Lesbimonarchy Leonor Y Alexia

Capítulo 26

Pov Leonor:

-Espero que Eco sea un perro- susurró Tino.

-Sí, es un poco tonto pero se le quiere, aunque ahora supongo que estará confuso porque le faltan las bolas, no sé cómo funciona eso- dijo haciéndonos reír mientras encendía el motor -¿Entonces no queréis que pilote el avión? Mira que yo aprendo rápido-

-Juan... estuve todas las navidades intentando enseñarte a hacer el Renegade y no te sale- susurró Ornella.

-Pero es que es muy difícil y no sé bailar- respondió él haciendo un puchero.

Durante el resto del camino seguimos charlando y escuchando las discusiones de Tino y Juan sobre si en una batalla sin armas ni poderes ganaría Goku o Doraemon. Yo me centré en observar el panorama; Nico se quedaba embobado mirando a Tino aunque de vez en cuando echaba un vistazo al móvil supongo que esperando algún mensaje de Alexia, la italiana nos iba guiando con el google maps aunque varias veces elegimos la salida equivocada en las rotondas. Estaba muy agradecida de tener un grupo de amigos donde poder ser yo misma sin la presión de las cámaras y el resto de la realeza pero esa calma se vio interrumpida por la masa de periodistas que de alguna forma se enteraron de nuestros planes.

-¿Qué hacemos? Nunca he estado en esta situación sin mis padres y no sé qué decir- iba a entrar en pánico.

-Creo que igual no venir en uniforme no fue buena idea- dijo Juan mirándose en el retrovisor.

-Juan estás guapísimo da igual, avanza y vamos por la entrada de atrás- trató de tranquilizar el ambiente Nico.

Y así lo hicimos, tan pronto como avanzamos hasta la barrera se nos acercó un guardia que al vernos a todos nos abrió la valla. Al girar la esquina del aparcamiento se empezó a ver un jet parecido al de mis padres pero sin la bandera de España, en su lugar era una de la Unión Europea, al lado de las escaleras estaba la pelirroja con gafas de sol a pesar de que el cielo estaba nublado.

Bajamos del coche y fue en ese momento que ella se giró a cámara lenta o eso me pareció a mi, llevaba un pañuelo atado al cuello, una camiseta blanca y unos vaqueros, tras girarse nos sonrió y mientras el resto iban sacando sus mochilas del maletero yo seguía mirándola, ella aprovechó para bajar un poco sus gafas y guiñarme un ojo. Rápidamente esquivé su mirada mientras el rubor invadía mis mejillas.

-Y yo le digo la modelo- escuché decir a Ornella –Que guapa vienes, ¿a quién quieres enamorar?- dijo para soltar unas carcajadas.

-Esa persona ya lo sabe o eso espero- dijo para subir las escaleras del avión.

Alguien me apretó el hombro y di un salto del susto.

-Perdón, no quería asustarte pero o subes o se van sin ti así que corre pequeña gacela y aprovecha para acercarte a quien tú ya sabes- susurró Juan para después darme un abrazo y subirse a su furgoneta –¡Por España!- gritó antes de irse.

Yo me reí y suspiré antes de subir. Por dentro era igual que el resto de jets privados, como los que enseñan las Kardashians, solo que esta vez habían girado los asientos y así Nico y Tino tenían más intimidad mientras se daban mimos, Ornella estaba durmiendo junto a su cojín de Brigette Lundy-Paine y solamente quedaba un hueco junto a Alexia así que supuse que me tocaba ir con ella.

-Perdona, ¿me dejas pasar?- pregunté tímida ya que ella estaba en el asiento que daba al pasillo.