Indebido | Minayeon

Despedida

Mi vista no se apartaba del suero que estaban administrando en mi sistema, escuchando lo que la doctora explicaba sobre lo que me había pasado verdaderamente a papá.

La cantidad de droga que había en mi cuerpo había causado que cayera dormida inmediatamente y que apenas recordase quien me hablaba en ese momento.

Papá me explicó que Do Kyungsoo fue el causante, y su amigo el que me llevó a ese lugar donde ellos me habían encontrado cuando el pago estaba realizado.

-Estara en observación esta semana.

-Me parece bien. -habia dicho papá, tomando mi mano para llamar mi atención- Estaré afuera siempre, princesa, no voy a irme como me ordenas.

Apreté la mandíbula cuando besó mi frente y salió de la habitación dejandome con la doctora que se mostraba simpatica.

-Ellos no tienen la culpa, señorita Im.

-Lo sé... lo sé muy bien -ahogué un sollozo cuando cubrí mi boca, apartando la mirada por donde Papá había salido minutos después por donde Mina también lo había hecho- La culpa... fue mía.

-Hey, no... -la mujer se acercó por mi costado, frotando mi hombro mientras me apegaba a su cuerpo-, No puedes culparte de algo que ya estaba planeado. Escuché cuando te interrogaron que tú madre había confesado ser ella la que causó todo.

El interrogatorio.

Fue lo más extraño e intimidante que me había pasado en mi vida. El policía me hacía preguntas sobre lo ocurrido, además de informar que ya habían conseguido sin vida a los culpables. Excepto por uno que lo habían encontrado con quemaduras de segundo grado o literalmente, apenas estaba vivo.

Lloré de felicidad en ese momento.

Papá y Mina estuvieron presente en ese interrogatorio tambien, y fue la última vez que vi a mi hermana porque yo misma le había ordenado que se largara.

No me sentía bien, no me siento bien que ella toque algo tan... usado como yo. Me sentía como un jodido objeto gracias a Lee Know.

-¿Entiendes? No debes permitir que eso dale a quienes te rodean. La cara afligida de tu padre y hermana por tu rechazo..., es muy lamentable. -me ofreció un pañuelo cuando se alejó, mostrando una sonrisa confiable- Trabajaremos en ello está semana. No debes pensar en sentimientos negativos, Im Nayeon.

Afirmé con mi cabeza, limpiando mis lágrimas para intentar mostrar una sonrisa a la mujer aue intentaba animarme.

Los días pasaban más rápido, la doctora animándome cuando me veía triste o pensativa, contándome de sus experiencias con pacientes iguales o peores a mí.

Me hacia reflexionar, haciendome sentir con suerte porque no sufrí como tal. Era lamentable, pero lo que ella intentaba mostrarme es que la experiencia no se comparaba a otras muchos más peores que si sentían en carne propia lo que les hacían.

No lo entendía, incluse le llegué a preguntar que era bueno que no sintiera nada. A lo que ella dió un "si, lo es" como repuesta. Y seguía sin entender al pasar de los días.

Papá permanecía afuera, lo escuchaba a través de la puerta cuando me levantaba para ir al baño. Y que la doctora me informará que sus aspectos eran lamentables no ayudaban a mi arrepentimiento por sacarlos de donde yo estaba.

-Imagina que te operaras ¿vale? Si no te administrarán anestesia, ¿como crees que sería el dolor, las sensaciones al abrirte el área que sería operada, además de sentir lo que te haríamos en ese momento?

Torcí el gesto, imaginando el peor de los dolores si eso llegase a ocurrir, además de darme escalofríos con solo pensar que revisarán mi interior estando despierta.