Flufftober. [Multishipp]

22. intercambio de regalos.

 BakuTodo:

Katsuki Bakugo • Shoto Todoroki.

  Sentado sobre el pasto frío del patio delantero de los dormitorios, Shoto Todoroki admira el cielo estrellado. Necesita un poco de silencio y espacio luego de todo el escándalo por la fiesta de navidad. Se sintió agradable poder celebrarlo entre sus amigos, pero aún no estaba acostumbrado a ser tan sociable. Fue algo nuevo que, cuando lo pensaba, le ponía triste. Le hubiera gustado tener esos momentos con su familia, como algunos relataban. Le hubiera gustado disfrutar de la calidez de la festividad al lado de sus hermanos, recibiendo regalos como una familia normal.

—Hey. —de repente Bakugo aparece frente a él, frunciendo el ceño cuando pregunta qué hace allí. —El intercambio de regalos va a iniciar. —le informa.

—Ire en un momento. —sólo necesita calmar sus emociones antes de volver, no quería arruinar nada para sus amigos sólo porque él se había sentido repentinamente abrumado y triste.

Chasqueando la lengua, Bakugo da una mala mirada a un lado antes de sentarse frente a Shoto.

—¿Qué haces?

—Me siento, ¿acaso no puedo?

—Me refiero a por qué.

—Porque estás haciendo esa estúpida cara triste que hace que no me quiera ir de tu lado hasta que pase. —Bakugo dice como si le molestara, lo que hace a Shoto disculparse. —No lo hagas, imbécil. —le regaña e insulta. —Eres tan denso, no lo entiendes a menos que te lo expliquen como a un niño pequeño.

—Bakugo, no sé a qué te refieres.

Suspirando con pesar, Bakugo se pregunta cómo llegó a gustarle alguien tan estúpido como Todoroki. —Escucha con atención. —le señala con un dedo. —Quiero quedarme a tu lado hasta que te sientas bien, eso hacen los amigos, no seas desconsiderado.

Comprendiendo, Shoto sonríe suavemente, agradecido por la clase de persona que Bakugo era detrás de todo lo que decían de él. —Gracias, Bakugo. —dice con sinceridad.

—Has silencio. —Katsuki le mira mal. —Eres tan molesto. —chasquea su lengua. —Toma esto. —saca una pequeña cajita de su bolsillo, extendiéndola hacia el mitad pelirrojo.

Con una mirada confundida, Shoto tarda en tomarla, curioso por la situación. —Pero aún no es el intercambio de regalos. —debian reunirse con los demás.

—Quiero ser el primero en darte un regalo. —Bakugo confiesa con un rubor naciendo en sus mejillas. —Así que apresurate y ábrelo para poder irnos, se me congela el trasero aquí afuera. —se queja, murmurando un montón de otras palabrotas.

Abriendo con cuidado la pequeña cajita, Shoto queda sin palabras. Tomando el objeto, hace que cuelgue entre sus manos.

—Es una antigüedad, pero pensé que te gustaría. —Bakugo explica sin mirar al chico frente a él, se siente demasiado avergonzado. —Puedes abrirlo.

Obedeciendo, Shoto abre el guardapelo, descubriendo que en cada lado tenía la mitad de la foto grupal que se habían tomado ese primer año. —Bakugo... —ere el obsequio más significativo que le habían podido dar.

—No digas nada, es una ton- —sin poder terminar de hablar, Bakugo es sorprendido por un abrazo. Se congela, inmóvil, sin saber cómo corresponder.

—Gracias. —Todoroki se aferra a su camisa, esperando, quizás, a que Bakugo le regrese el abrazo. Sin embargo, tarda demasiado. —Así no los extrañaré tanto durante las vacaciones. —Shoto se separa del abrazo unilateral, pensando que seguramente cruzó una línea. Aún así, Katsuki no le está estallando la cara, por lo que supone que está bien.

—Puedes llamarnos ¿Sabes? —a Bakugo se le escapa. —Estoy seguro de que el tonto de Deku y los demás extras disfrutaran salir contigo o ir a tu casa. —dice sin importancia, dando una mirada a la nada. Sabía cuánto Todoroki disfrutaba pasar con los demás.

—¿Y tu? —aquello le sorprende. —¿Podré llamarte para vernos?

—¿Quieres eso? —recibiendo un adorable asentimiento, a Bakugo se le escapa una sonrisa. Se volvía tan tonto al lado de Todoroki. —Está bien. —acepta.

—Gracias, Bakugo.

—Feliz navidad, bastón de caramelo. —levantandose, ambos caminan juntos hasta la sala común de los dormitorios, siendo recibidos por el escándalo que sus compañeros tenían.

Cuando Bakugo recibe su regalo de parte de Shoto, no puede evitar sonreír con grandeza. Es un llavero con una figurita de All Might colgando. Es sencillo y pequeño, pero su corazón se siente satisfecho porque fue Shoto quien se lo dió.