Will apretó el gatillo.
No quería hacerlo. Le tenía rencor pero no deseaba matarlo. En el pasado, cada vez que Jack causaba estragos en su ya dañada mente, Will había enterrado el deseo de venganza, pero ahora, con la pistola en sus manos, la rabia bullía en su interior. No había señales de arrepentimiento en Jack, ni una pizca de remordimiento por el daño infligido. Era la despiadada consciencia de su propio poder y el impacto de sus acciones sobre Will lo que lo empujó a ese extremo. En ese preciso momento, impulsado por una amalgama de dolor, rabia y el anhelo de poner fin a ese ciclo de sufrimiento, apretó el gatillo.
El rostro de Jack reflejó tristeza, traición y remordimiento mientras su cuerpo colapsaba con un estruendoso sonido al golpear el suelo. Cayó boca abajo, con un agujero saliendo de su espalda, al lado derecho de su cuerpo. La sangre comenzó a brotar, formando un charco ominoso bajo él.
Hannibal, jadeante por la pelea finalizada, se recompuso con una mirada llena de alivio y orgullo dirigida hacia Will. Por un instante, creyó que el disparo estaba destinado a él. La tensión en el aire se disipó, dejando tras de sí un rastro de alivio y una incómoda verdad que flotaba en el aire.
Will aún podía dispararle a Hannibal. Todavía tenía balas. El recuerdo de lo que Hannibal le había quitado y nunca le podría devolver lo hizo tomar una decisión. Levantó la pistola, apuntando directamente hacia su presa, pero de repente, el suelo pareció tambalearse bajo sus pies. Una oleada de mareo lo invadió, acompañada de un dolor de cabeza abrumador que no había experimentado en mucho tiempo.
Una sensación asfixiante le oprimió el pecho, como si una presión invisible aplastara su pecho. Llevó una mano a su pecho, intentando aliviar la opresión, pero la sensación persistió.
A pesar de que su visión comenzaba a nublarse, logró distinguir la figura de Hannibal acercándose a él. Will, luchando contra la marea de confusión y malestar, elevó la pistola y asestó un golpe directo en el rostro de Hannibal. El impacto hizo retroceder a Hannibal, quien tropezó y cayó al suelo, sosteniendo su nariz ensangrentada.
—Eso fue por Abigail... Y por secuestrarme —articuló Will, dejando en el aire la pesada carga de resentimiento y dolor acumulado
Avanzó hacia Hannibal, ignorando a Jack muerto en el piso, y se colocó encima de él, con ambas piernas a los lados del cuerpo de Hannibal, adoptando una posición dominante. Coloco una mano en el puente de la nariz de Hannibal para detener el sangrado de su nueva herida y causarle cierto dolor. En lugar de reflejar dolor o enfado, Hannibal exhibía una sonrisa, como si Will, en vez de romperle la nariz, le hubiera expresado su amor. Si un golpe no le quitaba la sonrisa nada más lo haría.
Aunque Will sintió la tentación de golpearlo, algo lo detuvo.
Se movió incómodo en su posición, confirmando sus sospechas.
—Hannibal.
—¿Si, Mylimasis?
Will lo miró, enojado.
—¿Por qué estás duro?
Hannibal sonrió, esa tonta y arrogante expresión que tanto detestaba.
—El cuerpo de un adulto masculino sufre erecciones, en su mayor parte, cuando algo lo excita, esto sucede cuando se envían al cerebro neurotransmisores conocidos como...
—Sé cómo sucede una erección, Hannibal. La pregunta es por qué tienes una ahora.
El hombre encogió los hombros, sin ofrecer una explicación. Las ansias de Will por la violencia se enfriaron.
—Eres…
—¿El amor de tu vida? —suministro Hannibal.
—Iba a decir indecente, pero ahora creo que eres un idiota.

ESTÁS LEYENDO
Un nuevo comienzo
FanfictionEn vez de apuñalar a Will, Hannibal decide llevárselo con él a Italia incluso si Will no está de acuerdo. Will está indeciso acerca de esa desición. - En esta historia son versátiles. De no gustarte Hannibal bottom y aún así leer la historia, por fa...