Eres Mia (Completa)

8 El Recuerdo

Callo al oír eso porque ella tiene razón a mí memoria vienen los recuerdos de ese día.

Hace un año

Todavía recuerdo esas vacaciones de verano, tenía diecisiete e Ignacio diecinueve. Estaba acostada en mi cama leyendo, cuando me llegó un mensaje de él.

           Ignacio: Pecosa, vamos con mis amigos a la isla privada de Eliot.😏

           Camila: ¿Cuándo?🤔

           Ignacio: El viernes en la tarde 😌

           Camila: Preferiría no ir, no quiero hacer sentir incómodo a Eliot🙈

           Ignacio: Irás conmigo, tranquila que Eliot ya lo superó. 🤣

Me tardaba unos minutos para responder, él volvía a escribir.

          Ignacio: ¡¿Responde o te comieron el táctil los ratones?! 🙄¿¡O soy tan aburrido que ya te quedaste dormida!? 🤔

           Camila: No, Ignacio, no voy a ir.

           Ignacio: Vamos no me gusta salir sin ti. ¿O prefieres qué invite a otra chica? Después no te quiero molesta si voy con alguien más.🤨

Me molestaba que mencionara el tema de invitar a otras. 

            Camila: Está bien, voy a ir contigo.😁

            Ignacio: Mañana a las cuatro pecosa, te paso buscando por la casa de tu amiga Ceci.😃

            Camila: Okey Ignacio, buenas noches.😘

             Ignacio: Descansa, pecosa.😘

Cuando salía con Ignacio y sus amigos siempre le mentía a mi madre. Es que ella no estaba de acuerdo con nuestra amistad. Le dije que me iría de vacaciones con mi amiga Ceci y su familia. Sí, esa siempre era la excusa, cuando viajaba fuera de la ciudad con Ignacio. Me levanté y empecé a preparar mi maleta con mi traje de baño, un short corto, unas blusas, mi protector solar y otras cosas que pensé en llevar. Le pedí permiso a mi madre y en la mañana me fui a la casa de mi amiga Ceci.

Para mí las salidas con Ignacio y sus amigos eran algo normal. Aunque no quería ver a Eliot porque días atrás fue a buscarme a la secundaria para confesarme que yo le gustaba. Me preguntó si podíamos ser novios, pero lo rechacé porque solo lo veía como un hermano.

Llegué a la mansión, Ignacio me envió un mensaje, donde me decía que subiera al tercer piso a tocar el piano.

Entré a la sala. Apenas me vio se acercó, parecía molesto.

—Explícame, ¿qué le dijiste a Eliot? —preguntó con el ceño fruncido.

—Primero se saluda. Hola. Maleducado —respondí seria.

—Hola, ¿qué le dijiste a Eliot? —inquirió con frialdad.

—¿Qué le dije de qué? —respondí con otra pregunta.

Será que ya sabía que su amigo me pidió que fuera su novia.

—Él me dijo ayer en la universidad, que se te iba a confesar hoy —dijo en un tono frío.

Sus ojos verdes se oscurecieron. Eso solo pasaba cuando tenía mal humor, ¿entonces él lo sabía? 

Por supuesto que lo sabía, eran amigos.