Siempre Juntos (Itanaru)

Capítulo 21

Naruto observaba a su madre arreglarse -¿estás seguro cariño? aún puedes ir con nosotros, sé que no te ve con buenos ojos Fugaku, pero eres parte de nuestra familia ttebane -el menor negó con seriedad -es mejor que no vaya, no quiero incomodar a nadie, debe ser el día más feliz para él -sonrió forzado. Kushina sabía que su hijo no estaba bien, no eran estúpidos, sabían que eso no era amistad, su hijo amaba a Itachi a pesar del tiempo, levantó su mano, acarició su mejilla con amor -estamos contigo cariño, sabes lo que sientes, no te reprimas y habla con nosotros ttebane -Naruto sonrió nuevamente -vayan y diviértanse ma, te ves hermosa -Kushina sonrió coqueta -soy hermosa ttebane -ambos sonrieron. Minato abrió la puerta -me acabo de enamorar nuevamente -Naruto sonrió con cariño a sus padres -salamero, vayamos, Menma-chan espera en la puerta ttebane -Minato asintió, observó a su hijo, besó su frente suavemente -estamos contigo hijo, no nos excluyas de esa mente tuya, te gusta darle vueltas bastante a todo y eso me preocupa -Naruto sonrió -no exageres pa, vayan, aquí estaré -el kage suspiró con ansiedad, asintió, salió con el resto de su familia.

La mirada de Naruto se hizo gris en cuanto su padre salió, hizo sellos usando el sello de chakra para ocultar su presencia, salió de su hogar, brincó sobre los árboles hasta el barrio Uchiha, con su habilidad sensorial evitó a los guardias del lugar, se colocó en el árbol con mejor vista de la zona, podía ver a los invitados llegar, uno tras otro llegaban, su familia entró en el jardín, fue guiada a un lugar privilegiado por ser la familia del kage. Fugaku y un alto azabache de cabello largo llegaron al altar. Naruto podía observar al líder acomodar el cuello del obi de su hijo, no había visto a Itachi en esos últimos meses, ese sujeto cubría su vista, cuando el patriarca se movió, Naruto vio a un hermoso sujeto, ese rostro que tantas veces observó, serio y taciturno como siempre, su corazón latía con fuerza, sus azules se aguadaron sin poder dejar de verlo, por minutos lo apreció desde su lugar, comenzó a recordar sus besos, su mirada, como siempre estuvo a su lado, podía recordar su mirada llena de sufrimiento aquel día en la cabaña; salió de sus pensamientos, escuchó la marcha nupcial, su pecho comenzó a doler nuevamente al ver una leve sonrisa en él, giró su mirada viendo a Izumi abrazarse de su brazo.

Naruto apretó sus puños con coraje y dolor -la traición duele ¿no es así?, pero él no tiene la culpa, él sólo busca su felicidad ¿quién es el culpable? ¿quién es el verdadero culpable de tu desgracia? ¿De tu sufrimiento? -el zorro sonrió abriendo sus ojos con maldad -Danzo ya no existe, no puedes seguir culpándolo, tu sabes quién es, ahí está parado a su lado con una sonrisa arrogante, su padre, él los alejó, él lo alejó de tu lado, se valió de artimañas para convencerlo, para arrebatarlo -la mira gris se hizo filosa, giró nuevamente sus gemas viendo cómo Itachi colocaba un anillo en esa asquerosa mano, su ceño se apretó con coraje, se levantó de ese maldito árbol, corrió lejos de ese asqueroso complejo, corrió con todas sus fuerzas hasta llegar a aquella vacía cabaña, ese lugar lleno de promesas huecas, afiló su mirada con coraje, sacó un bonche lleno de papeles bomba hechos por él, no tenían registro alguno suyo, los lanzó en un kunai base sin registro de los que usaba en anbu. Una enorme explosión se sintió en la aldea, todo habitante en Konoha se dio cuenta, una gran fumarola salía de entre el bosque, el Namikaze vio arder todo por un momento, de inmediato se arrepintió, comenzó a llorar con dolor, era un idiota, los celos lo cegaron, su Itachi debía cumplir su promesa, él no era así, se regañó mentalmente por escuchar al zorro, salió del lugar con velocidad al sentir a los shinobis acercarse.

….

Itachi abrió sus onix demasiado al ubicar la dirección de la explosión, bajó su mirada con dolor y frustración, lo había perdido para siempre, pero si eso significaba evitar más desgracias y mantener su vida a salvo, no se arrepentía "sonríe maldita sea, te lo advertido marica, si no sonríes seguiré buscando formas para lastimar a tu marica, ya se te olvidó que provoqué ese infarto. Tan débil salió el maldito idiota, no soportó la noticia de tu boda". Itachi apretó sus puños acumulando odio. El Hokage y shinobis de toda la aldea corrían al lugar con velocidad, al llegar se dieron cuenta que no había nada, no había rastros, ni vestigios, los shinobis de rastreo llegaron cubriendo el perímetro, nadie sabía qué había sucedido, la gente fue llevada a los refugios y esa tan hermosa boda, había concluido sin celebración, sin sonrisas, ni luna de miel.