El caos invadió la casa.
La discusión se disolvió por un momento ante la preocupación por Blanca. Llamamos a la policía, pero la abuela insistió en que no podría haber salido de la finca.
Vi a mi padre y a Will repartiendo instrucciones a quienes estaban dispuestos a ayudar. La abuela discutió con los empleados e intentó averiguar si alguien había visto a Blanca. Ellos fueron a buscarla por la casa y Wolf me acompañó a los establos. Mi mente bullía con posibles lugares donde ella podría haber ido. Seguí mi intuición y fui a los establos para comprobar una hipótesis.
—¿Blanca está jugando al escondite? —me preguntó Erik.
—Sí, pero ella hace trampas porque ha salido de la casa.
—¿Cómo está tan segura? —preguntó Will.
—No lo estoy, pero espero que así sea.
Mi hermana podía ser muchas cosas, pero no era tonta. Jamás se marcharía en medio de la noche, ni escapado fuera del terreno y tampoco se habría ido con un extraño. Eso último quizás, solo si ese sujeto hubiese aparecido en un dorama coreano. La adrenalina bombeaba en mi pecho mezclada con la ansiedad.
Los establos estaban tranquilos. Comprobé cada cubículo y confirmé mi teoría. No encontré al poni, posiblemente Blanca hubiera salido con él. Era el único animal al que había sido capaz de montar a lo largo de los años. Sin embargo, no estaba del todo claro. Mis manos temblaban mientras buscaba entre los arneses y preparaba a Dálmata para salir.
―¿Adónde vas? ―pregunté al ver que Will se acercaba al semental que montó.
―Te acompaño.
Negué con la cabeza. La idea de cabalgar juntos se desvaneció desde que tuvo la osadía de insinuar que mi hermanito nos había visto en pleno acto. Miré a Erik con una sonrisa.
—Will se va a quedar contigo mientras yo busco a Blanca —dije.
—¿Cómo? —preguntaron al unísono.
Ambos giraron la cabeza en mi dirección. Avancé con determinación hacia el pelirrojo, llevando a mi hermano casi arrastras.
—Lo que habéis oído, alguien tiene que ocuparse de él —respondí, tendiéndole la mano de Erik a Wolf—. Hazle compañía, jueguen o den un paseo. Haz lo que harías con cualquier niño.
—Ah, claro, lo que haría con cualquier niño —repitió Wolf, con todo el sarcasmo del mundo— porque tengo mucha experiencia cuidando niños, ¿verdad?
Fruncí el ceño. Hubo un silencio punzante hasta que Will soltó un suspiro, consciente de que tenía una tarea importante por delante.
—Ten cuidado, muerde —bromeé.
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Hecha de Estrellas (TERMINADA, editando borrador)
Teen FictionAunque estudian en el mismo instituto, Aurora y Will son de mundos distintos. Sin embargo, hay algo que les une: la venganza contra sus ex. ¿Qué es lo que pasa cuando a la chica buena le toca sentarse al lado del chico malo en la clase de Biología...