Las Madres De Eunchae.

XXI. Colegio

El primer día de colegio es horrible, el peor momento que todo niño debe de vivir para convertirse en un gran ciudadano. Es un momento de terror donde el ser humano comienza a conocer el mundo y debe de comenzar a adaptarse a él.

La pequeña Manchae se encontraba al frente de la puerta de su nueva y primera escuela. Su mochila azul de "PAW Patrol", su uniforme bien arreglado y con dos coletas hechas por Sakura. Es su primer primer día y, a diferencia de sus compañeros que lloraban por estar lejos de sus madres, ella sonreía, emocionada por descubrir el mundo.

Eunchae miró a Yunjin, la única madre que le acompañaba, ya que, luego de una larga discusión y muchas peleas, sería la madre que el colegio miraría. La primera opción era Sakura, pero ella apenas iba a tener tiempo para ir a reuniones. Kazuha no parecía madre y Chaewon seguro se iba a coquetear a otras madres o a las profesoras.

Eunchae miró hacia atrás. Sus otras madres se encontraban afuera del colegio, al otro lado de la calle. Eunchae alzó su mano y se despidió con la mano, eso hizo llorar a Chaewon. Sakura ya estaba llorando. Kazuha parecía seria, aunque con los ojos acuosos, su cerebro seguía concentrado en la decisión de ir a Holanda.

Chaewon le había pedido a Yena que le pusiera atención a la clase para luego pedirle los apuntes y Sakura le pidió a su jefe que le diera medio día de trabajo. Todas querían estar ahí en el día donde Eunchae diera el paso más importante de su vida.

-¡Hola! Buenos días-se le acercó una mujer a Yunjin, era la profesora de Manchae-¿Cuál es tu nombre, pequeña?

-Miyawaki Kim Huh Nakamura Eunchae-dijo con orgullo. La profesora no se sorprendió, ya lo había leído en la lista de alumnos, solo que había pensado que era un error. Miró a Yunjin, ella solo sonrió, no había plan para explicar el nombre y no sabía mentir-¿Y el tuyo?

-Cho Miyeon, seré tu profesora por todo el año escolar, por lo que desde ahora puedes confiar completamente en mí, te protegeré en todo lo que tu madre te protege y te guiaré en muchas cosas nuevas

-Wow ¿Serás mi nueva mamá?

-No-dijo rápidamente Yunjin-solo es una profesora.

-No entiendo-dijo Manchae con un puchero. Yunjin se agachó para explicarle.

-Será como una amiga que te enseñará cosas.

-¿Como Sakura?

-No, es distinto-Yunjin lo pensó un rato, no sabía como explicarle que no es su mamá-solo no le digas mamá-le dio un beso en la frente y se levantó-Es una buena niña-le dijo a la profesora-solo es muy competitiva.

-eso es bueno para los estudios.

-Es muuuuy competitiva.

-Lo tendré en mente.

El timbre del lugar sonó y Eunchae ya quería correr hacia su salón, pero ni siquiera sabia a donde correr. Miró a los niños entrar a un lugar y luego giró la cabeza para mirar a sus madres llorar a lo lejos. Le soltó la manó a Yunjin y besó tres veces sus palmas de la mano y como si estuviera agarrando algo extremadamente valioso, se lo pasa a Yunjin. Yunjin, entendiendo rápidamente lo que estaba haciendo, agarró de la misma forma las cosas invisibles de Eunchae.

-Que no se te caigan en el camino-dijo Eunchae.

-No dejaré que eso pase-miró sus palmas de las manos, imaginándose que llevaba tres bolas de cristales-Se los llevaré, tú disfruta tu primer día.

Eunchae le agarró la mano a Miyeon y mientras la llevaba al salón. Observó como Yunjin caminaba con cuidado hacia sus otras madres, sonrió por eso. Sus besos llegarán bien. Al entrar al salón corrió hacia Hyein, su amiga del parque.

Cuando Yunjin llegó hacia el resto, cada una agarró un beso invisible y entre lágrimas se lo llevaron hacia su bolsillo. Las cuatro sabían que iba a llorar, se había encariñado mucho con Eunchae ¿Cómo no? Ante sus ojos era la mejor hija del mundo.