40 Quiero Respuestas

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Camila

Llegamos al comedor es grande hay unas doce sillas, un candelabro gigante que cuelga de arriba, las paredes son altas con unas lindas panorámicas que tienen una vista hacia la piscina.
La mesa está llena de varios platos de comidas... Algunos los conozco porque los ha preparado Ofelia en la mansión. Además, se cuáles son… los platillos favoritos de mi Darcy. Ignacio saca la silla del comedor hacia afuera para que yo me siente y luego se sienta a mi lado.

La señora Ágata, le dice algunas palabras en francés él le responde y luego ella se retira.

—¿Qué es esto? —pregunto mirando la comida, porque están algunos platillos que no conozco.

—Comida francesa —responde con una diminuta sonrisa.

—Sí, ya sé que es comida francesa Ignacio, pero ¿cómo se llama?

Él prueba su sopa y después responde: —Vol Au vent duchesse

Ni idea de lo que me acaba decir, lo miro con desconcierto.

—¿Perdón?, ¿qué? —pregunto frunciendo el ceño.

Me da una sonrisa de boca cerrada.
—Eso es hojaldre relleno de camarones y champiñones, pecosa.

—Ahh, entiendo.

También hay una sopa, no le pregunto que es. Porque sé que es unos de los platillos preferidos de él. La sopa el bisque hormard, lleva cangrejo, langosta y otros ingredientes. Mi madre la sabe preparar, la señora Ofelia la enseñó.

Ya no pregunto más sobre la comida, comienzo a comer y puedo decir que todo está delicioso.

—¿Cómo está tú abuela?

—Delicada tuvo una recaída hoy —me cuenta aplanando sus labios está triste.

—Lo siento —le digo tocando su mano.

—Por eso no pude ir a buscarte cuando llegaste, apenas me avisaron de la clínica me fui para allá.

—Sí ya se. Me dijiste eso temprano, mi Darcy.

Después que terminamos de comer, me preguntó qué si quería ir al balcón, porque hay una linda vista hacía los jardines o si prefería que él me mostrara la mansión. 

—Vamos al balcón —le digo.

Cuando llegamos, observo la preciosa vista hacia un lago y también hacia varias estatuas que decoran el jardín. El cielo se ve tan oscuro, vacío sin estrella y sin luna. Su brazo descansa sobre mi hombro. Los dos estamos callados, cuando lo miro su semblante parece tener alguna preocupación porque tienes sus labios apretados.

—¿Te preocupa algo? ¿Verdad? —le pregunto en un tono de voz suave, me imagino que es su abuela.

Se acerca más, se pone frente a mí.
—Si te pido algo, ¿me prometes hacerlo?

—¿Qué? —pregunto abriendo un poco más de lo normal mis ojos.

—Quiero que me prometas que siempre confiaras en mí.

—Está bien, Ignacio.

—No quiero que me digas está bien —expresa ladeando su cabeza hacia los lados —. Quiero que me digas, te lo prometo Ignacio.

—Sí... Te prometo que siempre confiaré en ti, mi Darcy —. Acaricio su cara y ahora esboza una sonrisa.

—Tú eres mía y eres lo mejor que me ha pasado en la vida pecosa. No quiero perderte nunca. —Me abraza y nos quedamos así unos minutos abrazados en el silencio de ese balcón.

Eres Mia (Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora