
—Entonces es aquí, lo que me falta está aquí—se dijo así mismo—¿hay templos por aquí, Kenji?—preguntó el joven mirando ahora con más atención—¿a dónde me llevas? Toda la gente huye de los mongoles.

—has de haber estado días solo con esos monstruos, te llevo a un refugio para que descanses ¿y tus padres?
—Mi padre está en casa, estoy aquí solo—dijo en voz baja—espero ya pronto volver a casa con él, lo extraño ¿sabes? ¿Por qué ayudar a un completo extraño?
—siento que debo ayudar…un buen guerrero me enseñó eso una vez y no le voy a fallar—con una gran sonrisa ahora Atreus lo seguía.
—Bien, entonces llévame, Kenji, te sigo—no es como si se preocupara si podía defenderse perfectamente, tomando un desvío por un camino llegaron a un pequeño pueblo abandonado convertido en una base de sobrevivientes, Atreus iba con calma tratando de no parecer peligroso en absoluto.

—¿A quién trajiste ahora, Kenji? Cerebro de sake—de la nada se escuchó la voz de una mujer llegando lentamente por detrás de ellos, cuando Atreus miró se topó con una mujer de blusa roja, pieles de animal, una espada larga y una daga en su cintura, también un arco mucho más largo que el de él.
—¡Yuna! Que bueno verte por aquí—exclamó Kenji sonriendo, Atreus siguió mirando el refugio improvisado y como mucha gente se empezaba a alejar de él—él es mi nuevo amigo, Atreus, lo traje por si quiere ayudarnos con los refugiados se ve alguien muy fuerte.