|| My King ||

XXXIV

—Por favor no lo hagas —decía un lindo chico, de cabellera amarilla y ojos cafés.

—amor, ya hablamos sobre esto — responde el chico alto, peli negro de ojos marrónes.

—Yo lo se Seo joonie —hace un ademán de quitarse las lágrimas —P-pero las cosas cambiaron —señala su Barriga de un mes de embarazo —

—No ha cambiado Hikyung —sonríe con pesar, para así acariciar  por última vez a su bebé. — desde el principio te advertí lo que iba a pasar si te enamorabas de mi.

—¿Y que querías que hiciera? —reprocha dolido —¿C-como podía obligar  a mi  corazón a no amarte? —se acerca para abrazarlo.

—Y no sabes lo agradecido que estoy por tu amor —sonríe mientras lo sigue abrazando —Gracias a ti pude olvidarme de mi terrible error por un tiempo—le da un beso en la frente para así mírarlo—pero yo me hice esta promesa Hikyung.... Y ya es hora de cumplirla.

—Por-por favor —suplica —hazlo por nuestro hijo.

—Por el es que lo hago —sonríe — porque yo voy hacer una buena persona para el.

—¡pero si ya lo eres! —

—No voy a sentirme así hasta que cumpla con mi castigo Hikyung —menciona un poco molesto —¡entiendeme por favor! ¡Todos estos años he vivido con esa agonía con mi cabeza! ¡Y si quiero estar contigo de la forma que mereces debo enmendar mi error!

—¡Pero si tu castigo es la muerte! —grita con lágrimas en sus ojos —

—e-entonces lo aceptaré —se mantiene firme y se da la vuelta para así irse —y seré el hombre más feliz del mundo por haber pasado todos estos años contigo.

—a-amor no me dejes —

—siempre estaré cuidándote en donde sea que me encuentre Hikyung —

Y dicho eso, el hombre alto peli negro, dejó a la persona que consideró por mucho tiempo como el amor de su vida... Dejando atrás a su primer hijo, y que quizás jamás conozca... Pero esto era lo correcto.

Por años el espero la llegada de su Rey, para así arreglar todo este asunto...

❄️

Sinceramente Jungkook aun estaba en negación, en todo lo que había pasado en tan solo unas horas... No podía  creerse que esta era su realidad... Y pesar que sienta su aroma y su melodiosa voz serca, no podía permitirse soltarlo.

Porque si, Jungkook aún lo tenía apresado en su brazos, mientras que Jimin le contaba todo lo que había hecho, en todos estos años.... Y siendo sinceros a Jimin no le molesta en absoluto esta sercania. Ya que el siempre se imagino estar así con su rey.

—¿Y dime como es que congeniamos para tener el mismo corte de cabello kookie —pregunta muy divertido Jimin.

—¿Tal vez porque somos almas gemelas? —responde de la misma forma.

—Jajaja Kookie —sacas sus brazos para así engancharse en el cuello de su rey —te extrañe tanto.

—Yo también lo hice pequeño —se aferra más a su cuerpo —Te juro que aun pienso que es mentira lo que estoy viviendo.

—No es mentira mi Rey —aun si quitar su amarre en el cuello, Jimin junta ambas frentes para así chocar amabas narices y darse cariño así —Yo estoy aquí, contigo... Y tu estas aquí, conmigo sin querer soltarme —sonríe —

—Y no pienso hacerlo —le roba un beso nuevamente —jamás pienso soltarte de nuevo, jamás Jimin —ambos se mira fijamente —pudiste no regresar  y lo sabes verdad—el otro asiente —pero volviste a mi...y ten por seguro que nunca más te dejare libre.