Amor y Odio

Capítulo 47

Daniela

Dos años después

Me terminé de bañar y fui al vestidor para elegir mi ropa.

—Mami, mi abuelo Germán dice que te apresures— Julio Alberto me hablaba del otro lado de la puerta.

—Ya amor— me di prisa y por fin estaba lista.

Cuando salí sonreí al ver llegar a mi pequeña Anto de año y medio.

—Mami— me dio sus bracitos y la cargué.

—Que hermosa estás amor mío—

—Gacias, ya nos vamos quielo vel a mami Poché—

—Sí amor— le di un beso y tomé mi bolso para salir.

Bajé y mis papás me esperaban.

—No si Poché se va a quedar sin habla cuando te vea— negué ante el comentario de mi mamá.

—¿Y Sole?—

—Se fue con Juanca— asentí y salimos.

Acomodé a los niños y luego me subí, Poché haría una exposición en el estudio de Andreita, siempre fue su sueño y por fin lo lograría.

Cuando llegamos vi que había mucha gente y sonreí.

—¿Usted es la artista?— pregunté y ella sonrió.

—Creo que si ¿Te gusta?— me tomó de la cintura y yo del cuello.

—Me encanta, eres mi artista favorita— le di un beso y los gritos de Julio Alberto y Anto nos hicieron separarnos.

—¡Mamiiiii!— Corrieron a ella y se le lanzaron encima —Mami que hemoso está esto— decía Anto aferrada a ella.

—¿Si les gusta?—

—Si mami, cuando sea grande quiero ser como tú— dijo Julio Alberto.

—Así será mi amor—

—Felicidades Pochecita, todos están con la boca abierta—

—Gracias Mafe— todos nuestros amigos la llegaron a felicitar.

En ningún momento me separé de ella, me sentía orgullosa de ser su esposa.

—¿María José Garzón?— preguntó una mujer y volteamos.

—Soy yo— dijo ella.

—Mucho gusto, soy reportera del Diario de la Ciudad ¿Puedo hacerle una entrevista?—

—Sí por supuesto, ahora vengo amor— asentí y me dio un pico.

—Hola Calle— Pipe había llegado.

—Ey, hola ¿Cuándo regresaste?—

—Justo ahora, no me quería perder esto ¿Y Poché?—

—Se fue a dar una entrevista ¿Cómo estás?—

—Bien, aún duele, no te lo voy a negar— asentí, perder a alguien que amas es doloroso.

—Sé que es doloroso pero tiempo al tiempo— él asintió .

Seguimos hablando y de repente él se queda viendo a la entrada y sonrió.

—Justo te iba a preguntar por ella—

—Me dijo que nos encontráramos aquí— ella llegó y le dio un beso a mi amigo.

—Hola amor, hola Calle—