~♥𝓓𝓮𝓳𝓪𝓶𝓮 𝓼𝓮𝓻 𝓮𝓵 𝓹𝓪𝓭𝓻𝓮 𝓭𝓮 𝓽𝓾 𝓱𝓲𝓳𝓸//𝐷𝑈𝑋𝐼𝑁𝑂♥️~//✅

💜 CAPITULO 37 💜

—¡Duxo! ¿me has extrañado? He vuelto a casa...mi amor.

Silencio, solo era total silencio, ni había ningún murmullo porque aquellos cuerpos solo estaban entrando en estado de shock y pensar que algunos meses atrás todo era un pozo de gran tristeza.

El ojivioleta no parpadeaba ni mucho menos movía ningún músculo porque seguía procesando lo que veía sus ojos, así fueron varios segundos que hasta cobro el sentido dejando escapar cortos suspiros.

Aquel hombre se acercaba para abrazarlo pero este lo detuvo, lo miraba aún estando tan cerca de este. Tocando suavemente sus rasgos faciales y todo lo que una vez amo, no salían las típicas lágrimas cuando te reencuentras con alguien y eso le extraña, pues siempre fue el llorón de todos ellos.

—¿T-tomy? ¿E-eres tu?

Aquino también estaba demasiado pálido para ser verdad, no movía ni un músculo como respirar. Quería moverse para también comprobar y ver qué no es ninguna magia o una ilusión, era el verdadero.

—Cariño soy yo...¿Me has olvidado?

—P-pero tu habías fallecido, Y-yo te ví en aquella ataúd donde mis l-lagrimas lo eran todo, ¿Que s-significa esto?

—Es...una larga historia pero jamás morí, ¿quién te dijo eso?

El menor negaba con la cabeza varias veces con un poco de miedo y saber que lo que tenía enfrente era su primer amor, no era un fantasma o las alucinaciones que una vez tuvo. Seguía tocando su rostro y todo esto no era un sueño, era la cruda realidad. Dos pasos hacía atrás para no volver a estar cerca pero quería saber porque nunca lo llamo o tener una respuesta de él, no quería volver a llorar por algo que todo esto fue una completa mentira.

Tomy notaba el cambio que tenía su pareja pero al darse cuenta que también estaba Aquino y algo más, un bebé en sus brazos. Estaba confundido y más que quería saber de quién es el niño, tomo del brazo a Duxo para que se vieran fijamente a los ojos.

—¿Ese niño de quién es?

—Es nuestro...es tu hijo.

—Pero no lo entiendo, nunca me dijiste que terminaste embarazado o algo así, ¿seguro que es mío?

—Es tuyo idiota, porque cuando tú te fuiste él ya comenzaba a tener los síntomas pero ahora que me doy cuenta que tu solo querías escapar de una realidad — Aquino lo miraba de una forma retadora, jamás le cayó bien después de que declararán su amor.

—Esta no es tu conversación maldito abogado, además, ¿Que haces en mi casa? Seguramente ese hijo es de él y tuyo.

En ese momento el azabache miro lentamente Aquino quién solo él sabía que había pasado sobre todo estos meses, se había soltado del agarre de su nuevamente esposo y tomo a Liam en sus brazos, mostrándole que realmente es suyo, no tenga algún físico que saco pero la nariz tan respingada lo saco de su papá el felino.

Miraba con atención a ese niño y ver que era tierno como adorable pero esas dudas no las sacaba de su cabeza, quería asegurarse si realmente no era mentira lo que decía pero lo que más le molestaba era tener enfrente al joven abogado. Fue ahí que una gota derramó el vaso.

—Quiero una prueba de ADN para asegurarme que es mi hijo.

—¿Que estás diciendo..?

—Duxo te amo pero no me convences, siento que en los meses que no te estado has estado con él, creo que tú me fuiste infiel.

No podía creer las palabras que estaban saliendo de la boca del felino, ese comentario le había afectado al azabache pero más al castaño que a la defensiva lo tomo de la camisa y lo reto, ya no importa si sigue vivo o no, quería golpearlo, quitar toda esa ira cargada en él.