Amor y Odio

Capítulo 22

Alejandra

Un mes después

Estaba harta de ver la sonrisa de Calle por todos lados, según tengo entendido las cosas entre ellas van mejor que nunca. Tengo que soportar verlas demostrándose amor por todos lados mientras que yo me tengo que conformar con el idiota de Pipe. Que aunque no es malo no puedo amarlo, no como la amo a ella, María José se metió muy dentro de mi y no logro sacarla.

La visita de mi tío Rafael fue breve aunque tengo la leve sospecha que volverá pues lo noté muy interesado en Calle.

-Buenos días- saludé a Cami que estaba en su escritorio.

-Buenos días-

-¿Me haces el favor de llevarme a mi oficina el reporte del mes? Necesito verlo y enviárselo a mi tío-

-Pero eso es el trabajo de Calle-

-Lo sé, pero ahora quiero verlo yo, mi tío me pidió de favor- me vio raro.

-De acuerdo, ahora vuelvo, voy a sacar una copia- la vi irse al área de copias y en eso entró Mario con el ramo de rosas para Calle, las dejó en su oficina y se fue.

Desde aquel día  busqué al responsable de esos ramos de rosas y lo encontré a él, parece que está muy enamorado de Calle y por lo que me contó, Poché suele ser muy celosa así que alteraríamos esa paz que tienen.

-¿Te veo en la noche?-

-Por supuesto- nos dimos un beso y se fue, Mario es un buen amante pero no se compara con María José.

Ahora sólo queda esperar a que vengan y ver la reacción de Poché.

Poché

Estábamos desayunando con un cliente y ya luego nos iríamos para la empresa.

-Perfecto, así quedamos entonces, un placer hacer negocios con ustedes-

-El placer es nuestro- nos despedimos de él.

Salimos del restaurante y nos subimos al auto.

-¿Qué pasa?- preguntó al ver que no arrancaba.

-No tengo ganas de ir a la empresa- dije y ella se sorprendió.

-¿Y eso?-

-Porque al llegar allá lo primero que haremos será separarnos, tú a tu oficina y yo a la mía, no quiero, quiero estar contigo cerquita- dije haciendo puchero y ella sonrió ahora.

-Esta es la Poché de siempre, no ese témpano de hielo que eras- sonreí y besé su mano.

-¿Y si no vamos hoy?-

-Me encantaría pero tengo un reporte que hacer, sabes que si no lo hago Alejandra estará fastidiando todo el día-

-¡Aahh! Tienes razón- le di un beso y conduje hasta la empresa -Oye ¿Y ya no supiste quién te envió flores aquella vez?-

-Nnno, no decía de quien eran, tampoco le tomé importancia-

-Me alegro porque de lo contrario buscaría a esa persona y le dejaría claro que contigo no tiene oportunidad- ella sonrió.

-Claro que no, y no pienses en eso que no volverá a pasar- asentí y llegamos a la empresa, le fui abrir la puerta y luego entramos a la empresa, los empleados nos saludaban o mas bien a ella pues a mi me tenían miedo aún.

-Hola Cami- saludé.

-Hola ¿Cerraron el negocio?-

-Por supuesto- dijo Daniela con una sonrisa -Mi querida mujer es una gran negociadora- me sonrojé.