El vecino ruso de delirious-girl (TRADUCCIÓN)

CAPÍTULO 2 - Libre para irse

CAPÍTULO 2 - Libre para irse

Descargo de responsabilidad: no soy dueña de Vampire Academy ni de ninguno de sus personajes. Todo eso es obra de la maravillosa autora Richelle Mead. Sólo soy la TRADUCTORA de la trama de esta historia.

La trama está escrita por DELIRIOUS-GIRL

La primera persona a la que le conté esto fue a Lissa, por supuesto. Estaba muy triste al saber que la dejaré atrás. El hecho de que estuviera tan lejos de ella la hizo estallar en lágrimas. Pero, después de explicarle mi situación y después de prometerle hablar por teléfono cada dos días, pareció calmarla. Nunca me rendiría con ella ni la olvidaría. Ella era mi mejor amiga. Y ella lo sabía. Y ella se alegró mucho por mí, porque elegí perseguir uno de mis sueños y me dijo que estaba contando con todo su apoyo incondicional. No podría haber deseado que otra persona en el mundo fuera mi mejor amiga.

Las siguientes personas a las que les conté mi decisión no estaban tan contentas de saberlo. Bueno, una persona en particular.

'¡Rusia!, ¡Rusia!' Fue todo lo que mi madre pudo decir después de las súplicas que sostuve. '¡Ni en un millón de años, Rosemarie, Tú no vas a ir.!' Dios, ella sabía que odiaba que me llamaran así.

'Lo siento mamá. Pero con o sin tu aprobación, seguiré yendo.' Respondí con una sonrisa en mi rostro.

'Realmente no lo creo, ¿sabes?. En mi último control, todavía eres menor de edad durante otros ocho meses y, sin un acuerdo escrito de tus padres, ¡no puedes ir a ninguna parte!. Así que, en conclusión, no irás a ninguna parte.'

'¡Bien!, ¿Sabes qué?. ¡Esperaré esos malditos ocho meses!. ¡Entonces volveré a presentar la solicitud y saldré de esta maldita casa para siempre!'.

'¡Cuida tus palabras, Rose!' mi padre se molestó en decir.

'¡Vaya, él habla!. De verdad, papá, pensé que dejarías que mamá se encargará de esto sola. Pero supongo que tú también tienes un comentario que hacer sobre esta situación. Escuchemoslo entonces. Tengo curiosidad por saber cómo vas a insultarme esta vez.'

"De hecho, estaba pensando en dejarte ir". dijo con calma.

'¿Qué?' Fue todo lo que mi madre y yo pudimos decir. Ambas estábamos realmente sorprendidas.

'Sí, creo que vivir solo por un tiempo te enseñará un par de cosas. Por supuesto, tampoco estoy de acuerdo con Rusia, pero supongo que ese lugar es tan bueno como cualquier otro. Además, el hecho de que vayas allí a estudiar es mejor que quedarte en casa sin hacer nada y gastar dinero inútilmente.'

Oh, entonces de eso se trataba. Dinero. No es tan sorprendente, en realidad. Pero ahora mismo no me importaba. Por primera vez en mi vida, este hombre me apoyaba. Si me hubiera dejado ir, en este momento, podría haber dicho cualquier cosa sobre mí.

'¿Estás loco?. Estamos hablando de un país muy lejano, Abe. Está en otro continente, ¿sabes?, dijo mi madre, señalando a su alrededor.

'Sí, soy muy consciente de ello. Pero sigo pensando que deberíamos dejarla ir. De todos modos, por lo que conozco a nuestra hija, ella regresaría a casa en no más de un mes.'

Ay, papá. Eso realmente dolió. Pero yo iba a recibir el golpe. Si ese fuera el camino a seguir, me callaría y dejaría que hablaran mierda.

'¡Bien, bien! ¡Que así sea!' dijo mi madre, con la desesperación llenando su voz. '¡Haz lo que desees!. Haz lo que quieras, no me importa.' Y con eso, salió de la sala, cerrando la puerta detrás de ella.

Un silencio incómodo llenó el aire. Sentí que necesitaba decir algo, pero parecía que no podía encontrar las palabras. Finalmente me aclaré la garganta y dije:

'Gracias Papá.'

Al escuchar eso, el rostro de Abe se llenó de sorpresa. Pero lo que vino después, bueno, me tomó desprevenido.

'Oh, vaya. No tienes que agradecerme. Mira, sé que no siempre estoy cerca y que a veces tiendo a pedirte demasiado, pero sólo quiero que seas feliz.' las lágrimas comenzaron a llenar mis ojos; pero que me condenen si fuera a llorar. Continuó: ''Y ahora, si este programa va a funcionar, lo apoyo. Pero con algunas condiciones." Fruncí el ceño.

Iba a haber una larga lista de demandas, de eso estaba segura. Pero en realidad solo eran dos: no iba a vivir en una residencia universitaria. Él se encargaría de buscar un apartamento. En segundo lugar, iba a terminar lo que estaba a punto de empezar, pasara lo que pasara. Bueno, supongo que podría vivir con eso.