Capítulo 27

301 30 7
                                    

Cuando no eres policía la ciudad parece una cosa totalmente diferente, Horacio y yo habíamos salido a dar una vuelta y mientras caminábamos de camino a una cafetería la ciudad parecía incluso tranquila, algo que jamás pensé decir sobre ella cuando era policía.

Íbamos de la mano parando en cada tienda que veíamos para que Horacio pudiera mirar el escaparate, daba igual que vendieran zapatos, ropa o fruta, Horacio tenía que pararse para curiosear un poco de lo que había en el interior y a mí tampoco me molestaba demasiado, no teníamos prisa.

Estábamos frente a una tienda de ropa cuando un coche paró a nuestro lado, era rojo y bastante grande, rápidamente oculté a Horacio detrás mío, tantos años siendo agente de la ley y militar eran difíciles de olvidar y siempre tenía que estar alerta por si algo iba mal. El coche sospechoso aparcó de mala manera justo frente a nosotros y Horacio miró por mi derecha, aún escondido tras de mí, la puerta del conductor se abrió y de ella vimos salir a una persona, era nada más y nada menos que Emilio Escobilla.

Él se acercó a nosotros y yo me llevé instintivamente la mano hacía donde solía estar mi pistola, por desgracia ahí no había nada, haciendo que chasqueara la lengua, Emilio era una persona peligrosa, no podía confiar en él y menos después de que Horacio y Gustabo vendieran a su hermano, Pablito.

Mantuve a Horacio detrás mía mientras él se acercaba, listo para golpear si fuera necesario, Emilio debió notar lo tenso que estaba porque levantó ambas manos en señal de paz e incluso levantó su camiseta, dejando a la vista que no llevaba ninguna arma, una vez estuve seguro de que era seguro suspiré y dejé que Horacio saliera de detrás mío.

一Vaya, entonces es verdad, al final conseguiste al comisario ¿eh? que joto 一dijo Emilio mirando a Horacio que rio.

一¿Qué puedo decir? Sabía que caería a mis encantos 一respondió Horacio con una sonrisa y ambos rieron.

Me sentí un poco incómodo, él era peligroso y se suponía que debía estar enfadado por lo que pasó con su hermano, aun así estaba hablando con Horacio como si fueran amigos de siempre y nada hubiera pasado entre ellos.

一¿Qué haces aquí, Emilio? 一preguntó Horacio cuando las risas terminaron, poniéndose un poco serio, el nombrado se encogió de hombros con aire despreocupado.

一Solo quería saber si los rumores eran ciertos, ¿has dejado a Conway? 一dijo él mirándome a mí y ahora fue mi turno de encogerme de hombros, él silbó impresionado y asintió一. Te dije que tu no pertenecías ahí, joto. 一Miró a Horacio y él solo sonrió.

一¿Qué más da? Ya no tengo nada que ver con la policía y Volkov tampoco, que le follen.

一No, seguro es igual de joto que tu y le gusta 一bromeó Emilio y ambos volvieron a reír, entonces sentí la mirada de Emilio sobre mí, estudiándome detenidamente一, de ti no me sorprendió, Horacio, pero jamás imaginé que el perrito de Conway lo traicionaría.

一¿Qué me has llamado? 一pregunté y di un paso adelante, Horacio se movió más rápido que yo y se puso frente a mí haciendo que no pudiera dar más de un paso, todo con una gran sonrisa en la cara.

一Vamos, no seas así con Volkov, ¿por qué no vienes con nosotros? Vamos a tomar un café.

一No, tengo trabajo, he empezado a trabajar en los mecánicos, además, no quiero ser la tercera rueda 一dijo Emilio, si le había molestado mi respuesta y mi actitud no lo aparentaba一. Ya sabes, si necesitáis algo, allí estoy.

Sin más se despidió y se subió de nuevo a su coche, saliendo a una velocidad más alta de la permitida e incluso saltándose un semáforo en rojo haciendo que pusiera los ojos en blanco, Horacio se quedó mirando su brillante coche alejarse y cuando desapareció de su vista habló:

一¿Él también forma parte? 一Miré en la misma dirección, ya no quedaba nada de Emilio pero había dejado una sensación extraña en ambos.

一Sí, lo usasteis para entrar en la mafia en mi tiempo 一hablé susurrando, no quería que nadie escuchara nuestra conversación, no confiaba en nadie.

一Cada vez estamos más cerca... 一Miré a Horacio que estaba serio, seguramente pensando en lo que tendríamos que hacer o pasar dentro de poco, ya habíamos jugado durante un tiempo a estar sin trabajo y era el momento de comenzar con el verdadero plan, la parte peligrosa.

一No lo pienses demasiado, lo haremos bien, tranquilo, por ahora debemos esperar solo un poco más 一dije y pasé los brazos por sus hombros, abrazándolo por la espalda, él se dejó hacer y su semblante cambió a una sonrisa rápidamente.

一Tienes razón, vamos a por el café, anda. 一Sonreí y asentí soltándolo para volver a agarrar su mano, haciendo que nuestros dedos se entrelazaran.

El plan de infiltrarse en la mafia era algo que ambos teníamos muy claro y éramos conscientes de que haríamos pero cuando estábamos solos no hablábamos de eso, tal vez porque queríamos disfrutar de la paz y tranquilidad mientras durara, una vez nos infiltráramos todo cambiaría y tendríamos que ir con pies de plomo intentando que nadie descubriera nuestras intenciones, por eso por ahora solo disfrutaríamos de un buen café, juntos, y llegado el momento nos meteríamos en el papel que debíamos hacer para proteger la ciudad y a nosotros mismos.


✿ -------------------- ✿ ----------------------- ✿


Holii, ayer iba a subir cap pero me eché una siesta demasiado larga y no me dio tiempo, de todos modos después de lo del domingo me merecía el descansito... 

Mañana no sé si podré subir algo porque viene mi sobrinita a pasar el día, si no subo nada el jueves tendréis el 28, cada vez nos acercamos más a Volkov y Horacio en la mafia

En fin, nos vemos en el siguiente capítulo ✨(っ◔︣◡◔᷅)っc(◕︣◡◕᷅c)✨

Back to you ~Volkacio~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora