~♥𝓓𝓮𝓳𝓪𝓶𝓮 𝓼𝓮𝓻 𝓮𝓵 𝓹𝓪𝓭𝓻𝓮 𝓭𝓮 𝓽𝓾 𝓱𝓲𝓳𝓸//𝐷𝑈𝑋𝐼𝑁𝑂♥️~//✅

🧡 CAPITULO 52 🧡

Habían llegado a casa en el cuál se sentía un poco vacía después de los sucesos anteriores pero no era momento de estar tristes si no de seguir adelante con sus vidas.

Aquino fue enviado rápidamente a la habitación en la cuál era mucho más cómoda que la camilla de ese historial siniestro. Le seguía doliendo mucho su herida pero debía mantener la calma antes de que pasará algo más. Estiro sus pies y sentía la calidad de esas almohadas.

Duxo de inmediato le daría un beso en su mejilla para avisarle que haría una sopa para que recupere energías cosa que su pareja le había agradecido bastante. Tomo el control de la televisión y comenzó a ver algún canal que le llame su atención pero para su mala suerte no lo logro.

Intentaba posicionarse mejor pero le dolía mucho su herida como el pecho y eso le hacía sentir un poco intranquilo, no quería preocupar a su pareja por lo cuál solo quiso relajarse nada más. De inmediato veía a Liam que solo podía dormir abrazado de su peluche favorito que con gusto le daba una dosis de ternura que lo veía.

Tocaba suavemente su mejilla y que el bebé estaba en sus sueños más profundos, Aquino le sonreía para apreciar como es tan bonito el hijo de Duxo, lo tomaría en sus brazos con mucho cuidado y lo observaba más de cerca a tal punto de darle un pequeño beso en su cabeza, lo ponía junto a su pecho para comenzar a tararear las canciones que solía cantarle a sus hermanas pequeñas y con mucho cuidado tomaría sus manos para entrelazar en un dedo con su manita. Era en si una escena bastante hermosa.

Duxo subía con la sopa en manos para dirigirse a la habitación pero al asomarse en la puerta sintió un cálido abrazo hacia su alma, una sonrisa apareció cuando los veía abrazados con ese clima tan lindo. Entro al cuarto llamando la atención a su pareja.

—¿Lindo, no crees? — Duxo dejaba la sopa a lado de Aquino en una mesita.

—Es bastante lindo...y mucho más porque parece una copia de ti - reía el mayor quien solo podía apreciar a Liam durmiendo.

—Bueno lo que tenemos los Retheys es que somos una belleza inigualable.

—Mmm con razón me enamoré de ti.

A Duxo le produjo un leve sonrojo en sus mejillas quién esté solo podía dar las gracias, debía comer su pareja así que lentamente tomaría a su hijo en brazos para llevarlo a la cuna y que tomara la siesta de su vida. Despidiéndose de el con una pequeña caricia.

Regreso a la habitación sentándose en la orilla de la cama mientras que apenas su pareja podía sostener el plato entre sus manos, quiso ayudarle así que tomando la comida y la cuchara le ayudo un poco, parecía una escena bastante tierna pero se enamoraba casa vez que el chico le daba un agradecimiento.

Aquino seca sus labios con una servilleta que fue entregada gracias al azabache y no podía despegar sus ojos en él, cosa que intento apartarse pero no lo logra, no es su culpa que haya nacido siendo hermoso.

Duxo lo noto pero no quiso decirle nada, a tal punto que dejó la sopa a lado para hacer señales de que si aún seguía en el mundo y no perdido en sus viajes astrales. Chasqueando como gritando un poco su nombre.

—¿Me estás escuchando?

Apenas reacciono sacudiendo su cabeza, bajando lentamente su mirada.

—Lo siento...es que apenas y pude notar que tú rostro es una simple belleza.

Duxo volvió a sonrojarse y rápidamente apartó la mirada evitandolo, se había formado un silencio un poco incómodo en los dos pero se que no era preocupante. Un pequeño suspiro salió del azabache para volver hablar.

—Pense que te perdía...

—Yo estaba a punto de perderte mucho antes de lo que sucedió...

—¿Eh?