Siempre Juntos (Itanaru)

Capítulo 48

Naruto caminaba por la aldea, se había comido algunos platos de ramen, quería observar un poco las telas para su ajuar y el de Itachi, se sonrojó un poco al imaginar ese grandioso día, entró a distintas tiendas, en la tercera sus ojos se abrieron enormes, tomó una hermosa tela de seda que colgaba en la zona especial, con los pulgares acarició suavemente la tela, la elevó imaginando cómo se vería en él y cómo su Itachi lo vería, mordió sus labios con emoción, observó el precio con atención, era demasiada cara, aún tenía el dinero de la herencia del bastardo de Danzo, sonrió con diversión, las damas de la tienda comenzaron a colocarla sobre su cuerpo -esa tela se ve muy extraña en ti Naruto, tal vez deberías buscar algo más-

El rubio apretó ligeramente el ceño, giró su mirada viendo a Mikoto tras de él -¿cómo extraña? -la Uchiha sonrió con sarcasmo -ya sabes, esa tela es para alguien con más estilo, más femenino, tal vez para una chica, eres un hombre te recuerdo, lo mejor será que uses el traje típico, no queremos pasar vergüenzas -las señoritas que atendían se sintieron incómodas ante el comentario. Naruto la vio con molestia, giró su mirada a las chicas, sonrió amable- ¿pueden tomar las medidas?, la compraré, buscaré algún diseño bonito, para no verme "extraño" -la chicas sonrieron, tomaron la tela y salieron de ahí. Mikoto lo veía con seriedad, el menor no se doblegaba a pesar de su comentario, regresaron y comenzaron a tomar medidas, la azabache no lo perdía de vista y Naruto simplemente hacía como si no existiera, al final las chicas salieron mientras él acomodaba su ropa.

-No me agradas, nunca lo has hecho, mi hijo merece más, es el líder del clan Uchiha, tú lo cambiaste, lo hiciste alguien a tu gusto y pensamientos, lo has manipulado igual que al resto -Naruto levantó su mirada con frialdad -que bueno que pensamos igual suegrita, si me disculpa, tengo muchas cosas que hacer a diferencia suya -Mikoto apretó el ceño con molestia viendo como el rubio salía dándole la espalda.

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-¿Así que la bruja sacó las uñas? te lo dije bonito, esa vieja bruja es una loca más al gremio, debes tener cuidado, deberías hablar con tus padres por lo menos, ya que no quieres hacerlo con bizcocho -Naruto negó -no, no es necesario, no quiero crear enemistad entre nuestras familias, puedo soportar a la bastarda, no te preocupes, sólo quería desahogarme -Anko sonrió con maldad -por cada mal rato que te haga pasar, su marido comerá mierda -ambos rieron con diversión -dame un poco de tu dulce -la pelimorada lo vio con duda -agarra los que quieras ¿estás embarazado?- Naruto abrió sus gemas con sorpresa, comenzó a ahogarse -no digas tonterías bastarda, nos cuidamos, ¿a caso quieres que papá mate a Itachi? -rieron con diversión al imaginar el infarto en el kage, el rubio comía con emoción el dulce pensando en su próximo matrimonio y sus futuros hijos, sonrió divertido.

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-Mikoto, no seas tímida, come un poco- la azabache sonrió ligero comiendo un poco de los bocadillos -están deliciosos Kushina, debes pasarme la receta -Naruto bajaba las escaleras con seriedad al reconocer el chakra de la Uchiha, vio bocadillos en la mesa y no dudó en tomar algunos -Mikoto-san, buen día -la señora sonrió -me da gusto verte, traje algunas ideas para las invitaciones, supongo debe ser una boda enorme ¿no es así? -Kushina sonrió con emoción. Naruto apretó el ceño al ver los diseños en la mesa, esa mujer sólo quería joder, eran invitaciones similares a la anterior boda de Itachi, mordió su mejilla con coraje -de hecho, pensábamos que sería algo más íntimo, nuestras familias y amigos, algunos consejeros -Mikoto apretó ligeramente el ceño -pero Itachi es líder del clan, por lo menos debe tener a toda su gente. Kushina vio a su hijo con duda, había hablado de una gran boda, ¿entonces? -están deliciosos estos bocadillos ma, ¿puedo llevar más?, iré con Anko a ver diseños para mi ajuar de boda.

Mikoto sonrió linda -¿vestido? creí que usarías el kimono Shiromuku para hombre -Kushina la vio con curiosidad -no Mikoto, Naru quiere usar el de chica, así lo decidieron, lleva los bocadillos contigo cariño ¿no sabía que te gustaba el alga? -Naruto sonrió lindo para su mamá -tiene días que me encantan, tal vez estoy cambiando de gustos -la pelirroja sonrió divertida, tal vez dándose una idea lo que pasaba, lo observaría unos días más, empezaría a tejer. Naruko subió a la mesa -dame onii-chan- Naruto besó sus mejillas dándole bocadillos a la pequeña. Mikoto perdió la falsa sonrisa al darse cuenta del posible embarazo, vio a Kushina levantarse, se levantó a su espalda observando cómo comía el chico, sonrió con burla -Kushina, debo irme, se hace un poco tarde -la pelirroja sonrió cargando a su hija -cuando quieras venir, con gusto platicamos un poco, Naruko-chan y yo estamos aquí felices de recibirte -la Uchiha asintió -nos vemos Naruto, espero te la pases bien en búsqueda de tu ajuar -el rubio asintió, pudo sentir el sarcasmo ligero en su voz, sonrió a su madre saliendo del lugar.

Anko veía a la señora retirarse de la casa Namikaze -bruja desgraciada, ni siquiera un saludo -Naruto rio -eso que tú no tienes que soportarla- ambos rieron con diversión caminando hacia la tienda de telas -te encantará, valió la pena la pequeña fortuna que pagué por esa tela, es hermosa y suave- la pelimorada sonrió -el bizcocho tendrá un derrame nasal si sigues así bonito -ambos rieron entrando a la tienda, las chicas del lugar veían nerviosas al rubio -Naruto-sama, lo lamentamos- el rubio las vio con duda inclinarse -¿Qué sucedió?- la gerente se levantó con vergüenza -alguien destruyó la tela que había seleccionado, estamos tratando de conseguir una nueva, no sé qué… lo lamento, debimos ser más cuidadosas -

Naruto veía la hermosa tela que había comprado totalmente desgarrada y deshecha, apretó el ceño cabreado, levantó sus fríos azules -hijos de puta bonito, obviamente conseguirán otra igual ¿no es así?- la Mitarashi los vio con amenaza, las chicas asintieron con velocidad -le prometo que conseguiremos sino una igual, una totalmente parecida y de igual calidad, tenga paciencia, pueden ir viendo los diseños, estará a tiempo -Naruto apretó la tela entre sus puños -me caso en un mes ¿qué harán en un mes?, mierda -talló su rostro con desesperación. Anko sobó su espalda -ellas lo harán bonito ¿no es así? -asintieron con velocidad ante la mirada amenazante de la chicha, salieron del lugar -fue ella ¿no es así? -Naruto asintió con coraje -bruja de mierda, ahora entiendo, su misión es joderte -el rubio asintió -vamos por un ramen, esto me dio hambre -Anko sonrió -sí el hambre no se va, es que todo funciona contigo -ambos rieron más tranquilos, el Namikaze trataba de calmarse.