Capítulo 64: Sistema de emergencia

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Tenía que buscar la manera de esquivar las cámaras en la noche.

Mi plan era simple pero arriesgado, muy simple y muy arriesgado. De todas maneras no tenía nada más planeado, así que más valía funcionar.

Ese día pasó sin mucho más interesante que contar, en la cena todo el mundo hablaba del espectáculo de la tarde, si alguien no había estado presente, alguien más ya se había encargado de esparcir la noticia.

Todos parecían estar de acuerdo en que no había nada mejor que ser el primero en invitar a tu pareja al baile de invierno, así desde hace generaciones hay una lucha silenciosa por ser el primero. Por lo poco que sé la tradición empezaba desde la madrugada del primero de diciembre, este año se habían adelantado por casi un mes.

Peter parecía no querer hablar mucho de eso frente a MJ. Seguramente aún planeaba su gran sorpresa. Supuse que en cuanto tuviera una idea me la diría. Por ahora, esperaba a que se durmiera para poder seguir con mi plan.

—¿Tara? —Quise girar a verlo antes de contestarle. —¿Sigues despierta? —Murmuró aún recostado en su cama.

—S...

—¿En verdad no te dije nada de la tarjeta de acceso?

Me quedé en silencio y no me moví. Creo que incluso contuve la respiración.

—¿Tara? Es sólo que no estoy seguro de que las cosas hubieran pasado así. Aunque ayer fue un día extraño, por alguna razón recuerdo poco en sí. —Me encorvé bajo las cobijas para que no se viera ni un poco de mi cara. —¿De verdad te dormiste?

Lo escuché bufar luego de eso.

—Descansa.

Quedé en silencio. Así al menos por un par de horas, parecía tener problemas para conciliar el sueño. No me moví hasta que escuché los latidos de su corazón bajar su frecuencia. Incluso así, esperé un poco más.

Me debatía entre usar la máscara o no. Si podía controlar lo de convertirme en sombra, entonces tal vez las cámaras ocultas no me verían. Nada garantizaba que fuera así. Si usaba la máscara y era vista entonces comenzaría una cacería para saber quién era, y no habría manera de escapar. O tal vez solo comienzo a sobre pensar demasiado.

Guardé el traje completo en los bolsillos de la sudadera que había comenzado a usar como pijama por el frío. También metí ahí la tarjeta de acceso y salí con cuidado de no hacer ruido.

En estos pasillos solo debía haber micrófonos ocultos por parte de Alchemax, ¿no? En teoría si no hago mucho ruido no tendría porqué preocuparme. Sin embargo, las salas de maestros son diferentes, la misma Academia tiene la zona plagada de cámaras. Es decir, ahí están los expedientes de cada estudiante, calificaciones y planes de estudio. Además que seguramente objetos personales. Tener eso al alcance de un montón de adolescentes debe ser un riesgo que no están dispuestos a correr.

Por suerte para mí, todas las luces se mantenían apagadas por el horario.

Caminé y crucé un par de edificios hasta llegar al bloque de laboratorios. Donde Peter estudia, y por lógica, donde Olivia trabaja. Peter me había llevado hasta el último piso, no podía usar el elevador así que tuve que subir por las escaleras. Tal vez no me canso de la manera en la que lo hacía, pero eso no quita mi flojera de media noche.

¿Por dónde era? Esta planta sigue siendo enorme.

Podía escuchar las cámaras de seguridad girando de un lado a otro, el lente haciendo zoom o enfocando cada cierto tiempo. No quise correr el riesgo de que un rayo de luz de luna atravesara los ventanales y mostrara mi cara, así que saqué la máscara. Además, no quiero que se me caiga algún pelo y que esa mujer termine analizándolo o lo que sea que haga en su trabajo.

Spider-Woman: Across Our Hearts ৷ Gwen StacyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora