— Oficiales, tendrán que venir con nosotros a esta zona.
— ¿Encontraron algo por allí?
— Si, dos cuerpos exactamente.
El Coronel siguió su camino mientras que Bruna y Jhoan se miraron entre sí, tratando descifrar las palabras del Coronel.
— ¿A caso tiene algo que ver con ese idiota convicto? No, no, eso no puede ser posible. Hace unos minutos teníamos lo necesario para ir a buscar a ese convicto y ahora con esto, solo nos está retrasando.
— No creo que tenga algo que ver con él. Mejor hagamos ese trabajo y luego volvemos.
— Carajos, ¿y dónde está el estúpido de Pole?
— Ni siquiera me he dado cuenta de él. Déjame llamarlo.
Jhoan se alejó de Bruna sacando su teléfono para llamar a Pole. Bastaron algunos segundos que la otra línea dio por afirmar que Pole había contestado.
— No sé dónde estarás, pero si no mueves tu trasero por alrededor de cinco minutos, Bruna te va a matar.
— No estoy cerca de la organización.
— Me vale una hectárea de pepino si no estás cerca, ahora mismo te quiero ver acá.
— Me dieron la indicación de ir a la zona donde encontraron el automóvil. Se puede saber ¿por qué?
— Al parece el convicto estuvo jugando un rato para no aburrirse. Estamos sospechando que es él, ademas que estábamos tratando de localizarlo y todo apuntaba a esa zona, pero la señal se perdía cada segundo.
Por el otro lado, Pole siseaba en sus adentros por la actitud de ese convicto. Él ya se encontraba por esas zonas como hace media hora con Luciana, haciendo su propio trabajo sabiendo perfectamente el temperamento del convicto. Le tuvo que mentir por el bien de la chica que estaba a su lado, no iba a hacer que el plan que habían formado se fuera a la mierda por un estúpido error del convicto.
Por el bien de todos los involucrados, es mejor que nadie se entere de James Müller, pero el convicto no colaboraba en eso.
— De acuerdo.
Siseando bajo, corto la llamada.
— ¿Ocurre algo?
— Ellos vienen para acá — apretó su mandíbula y guardó su teléfono — Esto se volverá un caos al momento que la unidad policial venga.
— Entonces nos sirve... si encontraste al criminal en este lugar y ellos vienen para acá, eso quiere decir que podrían salvar a mi hermana.
No lo entiendes
Pole debía hacer el trabajo solo por salvar a una inocente y con todo la situación yéndose encima, lo estaba agobiando. Ella tampoco debía enterarse que fue los principiantes de que su hermana acabara siendo secuestrada solo por una misión.
***
Sus orbes azulados miraba atentamente a Hannah quien descansaba pasivamente en el gran sofá. Su cuerpo era cubierto por una fina sabana blanca que sacó hace rato de la cama. Él estaba ya bañado, cambiado de ropa y mientras recordaba lo que había hecho anteriormente, había otra cosa que lo inquietaba.
Que nuevos sentimientos surgían a pesar de que intentó no sentir aquello.
— ¿Por qué cada vez que admiro tu rostro, me imagino un futuro incierto a tu lado? — preguntó de la nada — No se que me ocurre, esto no puede surgir en mi ni mucho menos pensar en eso. Soy un convicto que nadie puede saber de mi existencia en este país, pero esto se está complicando.
ESTÁS LEYENDO
La debilidad de un convicto (Tercera Trilogía)
Mistério / SuspenseSer un convicto y tener su objetivo bien en claro, era lo único importante para James. Sin embargo, nunca se imaginó que su objetivo era aquella chica que se ha convertido en su gran perdición, un fruto prohibido, la prometida del comandante King. S...