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Ataru ya no podía contener su sonrisa, sentado en su lugar, después de escuchar los cargos contra Erin; en varios momentos una risa apresurada moría en sus labios que apretaba con fuerza para no evidenciarse. El oni, en un par de horas, había perdido casi la mitad de su cabello por el estrés; los huecos de su cuero cabelludo eran notables incluso a más de 10 metros.

Sus ojos azules parecían cubiertos por una tela blanca; lucía mucho más pequeño de lo que realmente era y su expresión era de completa derrota. En su lugar, In intentaba no mirarlo mientras con la cabeza baja aceptaba también sus delitos de encubrimiento que lo llevarían al menos a cubrir 10 años de cárcel.

El rey, su esposa y su hija miraban desde un lugar privilegiado, con su dignidad, completamente recuperada y recibiendo disculpas públicas de la mayoría de los diarios en Oniboshi y de cada involucrado en las mentiras de Erin. Aunque como familia, aquel vínculo estaba completamente roto, aún podían estereotipar por última vez aquello.

-En cuanto a Ataru Moroboshi- anunció el juez- también ha resultado culpable por confesión de infidelidad con posibilidad a libertad bajo fianza

Ataru alzó una mano, pidiendo la palabra

-¿Sí?

-Me gustaría rechazar la posibilidad de la libertad bajo fianza

Los miembros del jurado cuchichearon y murmuraron, los reporteros ahora invitados y no disfrazados tomaron notas presurosas mientras Lum, con la mirada endurecida se quedaba en silencio.

-¿Usted está seguro?

-Sí- confirmó con convicción- y también me gustaría pedir que se aplique a este caso el artículo 500

Los presentes exclamaron con sorpresa, estupefactos por la petición del humano. El juez se rascó la cabeza, dudando que el terrícola entendiera el contexto del artículo

-Creo que está confundido- inició para después ser interrumpido

-No estoy confundido, entiendo bien lo que involucra el artículo y por lo que entiendo, es aplicable a un contexto jurídico en el que haya varios involucrados en un mismo caso- miró a Erin que comenzó sacar la cabeza de sus rodillas- sobre todo con el criterio de que todos sean culpables

Lum apretó su falda, el deseo por detenerlo era grande, pero no podía hacerlo, no después de comprender que era necesario, aunque tenía mucho miedo.

-Y nosotros 3 lo somos, de distintos crímenes- anunció levantando un dedo- me parece justo que podamos considerar esta opción

-Los crímenes son muy distintos- gritó un reportero- no puede usted hablar en serio ¿va a perder su oportunidad de salir libre para llevar a cabo un duelo de este tipo? ¿Por qué?

-Es obvio- respondió con sencillez

Erin observó con sorpresa a Ataru Moroboshi, no sabía si era su mente turbada por el fracaso o si sencillamente él era más brillante y nunca pudo verlo, pero no había imaginado un escenario en que buscara algo como eso; se sentía contrariado, una mezcla de confianza y miedo nacía en su ser. In por su parte, se mantenía oculto detrás de su cabello enrojecido.

-¿Es usted consciente que perderá todos sus privilegios si se acata al artículo 500? De ustedes 3 saldrá libre el único que sobreviva al encuentro

-Lo sé- anunció

-Y no importarán sus cargos, ni siquiera el de intento de asesinato a la princesa, si Erin gana la contienda, será puesto en libertad y su expediente legal será limpiado

-Lo entiendo- repitió algo fastidiado

El juez, en shock, pensó que había dos posibilidades, o Ataru Moroboshi era idiota o por el contrario, era mucho más inteligente que cualquier persona en la sala; cualquiera de los escenarios era aterrador, mucho más si se analizaba su actitud despreocupada y ¿feliz? Como su tuviera certeza de que saldría victorioso.

23 años | URUSEI YATSURA|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora