Capítulo 18

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Entré a mi turno bostezando, tenía turno de noche así que llegaba por la tarde después de haber pasado toda la mañana durmiendo, no recordaba lo asquerosos que eran estos turnos, cuando estaba en el FBI no era necesario hacerlos, solo tenía el turno que quisiera ya que Horacio era mi jefe y él no tenía problemas con eso.

Sostenía un café bien calentito en la mano mientras caminaba por la comisaría, iba a ir directamente al despacho para ver los informes que se habían realizado en el día y ponerme un poco en situación de cómo estaba siendo la ciudad cuando un ruido llamó mi atención, desde el vestuario se podía escuchar a gente discutiendo.

一¡Como vuelvas a llamar así a mi hermano te voy a meter la porra por el culo, cabrón! 一Escuché, no tenía duda que era la voz de Gustabo, me quedé quieto, agarrando la manilla de la puerta de mi despacho escuchando atentamente.

一¿Acaso he dicho alguna mentira? 一respondió una voz que tardé un poco en identificar, era Brown.

一¡Te vas a enterar, gilipollas! 一gritó Horacio y en cuanto lo hizo el ruido se volvió mayor, no dudé en ir hasta el vestuario, al entrar vi a algunos agentes agarrando a Horacio y a Gustabo mientras otros agarraban a Brown, en cuanto entré se hizo un gran silencio.

Caminé lentamente y me puse entre ellos, dejando mi café sobre uno de los bancos que había allí y entonces miré a Brown, Gustabo y Horacio, en ese orden.

Brown desvió la mirada hacía su taquilla, parecía tenso y algo enfadado, luego estaba Gustabo que miraba fijamente a Brown lleno de asco y luego estaba Horacio que en cuanto se encontró con mis ojos agachó la cabeza, como si estuviera avergonzado de lo que estaba pasando.

一Agente en prácticas Pérez, ¿puede decirme que está sucediendo? 一pregunté cruzándome de brazos.

Horacio y yo habíamos hablado largo y tendido sobre esto, aunque fuera mi novio no podía tener un trato preferencial con él y él estaba de acuerdo en ello, habíamos decidido mantener la profesionalidad en las horas de trabajo y en cuanto estuviéramos fuera de servicio seríamos una pareja normal.

一Yo... 一Comenzó Horacio y una risita se escuchó, me di la vuelta rápidamente para mirar a Brown que seguía sin mirarme.

一¿Qué coño le pasa, Brown? 一pregunté muy serio, mirándolo fijamente, podía ser que los años me hubieran hecho un poco más blando pero estaba claro que podía seguir siendo el comisario hijo de puta que no dejaba pasar ni una, siendo serio y cortante cuando la situación lo ameritaba y esta era una de esas veces.

一Nada, solo me resulta curioso que le preguntes a él por lo que está pasando 一respondió Brown y me miró, mantenía esa actitud hasta que movió la cabeza y me vio, yo estaba totalmente serio, con el ceño fruncido.

一Oh, ¿en serio? no sabía que debía preguntarle con quién coño quiero hablar primero, cierre la puta boca, ¿entendido? 一Brown chasqueó la lengua pero asintió, agachando la mirada cómo estaba haciendo Horacio, podía ver como sus hombros se tensaban y cerraba los puños, seguramente aguantando la rabia一. Siga, Pérez.

一Verás..., yo estaba con Gustabo cambiándonos para salir de servicio cuando Brown hizo unos comentarios... 一dijo Horacio y yo asentí levemente, manteniendo aún la misma postura.

一¿Qué comentarios? 一pregunté.

一Qué era tu perra, dijo que Horacio era tu puta perra y que follaba contigo porque quiere un jodido ascenso 一habló Gustabo, cruzándose de brazos sin dejar de mirar a Brown.

一¿Cómo? 一No podía creerme lo que me acaba de decir Gustabo, miré a Brown que no levantaba la mirada一. ¿Es eso cierto?

一¡No! ¡No dije eso! ¡Están mintiendo! Ellos entraron y comenzaron a buscar pelea conmigo 一dijo Brown, miré a mi alrededor y todos los que estaban allí miraron a otro lado, no queriendo meterse en esta pelea que no tenía nada que ver con ellos.

一¡Cómeme el escroto mentiroso de mierda! 一dijo Gustabo y yo lo miré de nuevo.

一Vamos a mantener la calma, Horacio, ¿lo que ha dicho Gustabo es verdad? 一Horacio volvió a agachar la mirada, asintiendo levemente, se notaba que esto no le gustaba para nada, a fin de cuentas era su superior y sus compañeros estaban diciéndole cosas hirientes por eso, sentí mi sangre arder así que carraspeé一. Brown, queda suspendido de sueldo hasta dentro de una semana 一hablé claro y alto.

一¡Pero! 一dijo rápidamente Brown levantando la mirada de nuevo一. ¡No es justo que lo creas solo porque es tu novio!

Apreté los puños y cerré los ojos, no tenía porqué soportar que un imbécil insultara a mi novio cuando no se lo merecía, Horacio era mucho mejor agente que Brown, podría pasarle por el lado en cuanto quisiera y yo mejor que nadie sabía que así sería, Horacio sería el dueño de la ciudad y no dejaría que nadie le faltara el respeto así, pero hasta que llegara allí yo lo haría por él.

Miré a Brown y caminé hacía él mirándolo fijamente, quería pegarle un puñetazo en la cara y parecía que él notó mis intenciones ya que dio unos pasos hacía atrás hasta chocar con unas taquillas, entonces me agaché un poco, la diferencia de altura era notoria.

一Esta suspendido de sueldo hasta dentro de una semana, ¿ha quedado claro? 一hablé muy despacio, asegurándome de enfatizar cada palabra, él tragó saliva y asintió repetidas veces一. Da gracias que estoy de servicio porque te juro que ahora mismo quiero reventarte la puta cara, y ahora te hablo como Viktor y no como el comisario Volkov. 一Me acerqué un poco a él dando un fuerte golpe en la taquilla que resonó en todo el vestuario一. Cómo te vuelvas a meter con Horacio voy a hacer de tu asquerosa vida un infierno, vas a limpiar los putos baños de las celdas con esa sucia boca tuya y luego te meteré un tiro entre ceja y ceja, dejándote tirado en el basurero que es donde perteneces.

Me separé de él y di un paso atrás, noté como él volvía a respirar, ni siquiera me había dado cuenta de que había estado conteniendo la respiración desde que me acerqué tanto a él, tragó saliva lentamente, como si le costara y sus ojos estaban muy abiertos, asustado después de mis palabras.

一¿He sido claro? 一pregunté y él asintió rápidamente, se notaba que estaba cagado de miedo y eso era exactamente lo que quería一. Bien, ahora largo de aquí, ¡todos! 一grité para que el resto de agentes también se movieran y todos comenzaron a recoger sus cosas para irse de allí cuanto antes.

Agarré mi café que se había enfriado bastante y suspiré, me pasé la mano por el cabello y salí de allí yendo a mi despacho, el sitio al que quería ir en primer lugar. Me senté y comencé a hojear papeles, poco tiempo después alguien llamó suavemente a la puerta y esta se abrió un poco, pude ver la cresta de Horacio de color azul antes que su cara haciéndome sonreír.

一¿Puedo? 一preguntó y asentí, dejando el papel que tenía entre mis manos en la mesa一. Volkov, lo siento, no quería que te metieras en esto ni...

一No te disculpes 一interrumpí, él no había hecho nada malo一, escucha, entiendo que sientas que tienes que disculparte pero no es necesario, soy tu superior y no puedo dejar que los agentes estén metiéndose con otro agente debido a su vida privada 一expliqué aunque realmente no era imparcial con Horacio, la amenaza a Brown no la hice como el superior de Horacio sino como su pareja.

一Lo sé pero..., en serio, lo siento, no deberíamos haber contestado a lo que dijo pero..., me dejé llevar. 一Asentí y me levanté, yendo hasta él, quería besarlo pero estábamos en la comisaría así que puse las manos en sus hombros haciendo que me mirara.

一Horacio, de verdad, está bien, entiendo que tu y Gustabo os dejasteis llevar pero Brown ha sido un capullo y no podíais permitir que dijera eso, si vuelve a pasar dímelo, ¿de acuerdo?


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Buenas buenaaas (>‿◠)✌ Este capítulo lo prometí para ayer pero vino mi sobrina y me quitó toda la energía del cuerpo, tenía muchas ganas de que leyerais este capítulo para que pudierais babear por Volkov como yo...

En fin, nos vemos en el siguiente capítulo ✨(っ◔︣◡◔᷅)っc(◕︣◡◕᷅c)✨

Back to you ~Volkacio~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora