Capitulo 34-III.

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"Hometown Glory".

Parte III.

–Pensé que te habías ido–Le dijo al ver su reflejo en el espejo del tocador.

–Solo quería avisarte que ya me iba–Camino hacia ella, le quito el cepillo de sus manos abrazándola por la cintura.

–Lo de hace un rato no debe volver a repetirse–Bajo la cabeza mientras el besaba su cabello

–Ya lo hicimos, no hay vuelta atrás–Suspiró–Tampoco estaba en mis planes.

–Es mejor fingir que nada pasó.

–Sabes que no se me da lo de fingir, te extrañaba–Adele se giro aún en sus brazos encarándolo.

–No te hagas ilusiones sobre el hecho de que nuestra relación tenga salvación. Tú mismo renunciaste a eso cuando me diste el divorcio–La acorraló en una esquina del vestidor.

–Lamentó tanto que mis celos hayan podido más que el amor que te tengo.

–Desde el primer día que me hiciste ver como una cualquiera y desconfiaste de mi lealtad hacia ti con el mismo amor que te tenía también comencé a odiarte. No pude evitarlo–Hablo sobre sus labios, sus ojos estaban acuosos y un nudo en su garganta le dificultaba seguir–Mi decepción ahora es más grande que lo que pudieras despertar en mi, si me acoste contigo fue simplemente por ganas.

–Dijiste que yo era el único hombre que había en tu vida–Lo empujó sin fuerza.

–Lo eres, no mentí pero nadie es indispensable–Tomo uno de sus vestidos junto a un saco del mismo color–Lulu odia que Ellie sea cercana a mi, si pretendes convencerla para el viaje es mejor que te vayas de una vez.

–No soportaría verte con alguien más, no se contener mis celos–Tomo su brazo volviendo a pegarla a su cuerpo.

–Nos dejamos llevar por el momento pero es una línea que no se volverá a cruzar. Fue por el deseo y atracción que aún existe entre nosotros, nada más. ¿A caso después de eso ya desaparecieron todas tus dudas y resentimiento hacia mi?

–No–Negó

–Vete ya, tengo cosas que hacer.

–Nos vemos en el aeropuerto, Delly–Asintió

–Suerte–Le dijo antes de salir–Con Lulú–Añadió–Aunque tienes maneras muy inteligentes de convencer a una mujer, no lo necesitarás.

Simon rio irónicamente.

Horas después Adele subía el elevador de la agencia de publicidad de Alex, sus manos temblaban de los nervios pero necesitaba mostrase firme. Su celular sonó y respondió antes de llegar al piso indicado.

–¿Adele?–Se escuchó una voz ronca

–¿Quien habla?

–Soy Mark..–Lo interrumpió

–Papá–Murmuro–Has tardado mucho en llamar.

–Pensé que sería bueno darte espacio después de mi visita, no quería ser un problema más.

–Te lo agradezco–Hubo un silencio que ella decidió terminar–¿Como estas?

–Bien ahora que te escucho–Río–Quería hacerte una invitación claro está que si quieres y puedes.

–Dime.

–Para navidad viajaré a Manchester a pasar unos días con tu abuela y me preguntaba si deseabas ir, ella estaría feliz de conocerte por fin. También me encantaría poder compartir contigo.

The End?. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora