El vecino ruso de delirious-girl (TRADUCCIÓN)

CAPÍTULO 39 - Con el corazón roto

Descargo de responsabilidad: no soy dueña de Vampire Academy ni de ninguno de sus personajes. Todo eso es obra de la maravillosa autora Richelle Mead. Sólo soy la TRADUCTORA de la trama de esta historia.

La trama está escrita por DELIRIOUS-GIRL

CAPÍTULO 39 - Con el corazón roto

'¿Cambiaste de idea?. Está bien, Rose. No te obligaré a nada si no quieres.

'¿Qué? No. No cambié de opinión. Quiero esto más que nunca. Pero yo...' me estaba mirando interrogativamente.

Me senté y me pasé la mano por el pelo. 'Nunca he... um, nunca había hecho algo como esto antes. Y yo pensé que era justo que lo supieras. Dije avergonzada.

Su rostro se ilumina con una gran sonrisa. Se acerca y me susurra al oído: 'No tienes idea de lo feliz que estoy de ser el primer hombre al que te entregas'. Un escalofrío recorrió mi columna y se me puso la piel de gallina en toda mi piel, haciéndola aún más sensible si es posible. Él siente eso, se ríe ligeramente y me recuesta de nuevo. Cada toque que hace en mi cuerpo me está volviendo loca. Procede a quitarme las bragas. Siento sus dedos sobre mi piel caliente, arrastrando el material hacia abajo. Hace lo mismo con sus calzoncillos. Dios mío, es enorme. ¿Va a encajar siquiera?.

Pasa la aspiradora por encima de mí y abre el cajón de la mesita de noche. Saca un condón y antes de abrirlo le digo: 'No lo necesitarás'. Él levanta una ceja. 'Estoy tomando la pastilla. Simplemente pensé que debería estar lista.' Se muerde el labio y responde: 'Perfecto, ahora puedo sentirte por completo'. Y la piel de gallina ha vuelto.

Vuelve sobre mí y me besa suavemente. Puse mis manos en su sedoso cabello castaño. Y cuando él entra en mí, los dedos de mis pies se curvan, gimo en su boca y mis manos se entrelazan, tirando de su cabello. Es una sensación tan extraña. Me dolió un poco, pero fue un dolor muy placentero. Puedo sentir mis intestinos empezando a anudarse.

'¿Te lastimé, Roza?', pregunta preocupado.

Sacudo la cabeza. '¿Tiré demasiado fuerte?'. Digo mientras tomo mis manos y las muevo sobre su espalda.

Me da una sonrisa juguetona. 'No. De hecho, me gustó un poco.

Continúa empujando, moviéndose a un ritmo lento. Puedo sentir mis entrañas llenas. Él encaja perfectamente dentro de mí. Me muerdo el labio. 'Mmmmmm, oh Dios.'

'Más rápido.' Yo digo. No puedo soportarlo más. Algo se está formando dentro de mi vientre. Necesita moverse más rápido.

'¿Está segura?'

'Mhm, no me romperé'.

En lugar de eso, toma una de mis piernas y la coloca alrededor de su cadera. De esta manera, empuja más profundamente. Casi dejo escapar un grito. Pero todavía se mueve demasiado lento.

'Simplemente ve más rápido. Por favor.'

Verme suplicando lo hace gruñir. Me besa una vez más y en un movimiento rápido, nos da la vuelta. Ahora está apoyando su espalda en el poste de la cama. Estoy en la cima. Sus manos agarran mis caderas.

"Ahora puedes moverte tan rápido como quieras".

No necesito ningún otro impulso. Coloco mis manos sobre su duro abdomen y empiezo a moverme hacia adelante y hacia atrás. Sus manos me ayudan a moverme y en cuestión de segundos nos movemos al mismo ritmo. En esta posición, él es capaz de tocar un punto dentro de mí que me hace decir un 'Aaaah' cada vez que lo alcanza. Lo miro y está todo sudoroso. Me mira con tanta hambre en los ojos. Sonrió satisfecha. Empiezo a moverme cada vez más rápido, empezando a jadear ruidosamente. Ambos lo hacemos.

Cuando levanta una de sus manos y comienza a frotar uno de mis pezones nuevamente, grito. La bola de tensión que se construyó dentro de mí está lista para explotar.

"Ven por mí, Roza". Y cuando dice mi nombre, la burbuja estalla y soy arrojada por un precipicio de placer. Empiezo a gritar mientras hundo mis dedos en su carne y me arqueo hacia atrás. Grito tan fuerte como puedo. Nadie más me escuchará de todos modos. Segundos después, siento que él también se suelta, con un gruñido.

Consumida por todo ese placer, simplemente me dejo caer sobre su pecho, jadeando.

"Roza", dice, todavía respirando con dificultad, "estuviste increíble". Sonrió alegre.

'Entonces, supongo que descubrí por qué todo el mundo le da tanta importancia a esto. Se siente como si me hubieras llevado al Nirvana, camarada. Siento que nos estremecemos mientras él se ríe y luego me acaricia el cabello y me besa la frente.

Y supongo que tenías razón.

'¿Acerca de?'.

"Sobre el hecho de que yo iba a ser la siguiente razón por la que gritas".

Levanto la cabeza y lo miro con expresión de asombro. '¿Has oído eso?' Riendo, asiente.

Simplemente nos quedamos ahí tumbados durante un rato.

'¿Qué tal algo de cenar?' él pide.

'Eso estaría bien. Pero primero tengo que ir a ponerme algo de ropa.

"No me importará si te quedas así".

Me rió. 'Por supuesto que no lo harás. Pero iré de todos modos. Estaré fuera durante 30 minutos como máximo.

'Te extrañaré.' dice mientras me besa.

Me levanto, me tapo con una de sus sábanas y lo miro una vez más. Él yace allí en todo su esplendor con una sonrisa engreída en su rostro. Hombres. Salgo corriendo de su apartamento y entro en el mío.

Lo primero que hago antes de ducharme es mirarme al espejo. Mi cabello está desordenado, mi maquillaje todavía está en pie de alguna manera y por todo mi cuello y mis senos hay manchas rojas. Ese bastardo. Hasta mañana se pondrán morados. Pero cuando los miro más, empiezo a amarlos. Me marcan como suya. Y espero que él también me pertenezca.

Me lleva menos de lo que pensaba estar lista. Me vestí con ropa que puedes desechar fácilmente; por si acaso habrá otra ocasión. No creo que alguna vez me aburra de tener sexo con él. Mientras me dirijo a la puerta, me detengo para ver cómo está nuestro pequeño bebé. Floreció completamente y comenzó a crecer. Necesito decirle a Dimitri que tenemos que hacer una pequeña visita al mercado para conseguir otra maceta.

Salí de mi apartamento de espaldas a la salida para poder cerrar la puerta más fácilmente. Escuché un ruido proveniente de la puerta de Dimitri y supuse que iba a venir a buscarme. ¿Me extrañaba tanto?. Me doy vuelta y veo la verdadera fuente del ruido. En el marco de la puerta hay dos personas besándose. ¿ Qué carajo está pasando?. Yo jadeó. Inmediatamente se separan y se vuelven hacia mí.

Estoy petrificada. ¿Quién es esta mujer?. Mi pecho se llena de disgusto. Hace veinte minutos estábamos teniendo sexo. Ahora, estaba besando a esta mujer. Creo que me voy a desmayar. Mi voz sale fría como el hielo.

'Hola, señor Belikov. Señora.' Dije asintiendo en su dirección y poniendo en mi cara la sonrisa más falsa. Podía sentir que me dolían las mejillas. No puedo mirar a Dimitri a los ojos. No puedo mirarlo en absoluto.

'Hola.' ella respondió. Su voz sonaba muy aguda. Ese sonido me molestó hasta lo más profundo de mi ser. Tenía tantas ganas de darle un puñetazo. 'Ah, y por favor, no me llames señora, me hace sentir vieja. Llama a mamá Tasha. Soy la prometida de Dimitri. ¿Y usted es?'

Sentí que me iba a caer al suelo. 'Soy Rose.' Dije, con la voz quebrada. 'Disculpe, tengo que irme.'

Corrí como el infierno. Estuve a punto de caerme dos veces mientras bajaba las escaleras. Pero no podía respirar. Algo estaba presionando mi pecho con tanta fuerza. Tenía que salir de allí lo más rápido que pudiera. Me detengo justo afuera del edificio y vacío mi estómago.

No, esto no puede estar pasando. ¿Estaba COMPROMETIDO?. Y me mintió durante todo este tiempo. Lágrimas calientes comienzan a caer por mis mejillas. ¿Qué he hecho?. Me involucré en una relación con un hombre comprometido.

Empiezo a caminar sin rumbo por las calles. Finalmente encuentro un banco y me siento. Y sentada. Simplemente mirando la oscuridad de la noche.