Lesbimonarchy Leonor Y Alexia

Capítulo 54

Pov Leonor:

Obviamente era mentira que tuviese que hacer algo pero la idea de estar a solas con ella me asustaba, quizá era porque nuestro reciente acercamiento había removido algo en mi interior y el volver a entrar en esa montaña rusa de sentimientos era algo que no me convencía. No sabría decir si ella pilló mi mentira, lo que sí que se notó fue su pesar al ver que nadie le iba a hacer compañía después de aquel día tan confuso. Yo por mi parte volví a mi habitación y organicé mi semana, volver a estudiar podía ser un suplicio si no tenía bien establecido en qué gastar el tiempo y eso es algo que me mataba. Todo se me juntaba en cuestión de segundos, era mi último año en el instituto, tenía un grupo de amigos maravilloso que quizás no volvería a ver, el año que viene estaba obligada a empezar mi formación militar. Me negaba a desperdiciar este año enfocándome solo en eso, también quería disfrutar sin que eso afectase a mi rendimiento escolar.

Mientras mi mente fantaseaba con diferentes hipótesis de lo que sería este año, el tiempo fue pasando, haciendo que casi fuera hora de cenar. Cuando iba a agarrar las llaves para salir, unos golpes en la puerta irrumpieron el silencio. Abrí y allí encontré a mis amigos esperando por mi para ir hasta la cafetería, les regalé una sonrisa y me acoplé al grupo. Seguía faltando Alexia, ¿estaría enfadada con nosotros? ¿Se habría perdido otra vez? Igual se estaba escondiendo del grupo, ¿ y si me estaba evitando? Todas mis dudas desaparecieron cuando la vi sentada con su hermana en una mesa llena de chicos que apenas separaban sus ojos de los teléfonos. Al entrar hicimos contacto visual, sus ojos me miraban como pidiendo ayuda, de hecho podría jurar que parpadeó en código morse diciendo: "S.O.S.", pero como no sé código morse, no le hice caso. Nos sentamos a unos metros de ella, quedando Ornella y yo frente a la pelirroja y la pareja de espaldas, sentía como si alguien no quitase sus ojos de mi y sabía perfectamente quién era.

-Oye- llamó mi atención mi amiga -Como que cierta persona no deja de mirarte- los chicos se dieron la vuelta y la saludaron con la mano, ella siguió con su cara de pocos amigos.

-¿Os habéis reconciliado?- preguntó el rubio subiendo y bajando las cejas, le di una patada por debajo de la mesa -¡Ay! Vale, vale, ya lo he pillado-

-No hay nada que reconciliar- seguí comiendo mis san jacobos.

-¿Creeis que estará enfadada por que no nos sentamos con ella?- la volvimos a mirar y ella continuaba con su vista fija en nosotros.

-Puede ser pero, yo no quiero estar cenando junto a unas crías que enseñan su outfit al ritmo de Si no estás- todos asentimos. No pasó mucho cuando alguien golpeó la mesa.

-Sois unas zorras- el danés se iba a quejar cuando Alexia le interrumpió -Tú la que más Nikolai, me ibais a dejar morir de aburrimiento junto a esas pick me. ¡No saben quienes son los One Direction!- a mi se me salió una sonrisa recordando aquel día que llegó borracha a la habitación -¿De qué te ríes princesa? Venga hazme sitio- acercó una silla y se sentó a mi lado haciendo que nuestras manos se rozasen en el proceso.

-¿Por qué estás tan cerca de la española? Alexia, ¿algo que decir?- preguntó Nico inclinándose sobre la mesa -Ah, ya veo, sois novias y no nos lo queréis decir- el rostro de la holandesa pareció volverse algo más rojizo, no entendía como en un verano había pasado de ser la tía más dura del mundo a sonrojarse por una insinuación de nuestros amigos mononeuronales.

-¿¡Que?! Que va, jamás haría eso. ¿Yo? ¿Con quién? Está claro que no me conoces... ¿El tiempo está muy bonito no creeis?- se había vuelto una bomba de nerviosismo de un momento para otro por lo que decidí intentar calmarla colocando mi mano sobre su pierna, ya que no paraba de moverla.